end game

2

La cena de anoche fue increíble.

Fue tan buena que me quede con Theo hasta las tres.

Y adivinen quien se está muriendo de sueño y es sábado.. Y tiene una fiesta.

Pues yo.

Acomode mis cosas de pociones debajo de mi cama.

Daphe entro con cucharas congeladas.

Había llorado toda la noche por una saga de libros. No la juzgo porque una vez fui esa. —No superó qué se muriera el amor de su vida— se la puso en sus ojos —Dime... Que sería mi vida sin Enzo.

Solté una risilla —Dap, ni se hablan.

—Lo sé pero así puedo amarlo más—

—Ush, ya te dije que le hables.

—No. Jamás... Que el me hable a mi.

Daphe era muy orgullosa en el tema del amor, era lo opuesto a mi, por eso eramos mejores amigas.

Somos lo contrario —Daphe, imaginate que si es el amor de tu vida y tu no le hablas por el orgullo.

—qué el me hable... Yo quiero un romance como mi libro... Pero que no se muera— volvió a llorar.

—Ya no pienses en ese libro. Mejor piensa que te pondrás hoy.

—Lee ese libro y entenderás mi dolor.

Ay.. Como le digo. —Ya lo leí.

Se quito las cucharas de los ojos para verme confundida —¿Y como no lloraste?.

—tengo corazón duro que te digo.

Es mentira, soy la persona más débil del mundo, aunque soy slytherin, eso no me hace dura. —ujum. Lloraste cuando te enteraste que un pollito se ahogo.

—cállate— hice una mueca —pobre pollito... —

Se rio al ver mi cara —¿Qué, Daphe?... No es gracioso...

Pansy entro a la habitación muy rápido. —bueno tú ¿qué traes ahí qué entraste rápido?— dije.

—Sssh. Conseguí whisky.

—perfecto— celebró Daphe —¿de donde?

—Sssh, son robadas... Mis bebés— abrazo las botellas —dí mi sudor por ellas.

Me reí buscando en mi baúl qué más vestidos tenía. —Y sudaras cuando bebas.

—Ush... No le daré a ninguna si siguen.

—de por si no me gusta tomar— Me encogí de hombros.

Pansy bufo —para que me lo dijiste. Ahora tomarás.

—Ah no no no. Nada, estaré con Theo en la fiesta y no pienso tomar.

—y Theo si.

—Pero Theo es Theo... Yo soy yo, y yo no tomo... Ya lo probé una vez y arde.

Daphe me tiro un peluche en mi cabeza, entre cerré mis ojos —porque se llama whisky de fuego por algo, boba.

—AAASH.

Tocaron la puerta. Pansy y Daphe hicieron guerra para ver quien abría, y al final perdió Daphe, así que ella fue a abrir.

Y ¡oh, sorpresa! Lorenzo Berkshire en su puerta. —Enzo... Un gusto verte. ¿Que haces por acá?.

No pues.. Que amable. —también es un gusto, Daphe. Vengo a invitarte a...

Pansy y yo nos miramos emocionadas. Asome mi cabeza sobre el borde de mi cama, viendo a Enzo nervioso —¿a...?.