Nothing「 Freenbecky 」

Extra #2

(N/A: Este extra está ambientado mucho antes del prólogo, tomen en cuenta que es cuando recién comenzaban a tratarse)

Aquel día de entrenamiento Becky tenía otro tipo de planes para Freen. Desde hace varios días había querido acercarse al modelo, pero la tailandesa era reacia a todos sus intentos por entablar una conversación más allá de lo necesario en cada uno de sus entrenamientos. Armstrong sabía la poca empatía que tenía Sarocha sobre los boxeadores, aún no entendía porque le había pedido ayuda en defensa personal si al principio le costó que confiara en que no la lastimaría, le había demostrado que solo estaban allí para enseñarle.

Becky en poco tiempo había desarrollado sentimientos por Freen, pero no sabía de qué forma podría acercarse si ella parecía alejarse al mínimo intento. Pero ese entrenamiento sería diferente, tenía una proposición que hacer y creía que a Sarocha le interesaría saber la recompensa, o por lo menos eso esperaba. Por lo que, tan pronto como la pelinegra entró a la sala de entrenamiento, Rebecca la saludó con una sonrisa mientras jugaba con sus manos detrás de su espalda.

—Buenos días, Armstrong. —Saludó Sarocha, dejando sus pertenencias en el lugar habitual y se encaminaba hasta las colchonetas.

—Buenos días, Sarocha. —Saludó Rebecca de vuelta, ofreciéndole una pequeña reverencia.

—¿Qué practicaremos hoy?

—La clase de hoy será una evaluación para medir tu progreso, he visto que has podido avanzar de manera significativa así que quisiera ponerlo en práctica, sin que yo te oriente. —Comenzó a decir, viendo la mirada de sorpresa de la pelinegra. —Y por ello, nos estaremos enfrentando.

Freen no dijo nada al principio, aún sorprendida por sus palabras. —¿Dices que pelearé contigo?

—No te asustes, no será como una pelea de las que yo tengo en un ring, solo te mostraré un par de escenarios que podrían ocurrir y tú demostrarás alguna técnica para escapar del peligro, ¿Entendido?

Si bien la pelinegra no parecía del todo convencida, asintió mientras se ponía en una posición de ataque, sin dejar que terminara sus indicaciones.

—Para hacer de esto más interesante, haremos una apuesta.

—¿Qué clase de apuesta? —Dejó su posición de combate y arqueó una ceja, interesada en ello.

—El que logre primero derribar al otro podrá pedir lo que quiera, siempre y cuando cumplamos las principales reglas de solo poner en práctica lo aprendido, tiene que ser dentro del espacio limitado y nada de malas jugadas en el proceso. —Mencionó con una sonrisa.

—¿Lo que quiera?

—Lo que sea que quiera el ganador, sin ninguna objeción.

Freen lo pensó por un momento, asintiendo al final. —Bien, me parece justo.

—Entonces damos inicio. —Cada una se colocó en su respectivos lugares.

Becky comenzó con un forcejeo que tomó por sorpresa a la mayor, pero Freen rápidamente pudo liberarse del brazo que la rodeaba y tomó distancia, preparada para lo siguiente. Rebecca debía de reconocer que la modelo aprendía rápido cada movimiento, ejecutándolo casi a la perfección. Si bien aún sus golpes no hacían tanto efecto en Rebecca como los que acostumbraba en el ring, lograban su propósito de desorientarla y hacer que ganara segundos vitales para ella, al final de cuentas era autodefensa y cumplían con su propósito para atacar y actuar a tiempo.

Lo que no esperaba Rebecca era ser sorprendida por detrás, recibiendo un golpe en la pantorrilla que la hizo caer, para luego ser girada con brusquedad sobre la colchoneta con Freen encima suyo, aprisionando un brazo contra su cuello para evitar que se moviera. La sonrisa en su rostro reflejaba el orgullo que sentía por haberla derribado, pero cuando giró su cuerpo para verse en los espejos y notar un detalle, Rebecca soltó una pequeña risa que desconcertó al pelinegra.