Inicio

4 0 0
                                    

Frío.

El frío era lo único que podías sentir en la humeda y oscura soledad de la prisión de Hetzmin.

Silencio.

El silencio no estaba presente, había gritos y ahogos de desesperación, acompañados con súplicas para que sean liberados.

El perdón no existía para el rey Gabriel II. Aquella palabra o definición de las segundas oportunidades, era un arma de doble filo; aprovecharían esta oportunidad para pulir la traición o servir fielmente al rey.

El Gran Thomas Fess, se negó a ser fiel al rey Gabriel II e inició una rebelión, lo cual no ganaron. Y ahora está en prisión, con frío y el sufrimiento de saber sobre su familia. Él es y sigue siendo los que acompaña los ahogados gritos y súplicas, pero esta vez, grita:

¡Le seré fiel, pero déjeme ver a mi familia!

Y se calla cuando el rey Gabriel II, posa su mirada en él y sonríe, diciendo:

Es bueno escuchar eso, Gran Thomas Fess. Haré una excepción y aceptaré su perdón, pero quiero que lo haga al frente de todo el pueblo.

Y luego se retiró, esperando un grito o insulto, pero nunca llegó.

Ante esta derrota; juró que se vengaria. Por ahora sólo quiere reunirse con su familia.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 07 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Poco de tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora