Bossy {Seongjoong Adap}

Capítulo 15

Compartir la cama con su jefe era de alguna manera lo más extraño que había hecho en su vida, y eso decía mucho.

Hongjoong miró fijamente las franjas de luz de la luna en el techo y respiró con regularidad, tratando de obligarse a quedarse dormido.

No funcionó.

Era muy consciente del hombre a su lado, de su respiración constante y del calor que exudaba. Menos mal que la habitación no estaba caliente, una brisa fresca entraba por la ventana abierta.

-Estás caliente - se quejó Hongjoong.

Park hizo una especie de sonido ahogado, algo entre una risa y un suspiro.

-Gracias - dijo, su voz extremadamente seca.

Hongjoong se sonrojó al darse cuenta de cómo había sonado eso.

-Cállate. Estás literalmente muy caliente.

-No estoy acostumbrado a dormir con ropa.

Ahora eso era algo que Hongjoong realmente no necesitaba saber.

-¿Y estás usando ropa por mi bien? Ni siquiera sabía que entendías el concepto de hacer algo por el bien de otra persona.

-Tienes razón - El otro hombre se sentó y se quitó la camiseta - No debería haberme molestado. No es como si no me hubieras visto desnudo.

¡Vaya!

-No te he visto desnudo - dijo Hongjoong rápidamente, mirando hacia otro lado, aunque no podía ver mucho en la oscuridad - He visto partes de ti. Desnudas. ¡Pero no todo de ti!

-Tuviste mi polla en tu boca - dijo Seonghwa - Ver mis tobillos no debería hacerte desmayar.

Hongjoong cerró los ojos con fuerza. Aún podía oír a Park recostarse en la cama con un suspiro de satisfacción.

-Deja de recordármelo.

-¿El qué? - Dijo Satanás - ¿Tener mi polla en tu boca?

-Deja de decir eso - Hongjoong se mordió el interior de la mejilla, tratando de tener pensamientos muy poco atractivos.

No funcionó.

Sus pensamientos seguían fijándose en la polla de Seonghwa. A pulgadas de distancia de él. Probablemente medio duro, considerando lo cachondo que siempre estaba Satanás. Gruesa y larga, erguida entre los muslos musculosos de Park, la cabeza de la polla gruesa y roja y reluciente de pre-semen.

La boca de Hongjoong se hizo agua.

Dios, necesitaba distraerse antes de poder hacer algo de lo que se arrepintiera.

Hongjoong buscó algo que decir.

-¿Por qué te fuiste de Corea?

-¿Qué te hace pensar que te lo diré? - Dijo Seonghwa, pero su tono era tranquilo, casi suave.

Sintiendo una excelente oportunidad para obtener algunas respuestas, Hongjoong abrió los ojos y volvió a mirar al techo.

-Vamos a jugar un juego. Honestamente responderás a mi pregunta y luego responderé la tuya, y así sucesivamente. Si uno de nosotros no quiere responder a la pregunta, le debe al otro cien mil dólares.

-No tienes cien mil dólares.

-Soy un libro abierto - dijo Hongjoong con una sonrisa, muy satisfecho de sí mismo por haber tenido una idea tan ingeniosa. O finalmente obtendría algunas respuestas, o sería rico al final de la noche. Ganar-ganar - No tengo nada que ocultar, así que no lo voy a necesitar.