harry potter reaccionando a muertes de niños¿[Pausada]?

five

Bajo la luz parpadeante de las antorchas, Harry se deslizó por la trampilla que una vez custodiara el imponente cérbero. El polvo del tiempo se levantaba con cada paso que daba en el silencioso subterráneo de Hogwarts. A lo lejos, un objeto brillaba con una luz propia, llamando su atención. Era el Espejo de Oesed, que por alguna razón desconocida aún permanecía allí, como un guardián de secretos olvidados.

Con cautela, Harry se acercó al espejo. Su reflejo lo mostraba no solo a él, sino también abrazado a una figura que no reconocía: una chica alta, de piel como la noche sin estrellas, ojos rojos que ardían con una intensidad feroz, y vestida completamente de negro. Sus sonrisas eran un misterio, un enigma que prometía tanto peligro como aventura.

La chica, como si fuera consciente de su observador, movió la cabeza de Harry en el reflejo para besarle primero la boca y luego la frente, un gesto que trascendía el cristal y parecía resonar en su propia piel. Harry se sobresaltó, su corazón latiendo con fuerza ante la sensación tan real que le había transmitido el espejo.

"¿Quién eres?", susurró Harry, su voz apenas audible en la vasta cámara.

El espejo vibró, y la chica del reflejo se separó de Harry, su mirada penetrante y sabia. "Soy lo que has buscado sin saberlo, lo que te completará en los desafíos venideros. Soy la sombra que camina a tu lado, la que ve lo que otros no pueden", respondió ella, su voz un eco en la mente de Harry.

Harry frunció el ceño, confundido. "¿Cómo puedes ayudarme?"

"Las respuestas que buscas no siempre están en la luz. A veces, debes atreverte a mirar en la oscuridad", dijo ella, extendiendo su mano hacia él en el reflejo. "Ven, Harry Potter, y descubre los secretos que yacen más allá de tu reflejo."

Con una determinación renovada, Harry levantó la vista del espejo y se adentró más en las sombras del subterráneo, sabiendo que la verdadera prueba aún estaba por venir. La chica del espejo, su misteriosa protectora, lo seguiría en cada paso, guiándolo a través de las sombras hacia su destino.

Y así, con la oscuridad como su aliada, Harry Potter se preparó para enfrentar lo desconocido, armado con la certeza de que incluso en la oscuridad más profunda, hay luz esperando ser descubierta.