La vida isekai no es para mí - camino por el Omniverso

Capitulo 11 - La Trama Esta Arruinada

Guiche abre sus brazos en un gesto burlonamente amistoso, desafiándome con una sonrisa arrogante. "¡Eres muy interesante, Familiar! ¡Pensé que no tendrías el coraje de venir!".

Muerdo ligeramente mi mejilla para tratar de aliviar los nervios que me embargan en este momento. La mirada de muchas personas se posa sobre nosotros, desde sirvientes hasta estudiantes, e incluso algunos miembros destacados como Kirche y Tabitha. "¿Por qué debería huir? Aparte de tu suerte aleatoria con las mujeres, dudo que tengas alguna otra habilidad mágica para mostrar". respondo con una mezcla de valentía y sarcasmo, tratando de ocultar mi propia inseguridad.

"Tú... ¡Te enseñaré a mantener la boca cerrada cuando hables con tus superiores! ¡Pero te daré una oportunidad, plebeyo! Ponte de rodillas y suplica mi perdón, y tal vez seré indulgente", ordena Guiche, apuntando su varita con forma de rosa directamente hacia mí.

Louise irrumpe desde un lado, su voz llena de angustia. "¡Guiche! ¡Los duelos están prohibidos! ¡Detén esto ahora!".

Guiche levanta su antebrazo con arrogancia, riendo con desdén. "Los duelos entre nobles están prohibidos, pero ¿un noble y un plebeyo? No existen tales restricciones... Pero no te preocupes, intentaré no lastimar a tu sirviente...", su tono está lleno de burla mientras se prepara para el enfrentamiento.

Una mirada suplicante de Louise busca mi aprobación, pero simplemente niego con la cabeza en respuesta, firme en mi decisión de enfrentar a Guiche por mí mismo. Observo cómo Louise se retira hacia un lado, resignada a presenciar lo que seguramente será mi derrota. al menos, eso cree ella.

Guiche se vuelve hacia mí, levantando su varita con determinación. "Ahora, veamos si eres tan patético como pareces. ¡Observa la magia de la familia Gramont, Brass Valkyrie!" grita, moviendo su varita con un gesto hábil. Un pétalo se rompe y, al tocar el suelo, emite un resplandor blanco brillante, transformándose rápidamente en un golem blindado con rasgos femeninos.

El golem, aproximadamente una cabeza más alto que yo, sostiene una lanza que emana una peligrosa aura. Con su gruesa armadura y su imponente presencia, incluso los guerreros más experimentados podrían sentirse intimidados por su formidable apariencia.

Hago todo lo posible por mantener la confianza, pero enfrentarme cara a cara con algo que fácilmente podría matarme me hace perder rápidamente el coraje. Afortunadamente, sé que tengo los medios necesarios para no quedarme paralizado por el miedo.

El golem retrocede y se lanza hacia mí, intentando golpearme en la cara o en la parte superior del cuerpo. Pero justo antes de que me alcance, levanto la mano y grito: "¡Crystal Ice!"

Un destello de magia surge de mi mano extendida, y brillantes cristales de hielo salen disparados hacia el golem de latón. Se escuchan jadeos entre los estudiantes y especialmente de Louise cuando los cristales de hielo impactan contra el golem, haciéndole perder un brazo y derribándolo al suelo.

Una sonrisa se forma en mis labios ante mi hazaña de magia, pero frunzo levemente el ceño al ver que el golem aún no está completamente derrotado... Sin embargo, la revelación de mis habilidades mágicas provoca temblores en la multitud que nos observa, y puedo ver la expresión de asombro en los rostros de los presentes, especialmente en Guiche, que parece estar listo para salir corriendo.

...

Sin que Mash lo supiera, la mayor sorpresa para el resto no fue el hecho de que pudiera usar magia, sino el descubrimiento de que no necesitaba una varita para hacerlo. En este mundo, el uso del enfoque mágico para lanzar hechizos había sido una práctica arraigada; incluso el mismísimo Brimir no pudo evitar esa limitación. Ver a un 'plebeyo' hacerlo con tanta facilidad casi hizo que algunas personas lo llamaran elfo y lo atacaran en el acto.

...

Vuelvo a señalar con la mano al golem, sin estar seguro de cuánto maná me queda, pero decido acabar con él lo más rápido posible. "¡Crystal Ice!"

Una segunda ráfaga de cristales de hielo se lanza hacia el golem, desintegrándolo en una explosión de partículas de luz. Estoy a punto de exigir la rendición de Guiche cuando, en respuesta, convoca a tres valquirias de bronce más. "¡No seré derrotado por algún falso noble! ¡Valquirias, ataquen!"

Siento un instinto de alerta al ver a las nuevas amenazas cargando hacia mí. Retrocedo inconscientemente, pero luego me reafirmo, señalando hacia adelante mientras grito: "¡Crystal Ice!"

Esta vez, tres cristales de hielo salen disparados de mi mano, golpeando a las tres Valquirias al mismo tiempo. Las veo caer al suelo, aturdidas por el impacto.

No estaba seguro de cuánto maná me quedaba, pero no tenía tiempo para pensar en ello mientras corría hacia Guiche para terminar la pelea. Sin embargo, antes de que pudiera llegar a él, fui bloqueado una vez más por dos valquirias que se interpusieron en mi camino. Sacudiendo la cabeza para despejar mi mente, reuní toda la confianza que pude y extendí mi mano hacia adelante.

"¡Crystal Ice!", grité, dejando que el poder del hechizo fluyera a través de mí.

Pero, desafortunadamente, subestimé la cantidad de esfuerzo que había puesto en el hechizo, lo que resultó en un desastre. Un cristal de hielo adicional, más grande de lo previsto, golpeó a Guiche directamente en la mano. La expresión de dolor en su rostro era evidente mientras caía al suelo, soltando un grito desgarrador que resonó en toda la plaza.

"¡HAAAAAAAAAAAAAA...!"

Los espectadores quedaron atónitos, horrorizados por lo que acababa de sucederle a su compañero de clase. El silencio llenó la Plaza Vestori, roto solo por los gritos de Guiche y los murmullos preocupados de los presentes.

Guiche se desmayó debido al dolor o a la pérdida de sangre, mientras los curanderos corrían para ayudarlo y lo llevaban rápidamente al hospital.

El shock se apoderó de mí mientras observaba la escena que había desencadenado accidentalmente. Estaba aterrorizado por lo que acababa de suceder. Nunca tuve la intención de lastimar a Guiche, pero el resultado de mi hechizo podría haberle causado un daño importante. Me toqué el pecho, sintiendo cómo la bilis subía por mi garganta, completamente ajeno a las miradas de desdén que me lanzaban los nobles que me rodeaban.

Aunque a la mayoría de ellos realmente no les importaba Guiche, él seguía siendo un noble de alto rango, lo que significaba que este ataque no quedaría impune. Algunos de ellos podrían ser recompensados por el Earl Gramont si lograran detenerme... Sin embargo, mi demostración anterior de magia sin varita había asustado a la mayoría de ellos lo suficiente como para que ni siquiera lo intentaran.

Salí de mis pensamientos cuando alguien comenzó a tirar de mi brazo, y el destello rosado en mi periférico reveló que era Louise. Me dejé arrastrar, sin estar seguro de cómo cambiarían las cosas a partir de aquí... Pero una cosa era segura: ya no podía confiar en seguir la trama preestablecida.

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Nota de Autor: en el anime, Arthur Pendragon, el rey de Camelot en "Nanatsu no Taizai", Antes de convertirse en el anfitrión del Caos y el legítimo Rey del Caos. su poder mágico original se desconocía porque no se había despertado. 

así que digamos que el protagonista del fic tiene un potencial para la magia parecida a merlin. claro, el protagonista del fic no tiene mana infinito. si no se han dado cuenta, eso quiere decir que no esta usando el poder del Caos asta que este listo para usarlo.