"Eres precioso" (Tu y Thomas Hewitt)

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~La cena parte 2~

Fuiste la primera en dar el bocado, para tu gusto la carne sabía un poco..."rara". No querías ser descortés, por eso el primer comentario que dijiste fue "la comida tiene un sabor único".

Todos te miraban con atención, alertas de cada movimiento que hacías. Sentías las miradas de todos, observando cada movimiento que hacías. Te incomodaba mucho, pero no ibas a decir nada al respecto.

- Que maravilla señorita ____, usted cocina muy bien. Creo que la mantendría aqui para que me cocine por siempre.- Hoyt fue el primero en iniciar algún tipo de charla, no respondiste ya que no sabías que decir, pero te había halagado un poco su comentario.

- Es verdad cariño, tu cocinas muy bien, creo que hasta mejor que yo, de dónde lo aprendiste? - Luda siguió con la conversación, para que hablaras por lo menos un poco.

- Bueno, aprendí sobre carnes por mí padre y un poco por mí madre, y la persona que me enseñó a cocinar fue mí madre. Para mí ella era la mejor persona cocinando, era mí todo.- te deprimiste un poco por aver dejado a tu madre para irte por la herencia de la abuela, pensabas en llevarla contigo algún día.

- Oh bueno, pues seguro cocinaba muy bien, dicen que el alumno se vuelve mejor que el maestro- Luda hablaba y hablaba, tu casi ni escuchabas, sentías la mirada alerta de Thomas, al parecer aún no te había tomado confianza.

A ti no te importaba, después de todo solo serían vecinos, no amigos, no mejores amigos, ni siquiera pareja ( ahre que si). Thomas no confiaba en ti y no pensaba hacerlo. Eras solamente una desconocida que era amiga de su mama, solo eso.

Cuando todos terminaron de comer, llevaron los platos y tu te pusiste a lavar con Luda. Hablaban de diversos temas y se reían de ves en cuando. Ella aveces hablaba sobre Thomas o sobre su difunto marido. Tu escuchabas con atención, te gustaba el romance o las historias de amor de viejitos. Te encantaba cuando tu abuela hacia eso contigo.

Ninguna se había dado cuenta de que Thomas estaba observandolas en el marco de la puerta, no pensaba dejar a su mamá sola con alguien peligrosa, no te tenía confianza y nunca la tendría.

Luda se dio cuenta e integro en la charla a Thomas, el cual, bueno...no puede hablar pero por lo menos asentía y hablaba con los ojos o gestos. Tu lo mirabas con atención, el era alguien interesante a tus ojos. Alguien grandote, alto, fuerte, robusto, gordito, pelo largo y morocho, brazos fuertes, ex carnicero, usaba máscara, ojos lindos. En pocas palabras, alguien precioso.

- Cariño, en cual habitación te gustaría dormir, ya es muy tarde para que vuelvas a tu nueva casa.- Luda quería que te quedarás con ellos si o si, pero tenía que hacerlo poco a poco.

- Emm, cualquiera, me podría mostrar?- Tu hablabas con nervios, era una casa desconocida para ti, ni siquiera sabías dónde estaba el baño, lo habías encontrado de casualidad anteriormente.

- Perfecto, yo y Thommy te enseñaremos en la cual dormiras- Luda avanzo hacía las escaleras, tu te habías quedado mirando, hasta que te diste cuenta que Thomas quería que tú fueras adelante de el, cuidando tus movimientos, tu accediste y avanzaste. Escuchabas sus fuertes pasos detrás de ti, te intimidaba un poco su fuerza, lo habías visto trabajar afuera mientras tomabas el té con Luda.

Después de aver caminado por un minuto, Luda te enseño la habitación. No era la mejor del mundo pero estaba en buen estado y tenía un balcón, tus ojos se agrandaron un poco por tal cuarto, te parecía perfecto. Luda no dejo pasar esa expresión y sonrió en respuesta. Thomas no te había visto por estar detrás tuyo, pero siquiera le importaba como te sintieras en ese mismo momento.

Entraste y dejaste tu valija a un lado de la cama tendida, le agradeciste a Luda por la habitación con un beso en la mejilla y un saludo de buenas noches, también saludaste a Thomas pero con un solo "Buenas noches" de tu parte .

Cuando ellos abandonaron la habitación y cerraron la puerta. Tu observaste un poco más la habitación y agarraste un cigarro, querías disfrutar un poco más esa noche.
Te sentaste en el balcón, mirando las preciosas estrellas que decoraban el cielo, y un poco del humo de tu cigarro que volaba y desaparecía en el aire. Dabas bocanadas y soltabas el humo, llenaba tus pulmones y se vaciaba. Era una linda y satisfactoria sensación para ti.

Unos minutos después , tiraste el cigarro en el balcón y te cambiaste, te habías puesto una pillama fresca, después de todo, estabas en verano y en Texas hacia un calor de la puta madre, y además no querías morir insolada. Te ataste el pelo y te acostaste en la cama, solamente te tapaste las piernas pero tus piecitos salían de la manta. Era una linda noche, los grillos cantaban, se escuchaba como el viento susurraba, las hojas de los árboles se movían, y eso aumentaba tu sueño, por eso decidiste cerrar los ojos y esperar hasta mañana. Porque mañana, sería un día difícil sin que tú lo supieras.

Holii, perdon por aver estado inactiva, es que estaba muy cansada y tengo evaluaciónes esta semana, por eso aprovecho para subír un cap hoy

Que les vaya bien, bayyy