𝐓𝐎𝐗𝐈𝐂 -𝑹𝒂𝒇𝒆 𝑪𝒂𝒎𝒆𝒓𝒐𝒏 𝒇𝒂𝒏𝒇𝒊𝒄- (𝑂𝑢𝑡𝑒𝑟 𝐵𝑎𝑛𝑘𝑠)

OO5

05 || En la habitación de Cameron (y no de Sarah Cameron)

—¿Qué mierda hago aquí?

—Vaya forma de despertar —murmuro rafe poniendo los ojos en blanco.

Hannah había despertado hace literalmente dos minutos en una habitación extraña y con un terrible dolor de cabeza.

—¿Dónde estoy? —pregunto la castaña con confusión.

—Mi casa —dijo rafe.

—¡¿Qué?! —exclamo ella alterada—. ¡¿Dormí aquí?!

Rafe la miró con el ceño fruncido y se sentó en la cama con aburrimiento.

—Si, te traje después de que te desmayaras. A salvó. —dijo el—. Por cierto, me debes una.

La castaña se quedó procesando. Se puso a procesar la información. Ayer. Noche. Hombres peleando. Kelce. Patada, fuego e inconsciente. O fuego y patada.

Ella maldijo en voz baja. Estúpido kelce.

La chica le lanzó una almohada que esté esquivo con facilidad y se levantó bastante irritado. Ella se levantó con rapidez.

—¿Me desmayé? ¡¿Te debo una?! —chillo ella perdiendo la poca paciencia que tenía— ¡Tu puto amigo casi me rompe la cabeza!

—Ah, sobre eso —el se rasco la nuca, aburrido— lo siento.

—Quiero que ese imbecil me pida disculpas, no tu. —dijo de mala gana—. Ahora, necesito... —antes de decir algo, se tambaleó y rafe la sostuvo con firmeza.

—Creo que deberías descansar, Han.

—Lo que me faltaba. Ahora ese estúpido me dejó dañó cerebral.

Rafe la guío a la cama —su cama, dato importante — y se sentó a su lado para revisarla

Hannah rápidamente comenzó a quejarse, la cabeza le palpitaba. Se sentía mareada. Tenía hambre, pero sentía que si comía algo, lo vomitaria. Odiaba sentirse así, y peor, en la casa de rafe. Ella le rogaba a todas las religiones que estuviera Sarah en casa, ya que Sarah era simpática y se iba contra su hermano.

—Cameron, ¡Escucho borroso! —ella se tocaba la cabeza con mucho dolor— no, ¡Veo todo borroso! ¡Estoy segura que me dió en un lugar importante!

La chica se levantó y empezó a dar vueltas por toda la habitación, golpeándose la cabeza como si eso le solucionaría el dolor. El castaño la miraba con fastidio.

—Hannah, ¡Siéntate de una maldita vez! —grito el, perdiendo la paciencia.

—¡No me grites! —respondio ella, paniqueada.

Hannah se sentó finalmente en la cama —cosa que era un alivio para Cameron—. Rafe se sentó a su lado y la miraba con esos ojos claros, pero a la vez oscuros. Aunque, la chica sentía una sensación desagradable al estar ahí, se sentía bastante confundida. Los días habían sido un tormento, con tantas peleas. Tenía la cabeza por las nubes, pero si sabía que si Rafe abría la boca diciendo otra estupidez iba a explotar.

—Mira, necesito que te calmes. Duerme un poco más, descansa. Aún debes estar aturdida por los accidentes de estos días. —Expreso el castaño con calma, lo que detonó la ira de la chica.

—¿Accidentes? ¡¿Accidentes?!

—Oye, estoy intentando.. —dijo el intentando contenerse, harto de la situación.

Por alguna extraña razón, o tal vez el golpe de kelce le tocó algo importante, Hannah sintió un subidón de adrenalina, odio, bastantes sensaciones malas, y solo quería gritarle. Esto no terminaría muy bien. Pensó ella. Pero ignoro su consciencia y comenzó a reclamar;

—¡No fueron accidentes, todo fue tu culpa! —le escupió Hannah — Tu novio Topper empezó una puta pelea y me sacudió el cerebro a golpes, para rematar tu como el novio fiel que eres terminaste su trabajo. Después el idiota de tu amigo, adivina, ¡Me pateó! ¡Y tú no hiciste nada!

—Estoy perdiendo la paciencia, Hannah. —advirtio en un tono duro.

—¡Me usaron como sacó de boxeo y tu no hiciste nada! —reclamo—. Y luego me persigues como un psicópata. ¿Ahora entiendes porque quiero estar lo más lejos posible de ti?

—¡Tu maldito novio jj empezó todo Hannah, entiendelo! —grito, perdiendo todo sentido común.

Hannah parpadeó, momentáneamente perpleja y lo miró con incredulidad antes de sentir sus mejillas rojas por el enfadó que estaba sintiendo ahora mismo. ¿Quien se creía al meter a JJ? Además jj era super simpático.

—¡EL NO HIZO NADA! ¡NO TE METAS CON JJ!

—¿Por qué? ¿Es tu novio?

—¡Es mi amigo, junto con Pope, Kiara y John B!

Rafe empezó a reírse como un demente mientras negaba con la cabeza, por lo qué la castaña le dio un empujón. No le gustaba que los demás se burlaran de ella.

—¿¡Qué es tan gracioso, eh?!

—¿Tan amigos tuyos son, eh? ¿Y donde estaban anoche, cuándo te desmayaste?

—¡NO ME DESMAYE, TU AMIGO ME PATEÓ!

Esté suspiro, parecía estar perdiendo la cabeza. Tomó por los hombros a Hannah y la sentó en la cama intentando controlar lo que ya se había desatado, una de esas peleas que tenían de vez en cuando que eran totalmente agresivas.

—Oye, te traje el desayuno y..

—No me importa. —Respondio Hannah y como la chica madura que era, le saco el dedo de en medio.

—Detente, Hannah. —Dijo el castaño, apretando su mandíbula con fuerza.

—¿Detener qué?

—Tienes un maldito problema.. —Nego el con la cabeza.

—¿Problema? —pregunto, incrédula—Si, tengo un problema ¡Y ese eres tú!

—¡HANNAH, CÁLLATE DE UNA VEZ!

Rafe Cameron finalmente perdió la paciencia, y ahora iba a comenzar la verdadera tormenta, o el huracán. Las peleas que de vez en cuando tenían Hannah y rafe, gritarse sin parar, alguno que otro daño físico o emociónal hasta que alguien llegaba a parar la discusión. O hasta que alguno de los dos se sentía demasiado agobiado.

—¡Tú cállate! —ladro ella.

El castaño la tomo por lo hombros haciendo que ella chocará con la pared. Ya habían pasado al nivel de la agresividad física.

—¿Ya vas a empezar? —Ella lo miraba fijamente, viéndolo a los ojos, buscando algo. Pero solo veia una furia inexplicable. Maldita sea.

—Todo esto es tu culpa, Hannah.

—¿Yo? Tú eres el enfermó. —El apretón comenzaba a molestar.

Ella suspiro, si que había sido una semana de mierda. La verdad, solo deseaba llegar a casa, encerrarse en cuarto y ver alguna película sangrienta. Pero tenía que ocuparse de esto primero.

—Te agradecería que me sueltes, Cameron. —Comento ella con sarcasmo.

—No. —Respondio con la voz fría.

—Si, hazlo. Tienes que controlarte, respira hondo o que se yo, pero me estás haciendo daño. —exclamo Hannah intentando calmar la situación.

Rafe Cameron sorprendentemente la soltó con la expresión fastidiada. Y la verdad lo hizo rápido, solo porque le dolía la cabeza y no podía soportarla más.

—Esta bien, está bien. —finalmente Rafe la soltó.

—Gracias —dijo con humor—. Ah, y dile a tu retrasado amigo, que ya no me pida disculpas. Solo coméntale, que si me lo encuentro, llevaré un lindo cuchillo en la mano que por accidente podría parar en su cuello. —hannah le sonrió con dulzura. Después solo salió prácticamente huyendo de esa casa.

Rafe puso los ojos en blanco y la vio irse de su habitación a paso rápido. Sintió una punzada de culpa al pensar en si estaría bien, con ese golpe en la cabeza. Y los demás. Pero finalmente se encogió de hombros y salió de casa para ir a tomar algo.