Kevin se encontraba poniéndose el último poco de su colonia. Había quedado de ir a casa de los Chávez del Ángel, esto por que era el pre- cumpleaños de Monica.
Con una sonrisa se vio una última vez, últimamente estaba tratando de verse lo mejor posible. Todos saben por quien.
Tomó sus llaves de su apartamento y auto, bajo hasta el estacionamiento del edificio y rápidamente divisó a su auto. Camino hasta el y se monto, después se puso en marcha al lugar de la fiesta.
Luis había planeado esa fiesta con mucha anticipación, pues no estaba seguro de si podía estar con sus esposa el día exacto de su cumpleaños. Así que prefirió hacer la fiesta unos días antes, suerte que todos sus invitados habían confirmado ir.
Mientras tanto en una de las habitaciones, Richelle había dado el último toque de su labial rojo en esa noche. Se había puesto un vestido azul metálico liso hasta un poco arriba de las rodillas, este tenía una abertura a un lado de su pierna derecha.
Sus zapatillas esa noche eran del color
de su vestido, un maquillaje no tan extravagante la acompañaba junto a su cabello suelto.
Soltó un suspiro cuando vio a su cuñada entrar por la puerta completamente arreglada, ambas se sonrieron.
- Wow Richelle, te ves espectacular - dijo Moni algo sorprendida.
- ¿ enserio?, siento que es muy extravagante - respondió viéndose y su cuñada negó.
- Llevas todo el día diciendo lo mismo, ya quédate así que te ves muy muy hermosa - sentenció Mónica.
- Es que..
- Nada, Nailea y yo te escogimos ese vestido por que se complementa muy bien a ti. Así que ya hasta de inseguridades, vamos abajo que ya están todos.
Richelle sintió con la cabeza y fue detrás de su cuñada. No quizo seguir diciendo algo más acerca del vestido, pues efectivamente Mónica y Nailea lo habían elegido para ella.
Esa mañana las tres chicas fueron al centro comercial buscando algo para Julieta, pues ella tenía planeado usar unos simples Jeans y una sudadera.
Soltó un suspiro, había mucha gente que no conocía ni de lejos. Seguramente algunos sabían que era la hermana de Luis, pero ella no sabía quienes eran.
- ¿ estas pérdida? -
Richelle sintió un escalofrío en todo el cuerpo al escuchar la ronca, baja y sensual voz de Kevin en su oído.
Volteo a verlo y quería lanzarse a sus brazos, besarlo y tocarle los brazos.
Kevin traía puesta una camisa azul con toques morados.
Parte de su pecho se podía apreciar gracias a que tenía desabrochado los primeros botones de la camisa.
Sus jeans blancos ajustados y unos zapatos mocasines café y negros.
- Ah si, hay mucha gente - contestó tratando de no verse aturdida ante la imagen de Kev.
- Te ves muy hermosa. - Álvarez no pudo evitar que su vista viajara a todo el cuerpo de Richelle, ella sintió desmayarse.
- T-tu también, te ves guapísimo - contestó en un hilo de voz, sonrió.
- ¿ platicamos adentro? - pregunto Kevin, ella asintió.
Comenzaron a caminar en dirección a la Sala de la casa, pero se encontraron a Luis unos metros adelante.
- ¿ a donde van?, la fiesta es aquí y estamos por servir la cena - aviso.
- En ese caso iremos a buscar una mesa.
- ¿ van a sentarse juntos? - pregunto Gerardo a Kev más que nada.
