Una Chica En Apuros [Olivia Lennox]

Caos

Y pase de estar en el cielo mismo, a tener a mi mismísimo verdugo justo al frente mío.
Su cara lo decía todo, enojo puro y denso, estoy segura que hoy mi cara definitivamente no va a quedar intacta, pero no soy una cobarde y no voy a empezar a serlo ahora, tomo una profunda respiración, me levanto con la cabeza en alto y le hago frente.

-Se puede saber, ¿Cuál es tu problema?

Duke suelta una risa, sarcástica y carente de humor

-No sé, tu dime Sebastián, ¿Que está mal aquí? - Se encoge de hombros - O ya se, ¡Estabas besando a mi chica!, ¡La mujer que me gusta y si no mal recuerdo aseguraste que me ibas ayudar a conquistarla! - Si el empujón no había llamado la atención de la gente, definitivamente sus gritos lo hicieron.

Intente aclarar mis pensamientos y sentimientos, como dicen por ahí, las decisiones se deben tomar con cabeza fría.

- Escucha Duke, lo intente, en serio lo hice - Hice una mueca, tampoco es que me haya esforzado mucho, pero el no tiene que porque saber eso - Pero yo...

-¡Esperen un segundo! - Olivia salió detrás de Duke como una fiera - ¿Acaso no tengo voto en todo esto? - Revolotio las manos haciendo énfasis - En primer lugar tu - Señaló a Duke - No me gustas, nunca me has gustado y no me vas a gustar, ¿Quedó claro? Además no soy un objeto a reclamar, no soy tuya ni de nadie, así que respétame - Juro que en todo este tiempo no había visto a Olivia enojada, pero se ve hermosa y puede que haya alborotado un poco mis hormonas.

Como si fuera posible, Duke además de enojado, ahora está herido, que vayan cavando mi tumba, porque este man me va a matar definitivamente.

-¡Y tú! - Se giró hacia mi, oh Dios, no - ¿Solo te acercaste a mí por esa estúpida promesa? - Lo dice con voz herida - ¡Contesta Sebastián!

-¡Claro que no! - Digo inmediatamente con toda la convicción en mi voz, me acerco un paso a ella - Te juro que no es así, yo solo, mira, tu eres una mujer excepcional, cualquiera desearía estar a tu lado, yo no soy la excepción, lo juro - Cerré los ojos y suspiré - Mira, yo solo quería jugar fútbol nada más y luego apareciste tu, y pusiste todo de cabeza, entonces Duke se acerco y me propuso entrenarme y ayudarme, si te ayudaba contigo, yo solo, no pensé que yo te gustará, por Dios, mírame, cómo me escogerías por encima de el - Señale a Duke - Solo hice lo más prudente, dar un paso al lado.

Me encogí de hombros con resignación.

-Sebastian, esa no era tu decisión.

- Lo se, solo lo sé.

Se escucharon aplausos lentos y sarcásticos.

-Pero que gran pareja - La sonrisa era totalmente burlona - Bueno, eso no importa ahora, creí que eras mi amigo Sebastián, y tienes que pagar por romper  la promesa.

Y como dije, mi cara no iba a salir ilesa de esto. Y en solo un segundo me derribo con una fuerte tacleada,  mi espalda crujió contra el suelo, y mi cabeza se golpeó fuertemente dejándome mareada. El primer golpe en mi rostro fue certero, y después de ese, muchos más, el dolor se extendía por toda mi cara, mis sentidos estaban adormecidos, no escuchaba ni procesaba nada a mi alrededor, esto no era una pelea, no. Era una paliza a mi persona.

Luego de minutos o segundos, realmente no lo sé, me quitaron a Duke de encima, escuché la voz de Olivia a la lejanía, la de Paul y el resto de mis amigas, a mamá gritando histérica y la multitud abucheando.

Y luego, luego todo fue silencio.

.,.................

Realmente todo se puede arruinar en un segundo,   hace tan solo unos minutos me estaba besando con el chico que me gusta, luego me entero de una promesa que me llena de inseguridad, y después  hace un indirecta muy directa sobre sus sentimientos hacia mi.

Después son solo mis gritos, los de sus amigos, intentando por todo los medios quitarle a Duke de encima, y cuando lo logran, veo a la que se ha convertido en una de las personas más importantes de mi vida, tirado en el suelo, con la cara llena de sangre y con los ojos cerrados.

Me acerque presa de un pánico total.

-Sebastian, Sebastián - Tocó suavemente su rostro - Sebastián, ¡Despierta!, - Tomo suavemente su cabeza y la pongo en mi regazo - Abre los ojos, ahora por favor - Paso las manos por su cabello, pero pasa algo totalmente extraño, este no se siente natural, y se mueve de forma extraña, como si fuera...

- !Viola! Oh Dios mío - Un chico rubio cae a mi lado - ¡Viola! Despierta no me hagas esto - ¿Viola?

Sus amigas están detrás de el, llorando, tan asustadas cómo yo.

-¿Viola? - Pregunto suavemente.

El chico levanta la cabeza totalmente asustado.

-Yo he yo, bueno yo, digo.

-Con permiso chicos, permiso, vamos hay que llevarlo al hospital - El servicio medico de la feria se acerca con una camilla - Señorita permiso.

Dejó la cabeza del Sebastián en el piso lentamente y doy un paso atrás, ahora no solo tenía miedo y preocupación, estaba totalmente confundida. Miró de nuevo al chico de pelo rubio, el me mira con miedo, y luego aparta la mirada.

-Oh mi niño - Una señora se acerca sollozando suavemente - Ese muchacho es un salvaje.

Y en un segundo lo están subiendo a la ambulancia y alejando se lentamente de la feria, sus amigos ya no están por ningún lado, me imagino que se fueron con el.

-Olivia, ¿Estás bien? - Mi amiga se acerca y me toma las manos - Vimos toda la pelea, bueno, si es que se puede llamar así, Sebastián no tuvo fuerza para defenderse...

Y como una bofetada, todo tiene sentido.

Su delicadeza.
Su asco a la clase de química.
Su conocimiento por la moda, que prácticamente ningún hombre posee.
Su voz.
Su forma de caminar.
Su complexión física.
El extraño cabello que estoy segura que no es natural .

Ahora recuerdo cuando lo bese, su rostro era suave, sin indicio de bello facial, sus labios también lo eran, los más suaves que he tenido el placer de probar.

Y luego recuerdos pequeños llegaron a mi mente.

Siempre me han dicho que mi hermana y yo, somos muy parecidos, que podemos pasar uno por el otro.

En ocasiones desearía ser un hombre, digo he, una mujer

Al parecer es costumbre que nos choquemos.

Este último, hoy, cuando me choque con esa chica que me era extrañamente familiar, cierro los ojos y suspiro cuando el recuerdo me envuelve, así conocí a Sebastián, nos chocamos en la dirección, afuera de la oficina del director.

Viola, no me hagas esto.

Y por último la voz del chico rubio. Oh Dios mío, no, no, esto no puede ser cierto.

El chico del cual estoy enamorada, no es el, es ella, es una mujer.

Los personajes no me pertenecen.

Hola chicos, les agradezco mucho el apoyo brindado, me disculpo por la tardanza de la actualización, pero la universidad me tiene algo estresada, espero les guste el capítulo.

Ahora, tenía la intención de hacer las escenas+18 explícitas, debido a las nuevas leyes de Wattpad no puedo realizarlas de esta manera, debido a que las protagonistas tienen 17 años, me disculpó por esto.

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