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Lawrie estaba nervioso, pues pocas eran las veces que salía con alguien que no fuera con su hermano Larry. Y sobretodo ahora, que se trataba de Angelo, aquél mosquito que se había convertido en su amigo, un amigo muy cercano.

Mientras Lawrie esperaba el mensaje de Angelo, Larry llamaba a su puerta.

- ¡Hermano...! - se escuchó un fuerte grito detrás de la puerta de la habitación de Lawrie, mientras que Larry tocaba con fuerza.

- Maldición, Larry. Solo abre la puerta, no hace falta gritar. - Lawrie le cedió la entrada a su habitación.

Larry sonrió y se lanzó encima de Lawrie.

- ¡¿Tienes una cita?! Eso es genial, ¡Te voy a tener que dar varios consejos! - Lawrie empezó a sacudir a su hermano, como si de una almohada se tratara.

- Entiendo tu emoción, de cierta forma... - rodó sus ojos en forma de ironica. - ¿que consejos tienes? - se cruzó de hombros.

- Oh, ¡eso quería escuchar! - Larry lo sacó de su habitación y lo llevó a la suya. - ¡ve directo a su corazón! ¡y dile cuánto la amas!

Lawrie alzó una ceja.

- ¿Por qué hablas en femenino?

Larry se quedó confundido por la pregunta de su hermano.

- ¿No es una chica? - hizo una mueca.

Estaba dudando si decírselo, pero... era su hermano, de alguna forma se terminaría enterando de lo que estaba pasando.

- Es un chico. En resumen, se trata de Angelo. - bajó la mirada tímidamente.

Temía lo peor, ¿y si su hermano lo repudiaba? estaba pensando las peores cosas en ese momento. Pero de repente Larry lo abrazo con fuerza.

- ¡Lo sospeché! - Larry rió mientras apretaba aún más a su hermano.

- ¿N...no te molesta que me guste un chico? - empezó a tartamudear.

- ¿Por qué me iba a molestar? Es tu vida, además es algo normal, solo es amor.

Lawrie se quedó conmovido con las palabras de Larry... pero también se quedó pensando en su última frase... "Solo es amor."

¿De verdad estaba enamorado?

Solo había una forma de descubrirlo...

...

Cómo Lawrie se lo pidió, Angelo tomó en cuenta la petición de Lawrie, eligió un lugar con poca gente para pasar el rato.

Estuvo esperando aproximadamente como cinco minutos, en eso, vió llegar a Lawrie a lo lejos.

- Angelo... ¿ya estabas aquí? No me digas que me tardé. - lo miró con timidez. Angelo solo soltó una risa tierna.

- Llegas a tiempo. Simplemente yo preferí llegar cinco minutos antes. - sonrió suavemente.

Lawrie se sintió aliviado.

- Oh, genial. Y... ¿que lugar es este? - miró a sus alrededores, no había mucho que ver, solo árboles, un pequeño lago, y un columpio en el cuál Angelo estaba sentado.

- El lugar de nuestra cita. - Angelo tomó la mano de Lawrie con toda confianza. - oye... ¿tu también estos últimos días te has sentido raro?

Lawrie abrió los ojos como plato. ¿Así que Angelo se sentía igual? eso... era una buena señal.

- Puedo confirmarlo... - dijo nervioso.

- Temía ser el único que se sentía así...

- ¿También tenías miedo? Vaya, no somos tan diferentes después de todo. - Lawrie se sentó en el columpio junto a Angelo.

El mosquito se sintió diferente, la compañía de Lawrie era... reconfortante. Incluso, sin darse cuenta, sonrió cuando esté se acercó.

- Puedo... ¿puedo besarte? - Lawrie no lo pensó dos veces. Un beso, solo con eso podría saber que sentía realmente por Angelo.

Angelo volteó a verlo con vergüenza, estaba completamente rojo...

- B...bueno. - ambos se acercaron el uno al otro. Pero fue Lawrie quien tomó la iniciativa.

Lentamente acercó su rostro al de Angelo, y sus labios tocaron los del contrario, para seguidamente apretarse suavemente. La sensación era mágica para ambos, era un beso muy tierno, un beso que podía parecer infinito.

Y con eso Lawrie confirmó lo que el sentía.

El si estaba enamorado.

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⏰ Última actualización: Apr 19 ⏰

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cupid in love ; angelo x lawrie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora