Una vida muy dura, dos personas totalmente opuestas, y muchos secretos no revelados nos van a llevar a un amor adolescente lleno de problemas y adicciones.
¿Podrán terminar juntos? ¿Dejaran sus diferencias alado por su amor? ¿Que pasará entre estas...
Al otro dia me levante con las ojeras hasta el piso, pero me vesti rápido para irme. Ya dijo cochi que no iba a faltar.
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Estaba caminando tranquila cuando pude ver a Carlos asomado desde la terraza de un edificio. Decidí ir a donde estaba él, así que subi rápido las escaleras.
Cuando llegue arriba, Danilo estaba haciendo brazo con dos botellas colgadas a un palo.
—Y Carlo', ¿viene bien no viene? — hablo Danilo.
—Banca— dijo Carlos.
—¿Que hace' uruguayo? , ¿quien viene?— pregunte sin entender nada.
—Hola— dijieron los dos dándose vuelta para verme.
Con Danilo nos acercamos a donde estaba Carlos y miramos para abajo.
—Ese cachucha e' re pajero— dijo Danilo.
—Mal— dije sería viendo a un viejo que estaba abajo.
_La otra vuelta había unas pibas en la parada del bondi, el chabón se bajo lo lompa le mostró la poronga a todo'— se rio junto a carlos. Se dio vuelta a verme por que se dio cuenta que yo no me reí de lo que había dicho. —Nada que ver, re atrevido igual eh— dijo parando de reir-.
—yo lo prenderia fuego por enfermo— dije y los dos giraron a verme.
Ellos volvieron a mirar hacia abajo y empezaron a juntar saliva para escupirle al viejo.
—Mira que le tene' que pegar eh, o si no dejame a mi
Carlos lo empujo con el hombro y siguió juntando saliva.
—¿Que empuja'? , mira si me caigo gil— danilo lo empujo de regreso.
—Quédense quieto' loco— dije para después agacharnos.
—Tenes que calcular la distancia del viento, como cuando le pegas a la pelota para que entre al agulo, escuchaste
—Si— respondio.
—También los pisos y la velocida
Yo chasquee la lengua y ellos empezaron a escupir.
No le estaban pegando hasta que Danilo grito.
—¡Cachucha!
El viejo miro para arriba y le callo una gota de saliva en la cara.
—Que asco— dije con cara de desagrado.
—La concha de dio', pendejo del orto— grito el viejo.
—Viste que capo que soy, como le pegue— dijo Danilo riendo.
—Dale tomatela— respondió carlos.
_Te voy a prender fuego e, te voya prende' fuego, a vo' y a tu hermano— grito otra vez el viejo.
