𝐆𝐇 [𝐨𝐧𝐞𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬 ]

𝟏𝟏] 𝑹𝒐𝒔𝒊𝒏𝒂 ⁺¹⁸

protagonista : Malena. [me la imaginé como Renee Rapp, fin]

warning : smut. probablemente con errores, no lo revisé otra vez.

Desde el comienzo del día Rosina estaba rara y Malena no entendía que le sucedía. La primera era una chica muy cariñosa, especialmente con su novia, pero hoy no podía ni mirarla porque la espantaba.

El día había comenzado con Malena despertándose temprano, tomando su café matutino en el patio disfrutando el fresco otoñal. Al rato, se empezaron a sentar a su lado los chicos y charlaron de la vida como siempre.

Le parecía raro que era tarde en la mañana y Rosina no se levantaba aún, por lo que fue a buscarla. La encontró en la silla de la cocina con su mirada en un punto fijo en la nada. Asustada se acercó.

"Amor, ¿qué te pasa?" preguntó, preocupada que le duela algo o que le hayan hecho algún comentario de mal gusto.

Rosina se despertó de su transe y la miró con una sonrisa, "Nada. Hola", dijo alargando la última vocal.

Luego estiró el brazo para ser rodeada por su novia, quien le dejo un beso en la cabeza, para luego retirarse y tomarla del rostro y besarla en los labios.

El beso comenzó siendo lento y tierno hasta que Malena comenzó a jugar con su lengua los labios de la chica pidiendo permiso, la otra aceptó con gusto. La rubia intensificó entonces el beso, llevo su mano derecha al cuello de Rosina apretando con ligereza provocando un leve gemido de su novia.

Pero cuando se dio cuenta, había sido empujada hacia atrás quedando con los labios rojos y babeados con una expresión de confusión en el rostro.

"Eh, Rosina", dijo casi indignada Malena.

"Perdón, pasa que" tragó saliva nerviosa "No...no me lavé bien los dientes y me da vergüenza".

"¿Qué decís? Yo no sentí nada, no pasa nada gordi" dijo Malena queriéndose acercar nuevamente, pero Rosina se paró de la silla en la que estaba.

"Ay perdón, pero no...no me gusta, después nos besamos" le sonrió como si nada hubiese sucedido.

"Bueno, si vos decís. A mi no me molesta igual", le ofreció una media sonrisa Malena.

Rosina miró hacia el patio y luego hacia ella, "¿Vamos a tomar mates con los chicos?"

"¿Mmm?" contestó Malena saliendo de sus pensamientos, "Ya estuve tomando, andá vos si querés. Voy después".

La morocha asintió sonriente y se fue, dejando a su novia con una gran confusión.

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Al rato, Malena dejó de charlar con sus amigos y se fue en busca de su novia, tal vez ahora sí tenía ganas de besarla.

Esta vez la encontró charlando con Nico, Bauti, Martín y Zoe en los sillones de afuera. Como había un lugar al lado de Rosina, se sentó a su lado ofreciéndole una sonrisa.