Palomo.

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Pasaron ya varios días, el batero y el guitarrista habían tenido escasas interacciones, pero pensaban juntarse hoy en un parque no muy lejos de sus casas.

¿Nos vemos a las 05:45 PM allí? - Consultó Álvaro antes de cortar la llamada.

Eh.. sí, sí. Pero vení. - Respondió Ricardo mientras jugaba con sus dedos algo ansioso.

Obvio que voy a ir, bueno, nos vemos luego. Cuídate. - Se despidió sin dejar que el contrario también lo haga.

Cha- ¡AGH!, no importa. - Dijo ya algo fastidiado.

Prefirió fijarse la hora y para su sorpresa no faltaba mucho para las 05:45 PM.

¡Qué bien!, Pero pensándolo bien me tendría que bañar ahora si no quiero llegar tarde... - Habló para sí mismo en voz alta.

Roberto no se encontraba en casa ya que había salido con Tavella, seguramente llegaría tarde por lo que no debía de preocuparse por él.

Cuándo salió de ducharse y colocarse una camiseta roja algo desgastada y un short de color negro acompañado de unas zapatillas con su mismo tinte.

De nuevo se fijó la hora, ya eran las 05:30 PM. Comenzó a asustarse por pensar que llegaría tarde, por lo que salió de su hogar tan rápido cómo pudo. Para sorpresa de nadie por hacer esto mismo llegó temprano y el lugar se encontraba completamente desolado, ni siquiera algún niño acompañado por su padre u madre.

¡Soy más pelotudo! - Resopló el Musso mientras veía su reloj marcando las 05:35 PM.

Uy, llegamos temprano. - Esa voz tan reconocible lo sacó de sí mismo.

¿Qué? - Volteó lo más rápido que pudo para ver a quién esperaba desde un comienzo. - Ah... Álvaro, me asustaste.

¡Perdón!, No quería hacerlo. - Respondió el batero algo nervioso, no esperaba que el guitarrista estuviera aquí tan temprano. - ¿Estuviste mucho tiempo acá solo?

No, no, recién llego. ¿Y vos? - Luego de haber formulado la pregunta recordó que Alvin acababa de llegar.

Álvaro contuvo la risa, no recordaba que Ricardo fuera así de olvidadizo o distraído.

Perdón, me olvidé. Es que ando algo raro hoy y bueno... - Se disculpó apenado cabizbaja.

No pasa nada, Ricardo. Yo también me olvido de algunas cosas. - Contestó mientras tomaba la mano de su compañero y comenzaban a caminar. - Entonces... ¿querés comer un helado o algo?

Ah... bueno. Espera que saco la plata. - Respondió apunto de meter la mano en su bolsillo dónde tenía algunos billetes, pero antes de que pudiera sacarlos fue detenido por la mano de su amigo.

No, yo invito, no te preocupes, Riki. - Explicó aún parando la palma del guitarrista ya algo nervioso.

E-eh, bueno. Cómo vos quieras entonces... no voy a insistir mucho. - Confesó mientras quitaba la mano de su bolsillo soltando el dinero.

Bien, entonces sentate ahí en el banco ese, yo ahora vuelvo. - Pidió mientras dejaba a Ricardo solo con esa banca desgastada y mal pintada.

Se quedó en silencio, qué podría responderle, solo podía observarlo alejarse de él.

Para su poca sorpresa ahora había mucha más gente y los gritos de los niños se hacían notar rápido.

¿Ahora qué puedo hacer? - Murmuró viendo los juegos que estaban llenos de pequeños riendo y corriendo.

Sin darse cuenta se había quedado disociando viendo directamente el gran tobogán que estaba frente a él, no fue por el llamado de Álvaro ya algo preocupado que salió de su trance.

¿Riki? - Preguntó mientras tomaba de su hombro e intentaba hacer que reaccionará.

¡AH! - Volteó nervioso y asustado por el contacto tan repentino.

¿Estás bien? - Consultó con un rostro serio mientras sostenía ambos helados en su mano derecha.

Sí, sí. Pará, te ayudo. - Agarró el helado sin ver el rostro extrañado de su compañero.

Sí... bueno, mejor sigamos caminando, quiero saber que hiciste estos días que no hablamos. - Dijo algo curioso esperando ansioso la respuesta del contrario.

Qué puedo decir, no mucho. Me la pase con mi hermano, aunque últimamente sale con Tavella. Siento que se traen algo. - Se cuestionó eso por unos segundos.

¡Seguro!, Es decir... quizás sí, espero que no se traigan nada, ¿no? - Le respondió algo nervioso. - No es que tenga nada de malo solo digo que...

Sí, ya te entendí, no necesito que me expliques tanto, Álvaro. - A veces lo hacía mareaba con tantas cosas a la vez.

¡Bue!, Qué sé yo. - Resopló cabizbaja con falsa decepción.

Terminado jjj, pensé que no iba a llegar porque justamente se me había ido el internet

Terminado jjj, pensé que no iba a llegar porque justamente se me había ido el internet

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⏰ Última actualización: Apr 14 ⏰

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𝗖𝗁𝗂𝖼𝗈 𝗖𝗈𝗋𝗋𝖾𝖼𝗍𝗈. // 𝗔𝗅𝗏𝗂𝗄𝗂.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora