Mis parejas destinadas de otra dimensión. / Hunter x Hunter y Naruto, lectora /

Capitulo 4

Narrador Omnisciente.

Kurapika, Leorio, Gon y TN habían estado caminando durante horas desde que la anciana les había mostrado el verdadero camino. Leorio se quejaba constantemente por el tiempo que llevaban caminando sin llegar a ninguna parte. Miraban a su alrededor con cautela, especialmente después de haber encontrado un letrero unos minutos antes que advertía sobre la presencia de criaturas mágicas en la zona. Esto irritaba a TN, preocupada por la posibilidad de que estas criaturas peligrosas pudieran ser alertadas por las quejas ruidosas de Leorio y los descubrieran.

TN: Leorio. -gruñó molesta mientras lo miraba con desaprobación.- Si no cierras la boca, te daré una paliza que les dolerá hasta a tus ancestros.

Leorio tembló ante el aura oscura que TN comenzaba a despedir, y aún más cuando ella se acercó a él dispuesta a golpearlo.

Gon: ¡Miren! -exclamó señalando hacia la cima de la montaña donde se vislumbraba una cabaña.

Kurapika: Hemos llegado. -comentó con una sonrisa.

Leorio: ¡Vamos! -exclamó contento mientras corría hacia la cabaña para alejarse de la joven de cabellos bicolor.

TN soltó un suspiro y comenzó a caminar al lado de Kurapika, quien se había detenido para esperarla. Ambos empezaron a caminar un poco más rápido para alcanzar a Leorio y Gon, que se habían adelantado. Al llegar frente a la cabaña, entraron al ver que la puerta no se abría. Dentro, encontraron a dos personas en el suelo y un kiriko encima de ellas. Sin embargo, en cuanto los vio, el kiriko tomó a la joven y salió corriendo, rompiendo la ventana en su escape.

TN: Leorio, quédate con el joven y cúralo.- espeto seria.- Gon, Kurapika vámonos.

Los tres salieron de la cabaña y comenzaron a correr tras el Kiriko, pero en un instante todos se separaron, dejando a TN sola. Comenzó a mirar a su alrededor, completamente alerta. Escuchó un ruido detrás de ella y dio un salto en el aire, esquivando un zarpazo. Luego, con un movimiento rápido, lanzó una patada a la nuca de su atacante, derribándolo con fuerza. Con un ágil movimiento, sacó un kunai y lo colocó en el cuello del intruso.

TN: Ahora, dime. -espetó con seriedad-. ¿Debería llamarte bestia mágica o examinador?

Kiriko: ¿Cómo sabes que soy un examinador? -cuestionó sin intentar liberarse.

TN: Porque el examen del cazador comenzó desde que nos subimos al barco. -explicó con una sonrisa en su rostro-. Y no nos enviarían por este camino sabiendo que está infestado de criaturas "peligrosas", además, no vienes con intenciones asesinas o las habría sentido.

Kiriko: Tienes, razón.- comento soltando un suspiro.- Soy un examinador y si me permites debo seguir con tus amigos.

TN: Okey.-comento y se quito de encima de el.- Y perdón por ser tan violenta.

Kiriko: No hay problema.- exclamo para despues desaparecer entre los arboles.

TN caminó con tranquilidad por el lugar hasta llegar a la cabaña donde se encontraban Leorio y el "joven", quienes esperaban su llegada. Los saludó y preguntó al joven si se encontraba bien. Después de confirmar que así era, esperaron al resto del grupo. Después de un tiempo, llegaron Gon y Kurapika, quienes comenzaron una larga explicación sobre su rol como examinadores y cómo todos habían pasado la prueba.

Gon: ¡Qué bien! Todos hemos pasado. -exclamó feliz mientras saltaba.

Leorio: Lo hemos logrado. -suspiró complacido.

Kurapika: Un paso más cerca del verdadero examen. -comentó con una sonrisa.

TN: Y que todos hayamos pasado es lo mejor. -expresó con una leve sonrisa.

Los cuatro comenzaron a chocar las palmas, pero cuando TN y Kurapika se tocaron las manos, ambos sintieron una corriente eléctrica que recorrió sus cuerpos. La sensación se concentró en lugares diferentes: en el antebrazo derecho de Kurapika y en la nuca de TN. Esto hizo que los ojos del rubio se abrieran con sorpresa y alegría.

Kiriko: Bueno, es hora que los llevemos al examen.- comento el papá kiriko.

TN: ¿Como llegaremos?- cuestiono con curiosidad .

Kiriko: Volando.- dijo con una sonrisa el kiriko hijo.