Howling for You | Merlina x Enid (+18)

4.

Parte de la mañana ya había pasado, dejando que los minutos se convirtieran en horas ambas chicas cesarían con su acto sexual recuperando aire y tranquilidad en sus cuerpos.

Merlina, habría terminado noqueada por tanta actividad sexual cediendo a los brazos de Morfeo quedando dormida entre la desordenada cama de su contraria. Enid por su parte se habría quedado junto a ella, recostada a su lado abrazándola por la espalda con cierta fuerza impidiéndole salir de ese confort.

A pocos minutos los ojos fríos y negros de Merlina se abrieron se par en par con el mismo semblante de toda la vida, la muerte presentándose como una ráfaga en su penetrante mirada investigando lo que hacía alrededor suyo.

Inspeccionando el ambiente cayó en cuenta de las acciones que habrían pasado horas atrás, curiosa de ello noto cada vez las cosas que estaban fuera de su lugar: la cama donde reposaba su cuerpo no era la suya, la calidez que sentía detrás de su cuerpo era ajeno a ella y sobre este un brazo desnudo con un par de pulseras en ella la rodeaba.

Cabe añadir que, un ronquido de bajo volumen más con tonos roncos hacía su presencia cerca de su oído, nada más ni nada menos provenientes de su lobuna roomie. Así como su contraria, ella no poseía ninguna prenda por obvias razones, una corriente de aire frio la atrapó queriendo taparse con lo más cercano que tuviese como respuesta inconsciente.

Maldita la suerte de lado de Addams al no poder ninguna extremidad de su cuerpo sin escuchar un gruñido animal de Enid, así como más fuerza en el abrazo que le proporcionaba.

— Déjame ir. — demandó sería

Enid por su parte no mostraba signos de volver al plano de realidad continuando con su siesta, la única respuesta que pudo dar su subconsciente fue otro gruñido de advertencia evitando que la de cabellos azabaches hiciera movimiento alguno.

— Enid. — a voz de Merlina replicó con un todo más alto — ¡Enid! —

La rubia expreso inconformidad al escucharle balbuceando un poco en el proceso, al menos el gritar daba resultado.

— ¡Enid! — vocifero una vez más — ¡Hazte a un lado! —

Tal fue el volumen y demanda de sus palabras que el trance somnífero en Enid se disipó regresando a la realidad, su semblante molesto no se hizo esperar, no obstante, hizo caso a las palabras de Merlina.

— ¡Auch, no grites! — la rubia se quejó quitando su brazo.

Merlina aprovechando su libertad se levantó de la cama colorida yendo directamente hacia sus ropas tiradas en aquel lúgubre piso observando cómo estás estaban rasgadas por causa de la rubia.

— Demonios. — mencionó con enojo Addams.

Enid dio un gran bostezo sacando una lagrimita que corrió por su mejilla, despabilándose con mucha flojera sobre ella; ya más despierta observo con detenimiento su alrededor tratando de recordar lo que había pasado.

La mente de Enid se mantenía nublada recogiendo pedazos de lo que sucedió, confusa continúo examinando: Merlina estaba recostada con ella, su cama destendida, ambas con sus cuerpos desnudos, el calor en el ambiente...

«Ay no...» su mente quedó en shock.

Como si fuese un rayo se levantó de un brinco, examinó su cuerpo desnudo y el de su contraria, la palabra "No" se repetía una y otra vez en su cabeza. Buscando entre las prendas del suelo, dio con aquel distintivo broche nuevo colocándolo en su cabello sintiendo una ráfaga de tranquilidad inusual.

Esto no pasó desapercibido por Merlina quien rápidamente unió los puntos, todo resultaba en el broche y como este detenía los impulsos de su roomie; guardando este dato por su mente continúo examinando sus prendas rasgadas con una expresión de desagrado por los hechos. Dejando aquellas prendas en un extremo de su cama se dirigió a su closet buscando algo más que colocarse encima encontrando una camisa de cuello de tortuga negro con unos jeans ajustados grises.