Mis Sentimientos Pueden Esperar [GL]

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Ji Youyan terminó de sollozar pero no tuvo valor para decir nada más. Se quedó mirando la ventana del chat, que seguía sin responder, soltó una carcajada amarga, se secó las lágrimas y se levantó de la cama para lavarse la cara.

No esperaba que Jing Xiu le respondiera de inmediato. Había ofendido tantas veces la amabilidad y tolerancia de Jing Xiu, y ahora todo esto era obra suya. Sólo quería que Jing Xiu supiera que era diferente a antes. Se volvería más honesta, aprendería a mostrar debilidad, y dejaría ir el orgullo y la arrogancia que no debería haber tenido en el amor.

Aunque seguía luchando, poco a poco sería capaz de recomponer su verdadero corazón para que Jing Xiu lo viera.

Esta era su sinceridad y determinación.

Mañana tenía que grabar un programa, así que para evitar la hinchazón de ojos, se lavó la cara con agua fría y se aplicó una toalla fría en los ojos durante mucho tiempo. Una vez segura de que no había ninguna anomalía, estaba demasiado cansada para molestarse en calentarse las manos y los pies. Volvió a la cama, con la intención de apagar la alarma que solía poner para recordarse a sí misma cuándo debía dormir. Cogió el teléfono y encendió la pantalla, pero se encontró con un mensaje de WeChat sin leer.

Era de Jing Xiu, enviado hacía unos minutos. Sólo tres palabras: "Ven aquí".

Ji Youyan se incorporó de inmediato, rebosante de alegría. Unos segundos después, tiró el teléfono a un lado, se quitó las sábanas, se puso las zapatillas de algodón y salió corriendo por la puerta con un movimiento suave.

No fue hasta que corrió hasta la puerta de Jing Xiu y levantó la mano para llamar que Ji Youyan recobró el sentido.

¿Qué estaba haciendo? Ji Youyan miró sus zapatillas desparejadas y su aspecto desaliñado y se rió irónicamente.

El frío del salón la asaltó y Ji Youyan se estremeció involuntariamente. Retiró la mano con la que estaba a punto de llamar a la puerta, se cambió las zapatillas a los pies correctos, se alisó la ropa y estaba a punto de arreglarse el pelo cuando la puerta se abrió de repente sin que ella llamara.

Jing Xiu estaba entre las sombras, con una expresión tan fría e indiferente como siempre.

Después de una efusión tan sincera de sí misma, al ver a Jing Xiu tan calmada, Ji Youyan abrió la boca y torpemente gritó "Xiu", pero de repente se sintió demasiado avergonzada y apenada para decir algo más.

Jing Xiu miró la fina ropa de dormir de Ji Youyan y frunció ligeramente el ceño.

"Entra", dijo rotundamente, abriendo más la puerta.

Ji Youyan se sobresaltó al instante, sintiéndose honrada. Aprovechando que Jing Xiu estaba de espaldas cuando se hizo a un lado, Ji Youyan vio por primera vez la habitación de Jing Xiu al completo. Aunque la distribución y el mobiliario eran iguales a los de su propia habitación, de alguna manera todo parecía diferente simplemente porque Jing Xiu vivía allí.

Ji Youyan se retorció las manos y entró en la habitación de Jing Xiu, cada paso llevaba un profundo peso. La serie de sorpresas de esta noche la había dejado aturdida, e inconscientemente se preguntaba si esta puerta abierta representaba, aunque fuera en lo más mínimo, que Jing Xiu le volvía a abrir su corazón.

Jing Xiu no se dio cuenta de sus pensamientos. Se paró junto a la mesa, cogió la tetera y le sirvió a Ji Youyan una taza de agua caliente, diciendo tranquilamente mientras se la entregaba: "Está limpia".

Ji Youyan miró su expresión serena y no pudo evitar sonreír. Cogió la taza con las dos manos, el calor de la taza le alivió las palmas y la hizo suspirar satisfecha.