Ji Youyan salió de la ducha envuelta en una toalla. Miró deliberadamente la pantalla de su teléfono, donde Jing Xiu aparecía igual que cuando Youyan entró en el baño: leyendo un libro con seriedad.
Ji Youyan no pudo discernir nada raro, así que sonrió con picardía y detuvo discretamente la grabación de la pantalla.
Después de secarse el pelo, se metió en la cama, encendió el altavoz del teléfono y lo apoyó junto a la almohada antes de acostarse y decir: "Buenas noches".
Sólo entonces la miró Jing Xiu. Su garganta se estremeció cuando respondió en voz baja: "Buenas noches".
Ji Youyan se tumbó de lado, apoyó la cabeza en la mano y miró anhelante la pantalla.
"Cierra los ojos y duerme", le ordenó Jing Xiu, ajena a sus románticas insinuaciones.
Ji Youyan rió suavemente. Ella tarareó en señal de reconocimiento y cerró los ojos obedientemente.
Agotada, al principio sus pensamientos iban a la deriva, pero pronto cayó en un sueño profundo e inconsciente...
Mucho después, Jing Xiu cerró el libro del que no había leído ni una palabra, cogió su teléfono y miró fijamente la cara dormida de Ji Youyan. Trazó las cejas, los ojos y los labios rojos de Ji Youyan con su dedo en la pantalla, su mente repitiendo la seductora visión que había presenciado antes...
Incapaz de apagar las llamas, sólo las había avivado. Jing Xiu golpeó la frente de Ji Youyan, avergonzada, y luego frotó suavemente el mismo lugar, como si temiera haberle hecho daño.
Entró en el cuarto de baño y se dio otra ducha.
Cuando Ji Youyan se despertó con el despertador, Jing Xiu ya había terminado la videollamada.
"Ahorra batería", le había dicho Jing Xiu.
Ji Youyan sonrió irónicamente: Jing Xiu era siempre tan considerado. Al recordar algo, abrió su galería de fotos y encontró la grabación de la pantalla de anoche.
Al principio, el vídeo mostraba a Jing Xiu realmente concentrada en la lectura, pero en algún momento, se volvió hacia la cámara y no volvió a apartar la vista.
Al ver su propia figura parcialmente visible en la pequeña ventana mientras observaba la mirada cada vez más ardiente de Jing Xiu en la pantalla principal, las mejillas de Youyan se sonrojaron.
Se sentía como si hubieran vuelto a esa fase tentativa y coqueta de su relación.
Cuando estaban compitiendo, Jing Xiu había invitado deliberadamente a Ji Youyan a ducharse juntas, alegando que así ahorraría tiempo a sus compañeras de habitación que esperaban en la cola. Ji Youyan vio cómo las orejas de Jing Xiu se ponían rojas antes de desnudarse lentamente delante de ella. El rostro de Ji Youyan se sonrojó, su corazón se aceleró y finalmente huyó avergonzada. Esa noche, mientras Jing Xiu yacía junto a su almohada, con su aliento dulce como las orquídeas, le preguntó con conocimiento de causa: "¿Por qué huiste?". Sus sentimientos de entonces, una mezcla de timidez y placer, ¿eran los mismos que los de Ji Youyan ahora?
La grabación de la pantalla se reprodujo hasta que Ji Youyan estuvo a punto de salir de la ducha. Fue entonces cuando Jing Xiu parpadeó en la pantalla y se dio cuenta de lo que estaba pasando. Se apresuró a apartar la cabeza, enderezó la postura y sujetó el libro correctamente, incluso hojeó varias páginas para aparentar.
Parecía una niña traviesa con miedo a que la pillara el profesor.
Era tan adorable. El corazón de Ji Youyan se derretía mientras la miraba, incapaz de resistirse a rebobinar y repetir el momento una y otra vez...
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Mis Sentimientos Pueden Esperar [GL]
FantasyCuando se estaba celebrando la boda de la emperatriz del cine Jing Xiu, Weibo se vio arrasado por un bombardeo de noticias locales: "La nueva emperatriz del cine Ji Youyan fallece por alcoholismo". Poco después, apareció otro titular: "La boda se ca...