One-Shot Nanatsu no taizai

«Mi Héroe»

Yo siempre te admire deseaba ser como tu, tener la valentía y determinación para proteger a las personas que amaba. Desde que era un bebe soñaba con ser un caballero sacro el más fuerte de todos, quería llegar al nivel de mi padre, para mis ojos en ese entonces nadie superaba a mi padre, Zarastras el gran maestro de los caballeros sacros. Hasta que me dijo unas palabras.
 
—No hijo mío debes querer ser más fuerte que yo.— me dijo con una sonrisa suave en sus labios. —Hay personas con un poder mucho más abrumador que el mío, que con tan solo un movimiento de espada te dejan indefenso.

Sus palabras quedaron resonando en mi cabeza no importa cuanto lo intentara, personas más fuertes que mi padre el una de los más poderosos caballeros del reino. Cuando le volví a preguntar solo me dijo «Te voy a presentar a la orden de los siete pecados capitales cuando vuelvan de una misión.» Lo siete pecados capitales, era la nueva orden de caballeros que el rey Bartra creó encargados de proteger el reino de Liones, desde que fueron creados dicen que son feroces que su poder es intimidarte el más famoso de ellos era su capitán, Meliodas el dragón de la ira. Las misiones que ellos hacían ni siquiera un caballero sacro normal se atrevería a tomar esa misiones, por eso esa orden se volvió muy famosa en la capital y a las afueras del reino.

Mi padre me llevo a unos de los festivales que recibían a la misteriosa orden de caballeros, le lanzaban flores y obsequios por volver con vida y bien de su misión. Estaba anonadado por el gran cariño que le tenía la gente de la capital a estas personas que era misteriosas para mi. No pude ver sus caras estaban cubiertos por los cascos de sus armaduras, hasta las mismísima familia real estaban esperándolo en el palacio para recibirlos. Cuando acabo todo el protocolo mi padre  me llevo a la zona de entrenamientos de los caballeros sacros, donde los siete pecados estaban tomando su entrenamiento.

Me quede sumamente impresionado cuando mi padre me los fue presentando una por uno. Todos eran totalmente asombrosos una gigante, un hada, un humano inmortal, un muñeco, una maga y un hombre que podía controlar el sol, cada uno tenía una bestia en su cuerpo que los identificaba, eran sumamente asombrosos... Pero cuando te conocí a ti fue el mejor día de mi vida. Al principio no lo podía creer para mi opinión eras un niño igual que yo y los demás me estaban haciendo una clase de broma, pero cuando mi padre me dijo que tu en verdad era el capitán de los pecados capitales no lo podía creer.

—Pero papá el es un niño igual que yo.— Todos se habían reído por el comentario que hice. Tu en cambio te cruzaste de brazos y alzaste una ceja.

—Aprende a respetar a tus mayores chico.

Pero luego me sonreiste y te presentaste, aún no podía creer que un niño podía ser el líder de la legendaria orden de caballeros de Liones. Luego mi opinión cambio rápidamente cuando mi padre quiso darme una demostración, te invito a una batalla de espadas que aceptaste gustoso. Ninguno de los pecados mostraba ninguna reacción más alla de una sonrisa, para mi era impresionante su reacción, que acaso no estaban preocupado que su líder estaba a punto de luchar con el gran maestro de los caballeros sacros.

No había pasado ni siquiera un minuto y mi padre estaba tirado en el piso con una espada clavada a su lado, tu habías ganado el duelo, con tanta facilida y rapidez que ni siquiera yo pude verlo. Desde ese día empezó mi admiración por ti deseaba ser tan buen caballero como tu. A pesar de ser un poderoso caballero tu no eres una persona de presumir tu habilidades como otros hombres que con nada más llamarse caballeros sacros se creían con el derecho de humillar a las demás personas. Hasta algunos caballeros te llegaban  subestimar, tu solo los escuchabas y tomabas sus comentarios con indiferencia, eras muy sonriente y alegre. Nunca te vi enojado aunque mi padre una vez me dijo algo sobre eso.

«Creeme Gil es mucho mejor tener al capitán Meliodas de buen humor que estando enojado.» Con eso entendí que tu eras mucho más peligroso de lo que parecías. Con los días le suplique a mi padre que te convenciera para que me dieras clases de espada, cuando aceptaste fue el mejor día de mi vida. Aunque no importa cuanto lo intentara siempre se me caía la espada de las manos, aunque nunca me juzgaste ni te reiste siempre lo volvíamos hacer, me sentía tan patetico a tu lado o al lado de mi padre ustedes erán personas tan poderosas y yo solo un niño lloron que jugaba hacer caballero.

La gente empezaba hablar a mis espaldas de que yo no era tan fuerte como mi padre, los únicos que no me llegaron a juzgar con crueldad fue mi padre, tu y... Margaret. Ustedes tres siempre creyeron que yo podía dar mucho más, pero un infierno se desato poco después.

Margaret me dijo que mi tío y Hendrickson habían asesinado a mi padre y pensaban culpar a los siete pecados capitales, no lo quise creer pero con la aterrada y horrorizada que se veía supe que no me estaba mintiendo. Quería gritar y buscar a los asesinos de mi padre y vengar su muerte, pero Margaret y yo no nos dimos cuenta que alguien nos estaba espiando, una maga llamada Vivian. Ella nos lanzo una maldición me dijo que se hacía algo o llegaba a decir algo Margaret pagaría las consecuencias de mis acciones, pero yo no quería que sufriera así que calle, pero tampoco iba a permitir que te culparan de algo que tu no hiciste.

Corrí a buscarte te suplique que huyeras que nos fueras al festival del reino que algo malo iba a pasar no podía ser explícito con mis palabras o si no le harían daño a Margaret, pero tu comprediste mis palabras pero me diste unas que me ayudarían en el futuro.

—Si la cosas se te ponen dificiles, si estas triste y no tienes a quien recurrir, dilo en voz alta. Soy más fuerte que  cualquiera de los siete pecados capitales.— con una gran sonrisa me dijiste esas palabras que detuvieron me llanto en un instante.

—¿Soy... Más fuerte que cualquiera de los siete pecados capitales.?

Mi llanto poco a poco fue aumentando más tu me abrazaste y me acuerdo bien de tu palabras «no te preocupes pequeño Gil. Si estas en problemas vendré a ti a rescatarte.» Tus palabras quedaron grabadas en mi mente, me aferre a ti como se fuera a solucionar todos mis problemas, pero por mi culpa, por mi maldita cobardía tu y los demas pecados iban hacer culpados de algo que jamás hicieron. Quería golpear me, no soy mejor que Hendrickson y Dreyfus ellos traicionaron a mi padre, y yo te traicione a ti todo eso iba hacer mi culpa.

Mi padre se sentiría decepcionado de mi, Margaret se pondría triste, la princesa Elizabeth que a sido una gran amiga para mi me odiaría por que tu serías acusado como criminal por mi culpa y tu seguro me vas aborrecer por haberte fallado. Te habías ido al festival junto a los demás pecados lo único que podía ver como tu espalda desapareció por el camino y sería a la ultima vez que te vería durante mucho tiempo. 

Luego paso todo las masacre que elimino a cientos de caballero sacros, ahora iban hacer acusados como criminales por actos que jamás cometieron solo por mi culpa, muchos llegaron a decir que moriste pero yo jamás lo creía yo sabia que tu no ibas a morir con tanta sencillez, deseaba llorar con todas mis fuerzas pero ni eso me lo volvieron a permitir. Mi entrenamiento se volvió más duro e intenso pero aun la culpa me estaba consumiendo y la maldición que tenía se estaba volviendo más y más pesada. Pero no lo volvería a fallar a nadie más, le falle a mi padre, te falle a ti, no le fallaría a Margaret.
    
Pero yo se muy bien que mi héroe no va a fallarme a pesar que yo si le falle a el.  algo muy bien conocido del capitán Meliodas el no hace promesas que no va a poder cumplir, el siempre las cumple.

[....]

¡Hello!, que le pareció el primer One-shot de muchos que van a ver, se que su pesima escritora pero les prometo que voy a intentar mejorar. ¿Que les pareció?, se imaginaron que el primer One-shot iba tratarse de Gilthunder y su admiración por Meliodas, y además de como yo pienso que debió haberse sentido después de la muerte de su padre y ls desaparición de Meliodas.

Su amistad siempre me a parecido muy bonita y sincera, no tan profunda como la de Ban y Meliodas, y luego de la primera temporada le dieron poca importancia en el manga y el anime, pero si una muy bonita. Para los que leyeron el manga saben que Meliodas le prometió a Gil que si estaba en problemas el iba a salvarlo, y eso me pareció muy lindo por parte de Meliodas.

¡Bye espero que le haya gustado!