Sólo le podría pasar a Harry -COMPLETO-

Capítulo 1

Solo Podría Sucederle a Harry

ADVERTENCIA: Esta historia es solo para audiencias maduras. Contiene representaciones de actos y situaciones sexuales.

NOTA: Esta es una comedia elegante. Hay una pequeña trama aquí, pero sobre todo es solo una excusa para que Harry se ponga de una manera entretenida. Trato de apegarme a las personalidades canónicas tanto como sea posible. Toda la acción tiene lugar el verano después del séptimo año de Harry. Habrá un poco de femslash, pero no de barra masculina.

Los dos últimos libros nunca sucedieron. Dumbledore está vivo y Harry no es un horcrux. No es que realmente importe.

DESCARGO DE RESPONSABILIDAD: Nada de esto me pertenece. Harry Potter y sus chicas pertenecen a J.K. Rowling.

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Capítulo 1:

Harry Potter, The-Boy-Who-Lived, ahora conocido como The-Boy-Who-Won, caminó vacilante hacia las puertas abiertas del Ala del Hospital. Había derrotado a Voldemort para siempre hace solo tres semanas, pero casi preferiría enfrentarlo de nuevo que lidiar con su problema actual.

Fue su victoria sobre Voldemort lo que estaba en la raíz de su incomodidad. Cuando Harry había derribado al Señor Oscuro en el césped de Hogwarts, una avalancha de poder crudo había fluido de Voldemort hacia él. No lo había entendido, pero sabía que lo hacía sentir increíblemente poderoso y vivo.

Al principio había dado la bienvenida a la nueva sensación. Se sentía prácticamente invencible, y ya no tenía el peso de la profecía colgando de su cuello. Todo el mundo mágico celebró su victoria, y Harry celebró junto con ellos.

Le tomó solo unos días darse cuenta de que su nuevo poder tenía un precio.

Comenzó con un peso aplastante en el pecho que le dificultaba respirar. Sintió alivio solo cuando gastó grandes cantidades de energía mágica en la Sala de Requisitos. Sin embargo, nunca se acercó al agotamiento mágico sin importar lo que intentara.

Continuó, sin embargo, con una condición mucho más embarazosa: Harry ahora tenía una erección casi constante.

Como un hombre de 17 años de sangre roja, no era ajeno a excitarse fácilmente. Pero esto era diferente. Ahora estaba casi dolorosamente erecto en todo momento, y sintió la necesidad de 'aliviarse' hasta 10 veces por día. El alivio duró solo media hora más o menos, y luego su erección regresaría, clamando por su atención. Incluso alguien tan inexperto sexualmente como Harry sabía que esto no era normal.

Así que ahora se acercaba a la única persona que conocía que no se reiría de su situación. Señora Pomfrey. Había considerado acercarse a Hermione, pero este problema era de naturaleza demasiado personal.

Del mismo modo, no podía verse acercándose a Dumbledore sobre esta situación. El anciano Director lo había entrenado personalmente durante los últimos dos años, y era un experto en todas las cosas mágicas, pero no había forma de que él fuera a hablar con el anciano sobre su pene.

Golpeando en voz alta en la puerta abierta al ala del hospital, Harry se ceñió para la humillante conversación por venir.

"Er, Madam Pomfrey?"

"Entra, Sr. Potter", dijo la enfermera matrona después de que salió de su oficina. "Qué puedo hacer por ti? No me digas que ya has logrado lastimarte!"

"No exactamente", murmuró Harry, su rostro se calentó. "Ya ves, yo.. bueno, es un poco vergonzoso."

"Bueno, lo he visto y escuchado todo, joven. Te aseguro que esto se quedará entre nosotros. Qué pasa?"