Los nuevos en Forks

Percy anda con Jasper

ADVERTENCIA

ACTOS EXPLÍCITOS A CONTINUACIÓN

Proceda con Precaución

Carlisle le asintió a su hijo, dejando que Percy se lo llevara. Jasper estaba nervioso a más no poder, el chico que lo guiaba, llevándolo seductoramente de la mano estaba prácticamente en paños menores y eso parecía ser muy normal para Percy.

— P-Percival... —llamó el vampiro—

— Puedes decirme Percy. —sonrió abriendo una puerta enorme de madera blanca—

— ¿Dónde me traes? —dijo notando una piscina enorme de agua clara—

— Este es mi cuarto. —le dijo quitándose las mangas— Ven, entremos al agua.

Jasper no pudo evitar sonrojarse al ver el cuerpo perfectamente esculpido de Percy, que lo jalaba suavemente al agua cristalina.

— No, no creo que sea una buena idea. —dijo Jasper nervioso, retrocediendo un poco—

— Vamos, relájate. Te prometo que te sentirás mejor una vez que estemos en el agua. —insistió Percy, acercándose a él con una sonrisa seductora—

La piel de Percy brillaba sobre la luz de las fogatas que estaban cerca. Jasper al final cedió y se quitó la playera para no mojarla, era de sus camisas favoritas después de todo. El agua estaba tibia pero las grandes fogatas al fondo le estaban dando calor. Bueno, el fuego y las hermosas y carnosas piernas de Percy, quien sostenía una copa de vino

— Sé que no tomas vino.. pero.. ¿Gustas un poco? —preguntó Percy, jugando con unas gotas del líquido rojo en sus labios— Quizá, algo incluso más.. picante. —comentó apretando sus muslos entre sí— 

Jasper tragó muy duro, sintiendo claramente cómo el agua empezaba a parecer regular su temperatura corporal. Miró la garganta de Percy, por donde varias gotas de agua caían. Lamió sus labios y sintió cómo su garganta estaba completamente seca.

— Ven.. —dijo Percy, llamándolo con un dedo a la cama frente a la piscina que tenía— 

Jasper se acercó levemente tímido, pero no del todo. Percy abrió sus piernas para dejarle espacio al vampiro rubio. Los labios pintados de carmín de Percival llamaban a Jasper. 

Jasper apretó muy suavemente la coyuntura de la entrepierna y el jadeo placentero de Percival lo hizo perder la razón. Lo besó como si lo fuera a devorar, con pasión y lujuria corriendo en sus sentidos.

— Mgh... Jasper —gimió el nombre sintiendo sus muslos ser apretados y masajeados por el vampiro— Mmm... más...

— ¿Quieres más? —gruñó serio el vampiro— Ruega.

— Te lo ruego.. más... por favor... —lloraba del placer el pelirrojo— 

— Nada mal... lindura... —dijo besando el cuello de Percy— Espero que estés listo..

— Sí, sí.. lo estoy...

Jasper tomó el muslo de Percy y lo mordió suavemente, sin dejar salir sangre de su cuerpo. Percy sólo pudo gemir más y más alto sintiendo las caricias de Jasper en su entrepierna, la cuál ya había preparado antes. 

— Oh.. ¿Ya estabas listo para cuando me tuvieras a tus pies, Percival? —le dijo Jasper al oído, sintiendo cómo temblaba— 

— Sí.. me preparé antes de traerte aquí... —dijo sintiendo a Jasper jugar con su entrada—