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La pelea con el dolor de muelas

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GREY [6 años después]

Todos los días tengo que levantarme a las 5:00 AM como lo estoy haciendo para ir a clase. Me doy una ducha con agua caliente, me visto con un shorts de jean negro con una camisa blanca con un discreto escote de v y unos zapatos de ambos colores para combinar. Agarro mi bolso y bajo las escaleras de caracol para llegar más rápido a la cocina, me sirvo un sándwich y un vaso de jugo de naranja. Me atragantó con el pan al ver que me relajé demasiado y ya son casi las 6. Corro por la sala de estar y mis hermanos y mi primo me estan esperando en el auto junto a los guardaespaldas que van en un auto adelante y otro atrás además de los que conducirán para llevarnos «no se porque mi papá nos pone tanta seguridad» duramos en el camino casi una hora y media.

Bajo del auto seguida de mi primo y mis hermanos salen por la otra puerta.

—Estas muy escotada hoy, prim—me dice Roy sonriendo con los animos de siempre. Refiriéndose a mi escote.

—claro que no, Roiniel—digo su nombre completo por qué se que le molesta. Borra la sonrisa que traía y me mira como que: ¿Es en serio?

—Ja. Ja. Ja. Muy graciosa—se ríe sin gracia.

—Oigan—nos interrumpe Jake—¿Podemos pasar a clase antes de perder otra media hora más?

Roy y yo nos miramos y aguantamos las risas «los 2 sabemos que está apresurado para entrar a la única materia del día en la que comparte hora con Elena solo para verla» Jake entra junto a Sophi y Roy y yo los seguimos.

—Es un bobo—murmuro mirando por donde se pierde mi hermano.

—¿En serio le cuesta tanto cruzar palabra con la chica que le gusta?—pregunta Roy y yo me encojo de hombros acordándome de algo:

—Tu no puedes decir mucho, Roiniel—le golpeó el hombro.

—¡Que no me digas a...! Espera un momento ¿Por qué no puedo decir mucho?—se hace el desentendido.

—Tu tampoco cruzas palabra con Maite.

—Esa chica no me gusta, Prim—se pone serio.

—¿No es Maite la que viene allá?—señalo por arriba de su hombro y voltea abruptamente mientras pregunta:

—¿Dónde?—en cuánto se da de cuenta que le menti se voltea y ve que no puedo con la risa.

—¡Los dos son unos bobos! JAJAJAJAJ

Rueda los ojos niega con la cabeza y se cruza de brazos como si yo no tuviera remedio.

—¿No maduraras nunca verdad?—me pregunta y yo me limpio la lágrima que se me escapó.

—No es una fruta—dice antes que yo una voz que reconozco muy bien.

—¡Mai!—me le lanzó encima—¡Feliz cumple, amiga!—me devuelve el habrazo.

—Gracias—se separa del abrazo y mira de reojo a Roy quien se aclara la garganta antes de dar un paso adelante como si lo que fuera a hacer fuera una gran hasaña y dice:

—Feliz cumpleaños, Maite—la mira a los ojos y de su bolsillo saca una cajita, de ella saca una cadena que cuando noto que es el dije me deja boquiabierta—se que no es mucho pero...—deja lo demas en el aire al ver que Maite se tapa la boca con las manos sin creer lo que ve.

Rael [la muerte hecha persona] (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora