HASTA EL DÍA QUE ME QUIERAS | KOOKJIN

19. Verdades

@MariaFernandaRogrig1, lo actualice solo por ti!
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La puerta será abierta por un tipo que probablemente se burlara de mi.

No tenía el dinero para pagar el traje. Y...¿Si llamo a mis amigos?

No ¡Es un definitivo no!

Jimin se burlaria de mi, no creo poder soportar su lengua venenosa. No ahora que siento algo de envidia hacia él.

"¡Voy a forzar la puerta si no la abre señorito!" gritó el hombre de afuera.

Sé que escuchaban mi llanto, hasta yo tenía vergüenza de no poder controlarlos y la furia por no poder esconderlos, hacía que se intensificarán mucho más.

Me siento cansado y me obligo a mi mismo a recostarme en la esquina del probador, con mis manos abrazando mis piernas y escondiendo mi rostro en el pequeño espacio entre mi pecho y mis piernas.

Escuché como la tela cedía. Ya estaba roto. ¿Qué más podía romper?

Debía concentrarme en mi gran fuga, pero no podía pensar porque seguía llorando y solo me enfocaba en odiarme y pensar lo peor de mí.

"¡No se atreva a abrir esa puerta!"

Aquella voz furiosa e imperativa se manifestó en el momento preciso. ¡Era mi héroe!

Sabía que él siempre estaría pendiente de mi, somos los mejores amigos, estamos conectados por un hilo rojo del destino, destinados a estar juntos y apoyarnos en todo. ¿Ese era el significado? No me importa. Jungkook estaba afuera e iba a impedir el ingreso de ese malvado hombre.

Los murmullos se apaciguaron y escuché muy suavemente como le decían a Jungkook que me saque de allí porque estaban preocupados por mi llanto.

Con mis ojitos entrecerrados, sentí la indignación que empezó a enardecer de lo más profundo de mi ser. ¡Eran unos mentirosos de mierda! ¡Nunca dijeron que estaban preocupados por mi! Solo querían que abriera la puerta para ver mi desgracia. ¡Dios, soy una María Magdalena! ¡¿Puedes dejarme deshidratado?! Ya no quiero llorar con el solo pensamiento de ser observado como una ballena en traje de mico.

Alguien toco la puerta suavemente. Sabía que era Jungkook por la suavidad de su toque.

"Mi Jinnie, ¿Estas bien? ¿Puedes abrir la puerta?" preguntó.

Sentí que ese era el tono en el que debían hablarme, no merecía un trato menor.

"Jun... Jun... Kook..." Intenté no sonar tan lamentable, pero siempre me superó con creces. Así soy yo, extremadamente expresivo "E... Ellos... Querían entrar..." mis sollozos fueron escapando impidiendo que respirara con tranquilidad.

"Abre Jinnie. Yo estoy aquí para cuidarte" me dijo.

No iba a hacerme de rogar, eso no significa que sea fácil de convencer, solo deben ser tan persuasivos como mi Kookie.

Me acerqué y abrí poquito. No deseaba que las personas me observarán y se ganarán el pase conmigo.

"Jung... kook" hablé mientras miraba su cara de desconcierto por mis mocos y lagrimas desbordantes.

Lo sé, no existía nadie más ridículo que yo en ese preciso instante. Sus ojos me observaron atentamente, buscando alguna herida en mi.

Me aleje de la puerta e inmediatamente ingreso y volvió a cerrarla. Busco mi mirada, cuando la encontró, solo pude esquivarla de vergüenza. Me veía como Hulk después de su transformación, así deje la ropa.

Tomó mi rostro en sus manos y empezó a limpiar mis lágrimas.

"Te ves hermoso, pero no quiero que llores por algo que te haga sentir mal, solo... En otras circunstancias" me dijo.