Encrucijada

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Checo quedó perplejo ante la situación, estaba a punto de entregarse, sin embargo, la repentina caída de Max lo dejó desconcertado y preocupado. Checo se quedó mirando fijamente al hombre que yacía dormido sobre él, preguntándose qué hacer. ¿Debería despertarlo y hablar sobre lo que acababa de suceder? ¿O debería dejar que durmiera y abordar el asunto más tarde?

Pero sobre todo pensó que corresponder a los besos de Max había estado mal, no porque no le gustara; pero estaba borracho y eso no había estado bien, al día siguiente ¿Qué le iba decir a su jefe? ¿Qué se iba aprovechar de él? Solo pudo pensar en lo que habría pasado y se horrorizó.

Se trató de levantar de la cama dejando a Max descansar pero cuando se sentó, Max lo atrapó en brazos, el de ojos azules dejó liberar su aroma y se restregaba en el cuerpo del mayor.

//Pov: Checo//

Sentí su aroma inundar la habitación y no sabía que hacer, sentí que empezó acariciar mi abdomen por debajo de la camiseta, me paré de un salto, solo podía ver como me buscaba al rededor de la cama sin poder abrir los ojos y no pude evitar soltar una risita.

_ Checo..._ decía entre quejidos.
Lo traté de levantar y llevar al baño para que una ducha le bajara un poco la borrachera, evité decirle algo mientras que Max... lo único que hacía era manosearme, le dejé unas prendas y toallas, lo ayudé a desvestirse evitando ver cierta parte, aunque fallé en el intento, lo que ví mientras se quitaba la ropa interior me dejó hasta la boca abierta, así que lo dejé en la tina y salí a tomar agua.

(Checo es el de los que comenta "hasta abrí la boca" o "hasta me senté en el teléfono" JAJAJAJAJA)

Para cuando Max salió de la ducha, lo ayudé a recostarse mientras dejé que durmiera en la cama. Yo tomé unas almohadas y una sábana porque iba dormir en el sillón.

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(Por la mañana)

Desperté. Tenía muchas cosas en la cabeza, recién había había vuelto ver a Carlos y recordé el momento en el cual la conversación empezó hacerse un poco tensa ya que Lewis solo lo miraba con el ceño fruncido mientras le daba mi teléfono a Carlos, a lo que yo supuse, hizo por ser rivales en la misma industria.

Salí de mis pensamientos y empecé a preparar café para cuando Max despertara.

Tomé mi teléfono un momento, revisé las notificaciones viendo mensajes de Carlos y no pude evitar reírme leyendo el último mensaje:

"Holaaa"

"Hay que salir un día de estos"

"¿Qué día puedes?"

"Pero contéstame, cabrón 😡"

Aunque llevaba tiempo sin hablar con Carlos, no me molestaba que me hablara así.

Cuando iba a contestar escuché la puerta de la habitación abrirse, de ahí salió Max, con un pants gris y una playera, le quedaba un poco pequeña pero se veía muy guapo, no pude evitar soltar una carcajada al darme cuenta que no era una simple playera blanca, sino que tenía el estampado de la caricatura de "el chavo del ocho".

- Pff _ no podía dejar de reírme y solo veía como Max me miraba con cierta confusión, así que me puse serio_ perdón _ dije tosiendo tratando de parar la risa.

Tenía que explicar lo que pasó, o por lo menos lo intentaría, tal vez debería empezar por...

_ Me veo gracioso, supongo _ dijo con una risa jadeante.

_ Oh, no. Lo siento _ dije aclarando mi garganta.

_ Yo soy el que lo siente, realmente no sé ni porqué estoy aquí_ dijo el de ojos azules mientras se rascaba la cabeza.

Desinterés EncubiertoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora