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𝑠𝑜𝑛 𝑙𝑎𝑠 𝟹𝑎𝑚 𝑦 ℎ𝑎𝑦 𝑎𝑙𝑔𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑜 𝑒𝑠𝑡𝑎 𝑒𝑛 𝑙𝑎 𝑐𝑎𝑚𝑎

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Algo le revolvía el estómago, ese mal presentimiento lo hizo despertar. Abriendo levemente los ojos, observó a quienes estaban al lado de él en la cama.

"Uno, dos... falta alguien" empezó a murmurar, aun medio dormido. Se alzó en la cama para ver mejor, y darse cuenta del desaparecido "Missa, ¿dónde? urm. se despertó. fuck."

Ya se sentía bastante despierto, entonces salió cuidadosamente de la cama, tomando una manta y revolviéndose en ella en máximo siglo con cuidado de no despertar a sus hijos. los miró un momento antes de salir de la habitación, y después la casa, cuando no pudo encontrar a su esposo por ninguna parte.

Al salir, dirigió su mirada al cielo. Las estrellas tintineaban junto a la luna, y luego, al ver hacia su pequeño puerto, su esposo se encontraba de espaldas a él, con los pies en el pequeño lago. se veía tan despreocupado que por un momento pensó en dar la vuelta y dejarlo para volver a dormir, pero..

"Chingada madre-" gritó el mexicano con la mano al pecho como si tratara de detener a su corazón de saltar y abandonarlo cuando se dio la vuelta y vio a Philza detrás de él en la puerta de la casa. "shh" respondió prontamente Philza para callar los gritos de su marido " Los niños"

"Cierto, cierto... lo siento." Ahora Missa había bajado la voz, estando menos alterado. hizo una seña a su esposo para que se acercara.

Empezó a caminar hacia él, en volviéndose aún más en la manta que traía consigo, notando el frío de la noche. Al acercarse y ver más claramente a su esposo con los pies sumergidos en el agua, abrazándose a sí mismo, lo hizo fruncir el ceño.

"tsk. Estás afuera tan tarde y sin un abrigo" dijo Philza regañando, se sentó a su lado en cubrió a Missa en la manta. "Con este frío, y con los pies mojados" refunfuñaba.

" Crees que al otro lado del universo somos polvo espacial." Cortó Missa su regaño.

"Creo... creo, que no lo sé." bostezo mientras hablaba el rubio.

"¿No lo sabes? eh, qué poco romántico." Bromeó el mexicano chapoteando sus pies contra el agua con la mirada directa al cielo estrellado.

Sintiendo el error cometido, Philza tocio. "Supongo que en otro universo quizá somos polvo espacial."

"Quizá." repito Missa.

"Está bien, está bien, no soy un romántico, pero no estás conmigo por eso."

"buena pregunta, ¿porque estoy contigo?" suspiro de manera dramática el mexicano.

"ugh qué cruel." se llevó una mano al pecho con un quejido de falso dolor.

"En otro universo quizás somos un lago y un marinero." dijo el menor, mirando el agua bajo sus pies.

"Qué tendría de buena esa realidad"

"uhm.." pensó un momento sacando sus ojos del cielo y dirigiéndolos a su esposo "¿Podrías navegar sobre mí?"

"Sería mejor navegar contigo."

"Eso es más romántico."

"Oh, por favor, estoy muy cansado para esto." Se río Philza cansado.

"Duerme entonces."

El mayor puso su cabeza en el hombro de su esposo y cerró los ojos. Missa lo cubrió con la manta, y relajó su cuerpo poniendo su cabeza sobre la de él.

"Te amo, ¿lo sabes?"

"Dios bendito, estás todo meloso hoy." Replicó Philza, luchando contra sus ganas de dormir un poco más. "Te amo, te amo.. estoy cansado" se lamentó mientras se acurrucaba en el cuello de su esposo.

"Está bien, te estoy molestando mucho."

Missa pasó su mano por el cuello de su esposo y luego terminó acariciando su cabello. Y se quedaron allí un rato más.

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⏰ Última actualización: Apr 19 ⏰

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𝐒𝐎𝐌𝐄𝐎𝐍𝐄 𝐈𝐍 𝐁𝐄𝐃 ━ DeathduoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora