Capítulo 30 - No tan bonita como tú.

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Había muchas atracciones en el parque temático de Disney, pero es una lástima que todas tuvieran cola. Apenas habían probado algunos cuando ya era casi la hora de cenar.

Para la última atracción antes de la cena, los dos fueron al área de Piratas del Caribe. Esta atracción trataba sobre montar en un barco en una aventura. La iluminación no era la más brillante y al abordar, todos estaban ocupados cuidando sus pies, lo que hacía más conveniente hacer cosas malas.

Su Yi y Chu Ying fueron la primera pareja en abordar. Escogió la última fila, se sentó y tomó la mano de Chu Ying. El chico se quedó en silencio por un momento antes de doblar el brazo, permitiéndole a ella sostenerse más fácilmente.

El barco partió pronto. Sentadas frente a ellos estaban dos chicas, que se habían estado tomando selfies sin parar desde que subieron al barco.

"Levanta la mano más alto", dijo la chica de la izquierda. "¡Pon al chico guapo detrás de la foto también!"

"Mi mano es sólo así de larga, ¿qué tal si levantas la mano?" La chica que estaba al lado le pasó el teléfono.

La chica de la izquierda movió un poco la mano. "No funciona, sigo poniendo a la chica a su lado en el cuadro".

La comisura de los labios de Su Yi se arqueó.

¿Sabes que tiene alguien a su lado?

Sacó su teléfono, lo levantó, se bajó la máscara y se inclinó más cerca del rostro de Chu Ying. "Chico guapo, ¿te apetece una foto?"

Chu Ying curvó el labio y miró a la cámara.

Estaba un poco oscuro, así que levantó los dedos con la intención de abrir el flash, pero acababa de presionarlo cuando alguien chocó ligeramente contra ella. Fue acompañado por el chillido estridente de un niño. Chu Ying inmediatamente extendió la mano y la abrazó con fuerza por la cintura.

El impacto no fue fuerte, pero la voz no fue suave. Su Yi fue tomada por sorpresa y sintió que su mano se vaciaba repentinamente, antes de escuchar un fuerte chapoteo.

Su Yi miró sus manos vacías, sin reaccionar todavía.

El niño mimado de treinta y cinco, tal vez cuarenta kilogramos chocó con fuerza contra Chu Ying, trayendo consigo su propia voz.

La mamá del mocoso inmediatamente lo jaló hacia atrás, regañándolo ferozmente: "¡Discúlpate con ellos ahora!"

El mocoso fue regañado para que se sometiera y, obediente y entre lágrimas, dijo: "Lo siento".

Chu Ying no respondió. Al ver que la persona que estaba al lado no reaccionaba, miró hacia abajo y preguntó: "¿Te dolió?".

"..." Ella se dio la vuelta lastimosamente. "Mi teléfono se cayó al agua..."

Parecía completamente perdida, como aturdida.

Vio la sonrisa en los labios de Chu Ying y se molestó aún más. "... ¡y todavía te estás riendo!"

"No reír." Chu Ying apretó las comisuras de sus labios.

Su Yi se reclinó en su asiento y guardó silencio durante un largo rato antes de decir de repente: "Crees que el teléfono será retirado en el futuro... al menos no guardé nada que no debería tener en ese teléfono".

Acababa de terminar de hablar cuando el paisaje a su alrededor cambió repentinamente: el barco se 'hundió' en el fondo del océano, con las profundidades del océano completas con monstruos de las profundidades, naufragios y todo tipo de tesoros rodeándolos.

Chu Ying estaba a punto de decir algo cuando la persona que estaba al lado de repente saltó a su abrazo.

Temblando.

Él es mío, no se permiten objeciones.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora