No supe alejarme

Volveré cuando gustes

- ___ (tu nombre), estás bien? - me dijo una amiga. - sisi no pasa nada - le respondí, mientras me pasaba de todo.
Que cosas tan absurdas las que llevo en mente.

Estábamos sentadas esperando entrar a la película cuando mi teléfono vibró. Era otra vez mi mamá asegurandose que dejé ordenado mi cuarto, se cortó la llamada y mis amigas trataban que les dijera por qué estaba "extraña". Volvió a vibrar el teléfono mi mamá si molesta pero cuando vi la pantalla era ___. Esto no me puede estar pasando a mi, me alejé y contesté. - ¿Qué quieres ahora? - le dije con voz cortante - Tu sabes que lo único que quiero es verte - de verdad que esto es como un amorodio eterno, no lo soporto, pero al mismo tiempo no puedos dejarlo. - Está bien, que esta sea la última vez que me veas y terminamos con esto- me trancó. Me sentí como una inútil, pero da igual, con tal de verlo.

Mientras veíamos la película me llegó un mensaje de él: entonces nos veremos en tu casa?. Decía el mensaje. Voy a parar en un psiquiátrico por este imbécil. Le respondí que a las 9:00pm estuviese ahí, puntual

Salimos del cine, había sido una tarde extraña ya que estoy acostumbrada a contarle todo a mis amigas, pero ésta vez no me salió decirles. De igual manera después de que pasara todo iba a contarles. Estaban planeando ir a la casa de alguna de nosotras para quedarnos a dormir, puse la excusa de que me comprometí ir a cenar con mis tíos, obvio no me creyeron mucho y seguían insistiendo -Está bien, después de cenar con ellos me voy con ustedes- concluí.

Llegué a mi casa y lo primero que hice fue meterme a bañar, parecía esas personas que son obsesivo-compulsivo que tienen mil cosas en la cabeza, la afeitadora, el jabón olor a coco, la ropa, mi cabello, mis dientes, la sala, el orden, e infinitas dudas, ¿ordeno mi cuarto?, ¿le preparo una cena?, ¿estaremos en la sala o en la cocina?, sentía que no tenía tiempo para nada, menos mal que mi mamá iba de salida con sus amigas, pero igual le comenté que él iba a cenar, y por aún más suerte había dejado mi mamá comida árabe para cenar.

Me bañé, me afeité, me puse crema, me cepillé, me peiné, me maquillé, me vestí, arreglé la mesa, no se de cocina pero a él le encanta el helado con fresa y piqué unas fresas para su gusto, acomodé las fresas, arreglé mi cuarto para no dejar y sólo faltaba que estuviese él afuera para ponerme perfume.

Y me senté a esperar