La Excepción┃Sasuke x Giyuu

5.

Fue sin pensar─

Ante estas palabras Sasuke soltó su agarre en la cintura del contrario y solo lo tomó de su otra mano apoyada en la pared.

Sonrió con burla, le divertía fastidiar al pelinegro, aunque la verdad simplemente lo hacía para ver las reacciones del mayor, pues estás de cierta manera le llegaban a parecer muy bonitas e incluso se podría decir que le gustaban.

Dirigió su mirada al rostro del contrario notando que el otro le miraba con molestia y entonces aprovechando la situación inevitablemente empezó a apoyar su cabeza en el hombro del mayor relajándose en el acto.

Ante esta acción el pelinegro se tensó debido al brusco acercamiento del otro e intentó alejarlo sin éxito alguno en el proceso ya que el azabache parecía no querer alejarse de él

Quedémonos así por un rato.─

El Tomioka suspiró resignado y como no podía zafarse del agarre que tenía el menor sobre él solo se limitó a obedecer quedándose así en esa posición por unos cuantos minutos hasta que sintió como el otro soltaba su ya adolorida muñeca por la fuerza que ejercía este en ella, sólo entonces limitándose a mantener su cabeza sumergida en su hombro.

Estoy exhausto─Escuchó que le admitió con voz adormilada el de ojos ónix, podía suponer por su tono que tal vez se estaba empezando a dormir.

Yo...igual─le contestó con sinceridad dejando salir un pequeño suspiro de agotamiento, después de todo él no solía poder conciliar el sueño por las noches y solía mantenerse somnoliento la mayoría del tiempo en sus misiones. Esto era algo que algunos de sus compañeros pilares notaban al tener al menos una misión con el pilar pelinegro.

Duerme conmigo─Murmuró bajito, casi un susurró inaudible.

abrió un poco los ojos levemente desconcertado y volvió su vista hacía el contrario, ¿acababa de escuchar bien?¿Ya le estaba afectando el insomnio?

¿Qu─

Al instante sus palabras fueron interrumpidas por el azabache que le tapó con su mano su boca impidiendo que continuará hablando. Al notar esto frunció el ceño ¿Qué se creía haciéndole eso a él?

Me duele la cabeza─

le expresó el menor asomando su rostro entre su hombro para mirarle.

Los ojos oscuros como la noche encontrándose con su mirada azulina notando en el acto que el menor se veía en muy mal estado, sus ojos expresando tristeza desbordante, obligándolo a calmarse y pasar por alto lo sucedido.

Después de unos segundos relativamente lentos, entonces, como si una luz se encendiera en medio de la nada entendió el porque después de tantos minutos el otro no deseaba separarse de él, era tal vez posible que este estuviera a punto de enfermarse o que al menos este le había intentado ocultar su estado de debilidad para que no lo notará, aunque no entendía el porque le quería esconder algo tan corriente como eso.

Sin embargo tuvo que dejar sus pensamientos para más tarde pues el azabache se pegaba cada vez más a él buscando de su calor corporal, probablemente porqué sentía frío.

Sin perder ni un minuto más acercó su mano a su frente y le comenzó a tomar la temperatura notando al momento que se estaba ardiendo en fiebre, comprobando así su teoría, por lo que en un descuido del otro se soltó con esfuerzo de los brazos contrarios y salió de la habitación dirigiéndose a la cocina del establecimiento en donde buscó un pequeño pañuelo y lo humedeció con agua que le servirían para tratar la fiebre y un poco el dolor de cabeza.

Después buscó entre los alimentos un medicamento, el cual era una pequeña cápsula que le había dado Shinobu para cuando estuviera enfermo y ella no pudiera estar para auxiliarle, aunque él aún no la había probado.

Ya teniendo esto se marchó de vuelta a la habitación viendo que ahora Sasuke se había recostado en una pared del cuarto.

Tomioka...?─Le dijo desde la pequeña esquina en el suelo al notar de nuevo su antes ausente presencia ahí.

Él no menciona palabra alguna y solo se asentó justo al lado del otro empezando a ponerle con lentitud el lienzo en su frente pero notando que el parche en el ojo izquierdo del otro le fastidiaba por lo que con calma se lo quitó dejando expuesto aquel ojo color púrpura que reaccionó al instante pestañeando, aún recordaba haber visto eso en su primer encuentro, aunque más le sorprendió que el azabache no se había negado a mostrar su ojo y solo le miraba con serenidad mientras se fijaba en cada uno de sus movimientos. Ante esto por alguna extraña razón empezó a sentirse un poco nervioso y alegre de que el de ojos ónix tuviera su mirada clavada en él, como si lo admirará.

Desvió su visión del menor y vió aquel vaso con agua y la pastilla recordando que se la tenía que dar de tomar, por lo que tomó el vaso en una de sus manos y en la otra la pequeña píldora entregándose así a el azabache quién un poco dudoso se la tomó debido a que en su vida nunca había visto un medicamento igual o parecido a ese.

Deberías descansar, te ayudará ─le mencionó a la vez que se recostaba a un lado del contrario.

Duerme conmigo─volvió su mirada a Sasuke notando que este le sonreía suavemente mientras esperaba su respuesta.

Suspiró, deseaba negarse pero podría jurar que se podría desmayar justo ahí por el cansancio severo que sentía así que con torpeza se levantó y le estiró una de sus manos al otro para que se levantará también, lamentablemente cuando Sasuke tomó su mano lo jaloneó hacía él provocando que el pelinegro cayera encima del azabache

Tsk─rechistó un poco adolorido, suponiendo que el menor había planeado eso desde un principio.

Alzó su mirada notando que el otro le veía burlón.

¿Feliz?─Le preguntó arqueando una ceja con un notable sarcasmo presente en su tono.

Aún no─le mencionó divertido el de ojos ónix con una sonrisa levemente torcida.

Sin previo aviso junto sus labios con los del pelinegro.

Giyuu parpadeó unos segundos, podía sentir el suave tacto de los cálidos labios contrarios en él contactando con dulzura, su corazón comenzando a latir presuroso ante el toque de sus bocas no deseando que el momento terminará jamás por lo que con inexperiencia notable intentó corresponderle al otro, el cual al notar su ventaja en la situación se emocionó.

Pasaron varios segundos en los que pudieron continuar con el beso hasta que ya no podían respirar y se separaron por falta de aire dejándolos así unidos por un pequeño hilo de saliva.

Ninguno decía palabra alguna pero no era como si las necesitarán en ese instante pues ambos sabían que anhelaban continuar con más, lamentablemente para ambos, los dos estaban muy cansados, por lo que Sasuke al notar que el otro cerraba los ojos con tranquilidad lo recostó encima suya asi abrazándolo y entonces él se dedicó a apreciar las bonitas facciones del pilar, era muy bonito a su perspectiva. Desde la primera vez que lo vió no pudo negar que había algo en él que le atraía, provocando que comenzará a desear encontrarselo por segunda vez hasta que lo vió en aquella reunión de los pilares. Una leve sonrisa se formó mientras poco a poco el sueño lo invadía.

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Se supone que iba a publicar esto anoche pero al final me terminé durmiendo mientras terminaba este capitulo :v.