Doctor

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— ¡¿Cómo puedes ser tan estúpido como para no diferenciar entre tus pensamientos y tus palabras?! — Gritó Nami en plena calle, tras escuchar lo que había pasado entre su amigo y don mierda hacía unos días — ¡Prácticamente diste el culo! — intentó regular su respiración — ¿Por qué no nos dijiste antes?

— Bueno, ya les dije que me dijo que si me volvía a escuchar hablar de él pues... ajá — dijo Luffy sonrojándose.

No sabía dónde guardarse, probablemente no debió contarle eso a sus amigos, Zoro y Sanji se estaban partiendo el culo de risa, Tony y Usopp estaban rezando por no ser despedidos, Nami estaba alterada y Robin estaba intentando calmar a la muchacha.

— ¡Bueno! — Habló Sanji intentando detener su risa — Ahora podrás intentar ir más lejos con él, solo tienes que decir su nombre para que te grite y termines follando en su consultori— No pudo terminar la frase, otra vez se estaba riendo a más no poder.

— ¡Ya dejen de burlarse de mí! — chilló — ¡Fue un accidente, joder!, ahora no puedo mirarlo a la cara.

— Si le das el culo, no tendrás que verlo a la cara — Se burló Zoro.

— ¡Ya!, ¡Son hijos de puta!

Luffy se estaba irritando, solo le daban problemas cuando él necesitaba una solución, malditos amigos que tenía, ahora realmente necesitaba los aburridos consejos de Sabo y Ace, pero prefería morirse antes que decirles que le había dicho a su jefe que era una bendición ser follado por él.

El resto de la salida constó de burlas hacia el pelinegro por su gran actuación del día pasado, no es que fueran malos amigos, es que realmente ¿cómo coño lo ayudaban? Lo hecho, hecho está, lo más que podía hacer era evitar el tema lo mejor posible y aprender a cerrar la boca.

— Oye Luffy — habló Tony — ¿Realmente ves como un premio acostarte con el doctor Trafalgar? — Le miró intrigado — Pareces más asustado que nada.

— Tony, claro que me gustaría, pero... — ¿Cómo podría decirlo? — Yo... E-en realidad soy virgen y no sabría cómo reaccionar a esa situación —

— ¡¿Qué coño?! — gritaron todos al mismo tiempo.

— Bueno, nunca dije lo contrario — Se excusó.

— Pero te ves todo menos santo, realmente me sorprendiste esta vez — Usopp se unió a la conversación. — Así que, ¿el doctor será el que pondrá su semillita en tu jardín por primera vez?

— Joder, si lo dices así haces que me de asco — Nami sentía que iba a vomitar debido a esa estúpida explicación.

— Entrando en confianza, me gustaría añadir que tampoco he besado a alguien mi corta vida. — Si no fuera porque todos estaban bien sentados, todos se habrían caído de culo tras tal confesión.

— ¿Y cómo coño piensas conquistar a Law si no sabes ni dar un pico? — Zoro arrugó las cejas.

— Una relación no se trata solo de coito, amor. — Le respondió Sanji — Tal vez con la carita de menso que se trae y su extraña forma de ser lo conquiste — Le dio una sonrisa, para eso mejor que no le echara porras — Luffy es lindo, y ahora por lo visto, también inocente, algo seguro que le ve.

— Bueno, ya, mejor no me ayudes mucho — Luffy bufó, era cierto que no sabía mucho de las relaciones, ni sexuales ni románticas, tampoco era muy listo, ni muy guapo, ni muy eficiente... ¡Pero tenía un gran corazón! — Es verdad que quiero algo con él, pero no quería que empiece así, y-yo quería algo más romántico, tal vez salir del hospital mientras llueve, con la mejor plática del mundo, que al mismo tiempo que nuestras ropas se mojan empecemos a profundizar más la conversación hasta que la tensión sea tan grande y nos demos un beso, mi primer beso, bajo la lluvia-

— Mejor no hables, Luffy, deja de basar tu vida romántica en una película adolescente estadounidense, te ves ridículo.

Todos los presentes miraban a Luffy con cierta burla, está bien ser inocente pero eso sobrepasa los límites no escritos de lo ridículo, pero aún así, les parecía adorable, definitivamente ese niño tenía mucho encanto natural.

Siguieron pasando las horas hasta que todos tuvieron que regresar a sus casas, mañana tenían que estar a primera hora en el hospital intentando sobrevivir a sus responsabilidades y a las tonterías que hiciera algún otro.

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6:50 a.m, ¿era este un sueño?, ¿Luffy realmente había llegado temprano al trabajo?, ¿acaso iba a llover?, la verdad es que solo había visto mal la hora y pensaba que ya eran las 7:50 y que le esperaba el grito de su vida, pero para su suerte, no era así.

Law ya se encontraba en su consultorio cuando vio al menor entrar, ¿pues qué hora era?, esto era un milagro.

— Buenos días, doctor — La voz del pelinegro lo sacó de sus pensamientos.

— Buenos días, Luffy-ya, ¿a qué se debe la visita? — Claro que se estaba burlando de él.

— Veo que se encuentra de buen humor — No estaba para bromas.

— ¿Por qué has llegado tan temprano?

— Por nada en especial, solo vi mal la hora, un descuido — Estaba intentando evadir la plática con su jefe — Si no me necesita por el momento, saldré a buscar algo para comer, con permiso — estaba a punto de salir cuando Law lo jaló hacia él, ¿qué había hecho?

— Ahora sí que te necesito — Lo soltó suavemente y le dio una tanda de papeles — Son las citas de hoy.

— Eso, ya lo sé, ¿Por qué me las da?

— Bueno, hoy te toca a ti tomar mi lugar.

— ¿Qué mierd-?

— Verás, estás por cumplir un mes aquí, si no es que ya lo hiciste y solo has estado como mi ayudante, anotando próximas consultas y haciendo el recetario para los pacientes, pero ahora, necesito que pongas en práctica tus conocimientos.

Luffy no sabía cómo reaccionar, ayer estaba tan tranquilo y ahora tendría que demostrarle a ese ser de oscuridad sus pocas habilidades médicas, ¡había olvidado casi todo lo aprendido en el internado!, estaba jodido.

— Doctor, no me mal interprete, pero no creo que pueda cumplir con las consultas, no me siento capacitado para hacerlo solo. — Se excusó

— Oh, tienes que poder, sino, tendré que solicitar tu despido, de todos modos, no estarás solo, voy a estar monitoreando todo lo que haces a la hora de la consulta y cómo lo haces, cualquier duda que surja, estaré ahí.

¿Alguno de sus amigos había hecho un ritual satánico en la noche? Don amargado se encontraba muy accesible este día, ¿hoy habrá luna llena?, mucho pensamiento, a decir verdad eso le agradaba, fuera del ámbito personal, Torao era un muy buen médico y realmente quería aprender algo sobre su forma de trabajo.

— Entonces pasaremos mucho tiempo juntos, ¿no? — Preguntó intentando esconder su entusiasmo.

— Algo, espero que el internado te haya hecho resistente a las largas horas de trabajo y presión continua, no quiero que en estas dos semanas contraigas estrés postraumático. — Le dio una sonrisa al pequeño.

— Hoy está muy accesible doctor, no es por nada pero me gustaría que el tiempo que pasemos juntos se mantenga así, es más fácil trabajar así. — probablemente fue imprudente el comentario, sí — Lo siento, no quise decir e-

— Si no me sacas de mis casillas con tus tonterías puedo prometer que estaré así el tiempo que pasemos aquí.

Realmente estaba muy extraño todo, ¿qué mosco le picó a Law? Porque quería encontrarlo y hacer que lo mantenga así por el resto de la vida, era mucho más lindo estando así, Luffy había olvidado lo ocurrido hace unos días y lo incómodo que se había sentido al inicio del día por lo mismo del mal rato que pasó al no conectar su cerebro con su boca.
Algo había pasado con su jefe y realmente no quería molestarse en saber que era, simplemente lo prefería así.

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Holaaaa, es un capítulo muy mal escrito, pero si no lo hacía así, tendríamos 100 partes y nunca comenzaría el romance 😢😢😢

En el próximo veremos lo que hizo que Law cambiara tanto su actitud de un día a otro 😚😚