Hacia calor, yo daba vueltas por el colegio, cuando pasando por la cancha donde jugaban básquet casi me llegaba una pelota cerca de la cara así que la mande de vuelta a la cancha y seguí caminando sin importarme a donde se dirigía, aunque algo me dijo que me fijara donde caería, allí me di cuenta que casi te llegaría a ti, aquello me puso nerviosa, tanto que recuerdo que pare de andar debajo del aro de encestas y mi compañera me tuvo que sacar para que no me cayeran pelotazos pero yo no podía dejar de mirar a tu dirección por nervios a que te callera, en eso tu amigo te había corrido y logro evitar que te llegase, aquello me tranquilizo bastante así que seguí caminando sin importancia, ese día no había podido ver mas que tú espalda así que no pude saber quien eras o como eras; luego días después de aquello escuche una risa que me gusto inmediatamente, no era una risa sutil a decir verdad, pero era una que extrañamente me lleno de alegría...busque tu sonrisa por la cancha durante días, quería saber de quién era, hasta que un día te vi, vi tu sonrisa y me pareció hermosa luego cuando escuche el sonido de tu risa me había encantado aún mas, fueron ambas cosas tan hermosas y llamativas que me maravillaron enseguida; desde ese día no pude evitar notarte en todos lados, era algo así como involuntario pero me gustaba que así fuese.
Así lo era...