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El enterarme que una persona de la cual estaba enamorado, se había burlado de mis sentimientos, que se había reído de mi a mis espaldas de como lo trataba, sabiendo lo mucho que me costo abrirme emocionalmente con él y demostrarle mi cariño para que el supiera que yo de verdad lo amaba.

Todo esto dolía, y de verdad sentia que la culpa era mia por confiarle tanto, y nisiquiera se acercó a disculparse conmigo, o por lo menos hablar sobre el tema, sentía que me estaba evitando y no queria afrontar los problemas.

O eso pensaba.

...

Llegué a la cafetería y visualice en donde se podrían encontrar mis amigos, por un lado vi una mesa donde se encontraban Agustín, Juani y Fran, por lo que decidí saludarlos de lejos ya que también encontré la mesa donde estaban Blas, Esteban y Felipe. Ellos estaban haciendo señas para que vaya a sentarme con ellos, y fue lo que hice.

Los saludé y me sente con ellos, estaban riendo y pasándola bien, por lo que se me hizo extraño.

— ¿Y los chicos?¿por qué no estamos con ellos?— Pregunté acomodándome en mi lugar mientras bebía un sorbo de mi café.

— ¿Con esos doble cara? Ni en pedo me acerco a ellos de nuevo.— Dijo Otaño de una manera burlona.— ¿No viste lo que dijeron? Que yo era malisimo para jugar futbol y era muy engreido.

— Y que yo era malisimo para las fotos y tenia cara de maricon.— Añadió Blas a la conversación mientras tiraba un poco de la piel de su ojo en forma de señal hacia Enzo.— Cuidado con esos pibes, no vaya a ser que también se la agarren con vos.

— Hey chicos calmense, no hace falta que digan todas esas cosas.— Hablo el rubio intentando calmar aquel ambiente y que Enzo no se ponga triste con aquellos comentarios.

— No Kuku, no pasa nada... pero ¿no intentaron hablar las cosas?

— ¿Vos crees que no lo intentamos boludo? Yo quise ir y conversar bien con Juani y me dijo que no me haga el buenito porqué sé lo que hice.— Respondí Otaño quejándose, recordando aquella situación tan extraña para él.

Suspire y mire hacia la mesa donde estaban sus amigos, que donde por supuesto ya había llegado Matías con ellos, lo cual hizo que comenzara a dolerme el pecho, todos los mensajes de él volvían a mi cabeza.

Decidimos dejar el tema de lado y comenzar a hablar de otras cosas, comenzando a reírnos de chistes y otras cosas en general, todo estaba distrayendome un poco. Después de todo, ya creía que debía rendirme con aquel chico, él ya tenia novia, y seguramente ahora nisiquiera debe querer verme a los ojos.

Pero, por alguna razón mi cabeza pedia a gritos hablarle y pedirle un abrazo, una parte de mi mente decía que él no era así, que Matías nunca dijo eso.

Mi mente pensaba que él seguía siendo una buena persona.

...

Malena y Matías estaban en la plaza, sentados en un pequeño banco que estaba debajo de un arbol

— Male, posta me hace mal no poder hablarle a Enzo.— Dijo el más chico, sintiendo como su corazón dolía, sintiendo muchísimas ganas de llorar, pero simplemente no podia, no enfrente de Malena.

— Ay mi vida, vos tenes que estar tranquilo, ya esta, él mismo decidió creerle a algo que es mentira, vos sabes lo que dijiste y lo que no.— La mujer acariciaba la espalda de su "pareja" en forma de consuelo. Sanchez sabia muy bien todo lo que había pasado, y por Matías, quien horas atrás después de aquella pelea entre Caruso y Otaño, había llegado llorando al hogar de la chica

Trato de simular estar sorprendida de la situación y ayudar a su novio en todo esto. ¿Qué si sabía que esto pasaría? Por supuesto que si, pues ella había planeado todo desde que se entero que su querido Recalt gustaba de Enzo y viceversa.

Ella no queria que estuvieran juntos, la idea de ver a Matías con otra persona hacía que se le hirviera la sangre y más si de Enzo se trataba, pues digamos que Malena no tuvo una buena impresión cuando lo conoció, ya que fue la primera entero de su amor hacia el menor.

— Malena, nada de esto esta bien, Enzo es mi amigo, yo jamás me burle de él, se suponía que hablaríamos todo, que habia confianza.— Dijo tapando su cara con sus manos mientras las deslizaba por la misma dejandolas caer y que se tomaran entre si.— ¿Qué voy a hacer ahora?

— Ay Matías, deja de comerte la cabeza por todo esto, ya paso, aca te debes de dar cuenta quienes son tus verdaderos amigos y quienes no, además me tenes a mi.— La mujer se acerco más y lo abrazo, haciendo que la cabeza cayera en su hombro, logrando acariciar su cabello.—

Recalt suspiro y cerro sus ojos sintiendo aquellas caricias que le brindaba la contraria. Tenia unas inmesas ganas de hacerce bolita y llorar solo, no entendía porqué todo esto le pasaba a él.

Le dolía tener que fingir estar en una relación con alguien que no ama, porque si, Malena lo estaba obligando a él a estar juntos, tenia que amarla a la fuerza solo por sus caprichos y que sus sentimientos salieran a la luz.

"Que nisiquiera se te pase por la cabeza terminarme, porqué puede irte demasiado mal Matías, pude arruinarte la vida una vez, lo puedo volver a hacer."

Todo eso pasaba por su cabeza una y otra, y otra, y otra vez, no para de pensar en eso y en lo que podría hacer esa mujer con tal de que Recalt se quedara sin amigos y sin alguien a quien amar, tenía miedo, ya había perdido a la mitad de su grupo de amigos, pero sobre todo había perdido a la persona que de verdad amaba.

A la que menos queria perder.

Enzo.














...









YA ESTÁN TENIENDO EL CONTEXTO

Ahora les toca sacar más conclusiones hasta próximos capítulos.

Recuerden dejar una estrellita si les va gustando, que todo es ficción y si no te gusta el contenido, evitar malos comentarios.

- MtsRecalt 🧉

Rumor | MatienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora