Capítulo 6

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29 de junio del 2009.

Emma

Hoy iba con los gemelos, mi padre e Ingrid a un parque de atracciones. Yo tenía pensado ir con los cocodrilos, pero da igual, me parecía un plan genial ir con ellos.

El viaje en coche fue genial pero terrible a la vez, al principio estábamos todos escuchando música y hablando de cosas triviales mientras los mellizos jugaban o dormían, pero cuando íbamos a la mitad del camino Isaak se puso a vomitar, lo que desencadeno el vómito de Giselle y para colmo, me vomitaron en las piernas, por lo que tuvimos que hacer una parada en un bar de carretera. Ingrid no paraba de disculparse, a lo que ya le había dicho que no pasaba nada. Por otro lado, mi padre se reía de mi. Por suerte no pasó nada más hasta que llegamos.
El día fue genial, nos montamos en miles de atracciones y comimos en un restaurante con temática de piratas. Mi atracción favorita sin duda fue la montaña rusa "Big Bang". Después, por la tarde fuimos a comprar helados para merendar. Cuando volvimos a casa fuimos a cenar a un restaurante de la ciudad y cuando volvimos a casa fui directa a la habitación ya que estaba muy cansada, pero no sin antes hablar con Ingrid otra vez sobre Olli, como no. Cuando llegué a mí cuarto cogí el pijama para ducharme y después llamé a María.

Emma

30 de junio del 2009


La mañana siguiente desperté con una mezcla de emociones. Por un lado, la emoción de haber pasado un día increíble con mi familia en el parque de atracciones, y por otro lado, la inquietud por la misteriosa conversación que Olli había pospuesto.

Decidí no darle demasiadas vueltas al asunto mientras me preparaba para el día. Después de desayunar y asegurarme de que mi habitación estaba en orden, bajé al comedor para ver si Ingrid necesitaba ayuda con algo. Para mi sorpresa, me encontré con ella ya lista, sosteniendo una taza de café y mirando por la ventana con una expresión pensativa.

—Buenos días, Ingrid —dije mientras me acercaba a ella.

—Buenos días, Emma —respondió con una sonrisa cálida—. ¿Dormiste bien?

—Sí, muy bien. ¿Y tú?

—También, gracias. Estaba pensando en lo mucho que has cambiado desde que llegaste. Te has adaptado muy bien.

Asentí, sintiéndome agradecida por su comprensión y apoyo. Después de unos momentos de silencio, Ingrid sugirió que saliera a dar un paseo para despejarme. Acepté la sugerencia y decidí ir al parque cercano para disfrutar del aire fresco y ordenar mis pensamientos.

Mientras caminaba por el parque, recordé la conversación que había tenido con Ingrid la noche anterior sobre mis sentimientos hacia Olli. Sentí una mezcla de emoción y nerviosismo al pensar en lo que él podría querer decirme más tarde.








A las 17:30, me dirigí a la plaza al lado de Sussie's, como habíamos acordado. El lugar tenía un encanto nostálgico, con su pequeña cafetería y mesas al aire libre. No tardé mucho en ver a Olli, quien ya estaba allí esperándome, con una expresión seria pero cálida.

—Hola, Olli —dije con una sonrisa mientras me acercaba.

—Hola, Em —respondió él, devolviéndome la sonrisa. Hubo un momento de silencio antes de que me hiciera un gesto para sentarnos en un banco —. Hay algo que quiero hablar contigo.

Sentí cómo mi corazón se aceleraba un poco, pero traté de mantener la calma.

—Claro, dime —respondí, intentando parecer relajada.

El chico del gorro (Olli y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora