Pago justo

437 41 27
                                    

Policía x ladrón

Narración tercera persona: Omnisciente

Joaquín es policia,  siempre cumple con su deber, y a cualquier injusticia no para hasta tomar su objetivo, habían atrapado a un ladrón, se dirige a la sala de interrogación con un compañero de el

Xxx: Bien, Emilio Marcos ¿si sabe porque estas aquí?

Emilio: Bueno, pues por algo bueno no creo

Joaquín: ¿Este es tu amigo? ¿No?

Emilio: Ex amigo

Xxx: Se te a visto con el

Emilio: ¿Hace cuanto? Digo porque ya tengo mucho que no lo veo

Xxx: ¿Y porqué salieron mal?

Emilio: Me bajo a mi novio, oiga, tal vez pueda  salir libre si lo ayudo a darle información que necesiten

Joaquín: ¿En serio nos ayudarías?

Emilio: Claro, a parte porque quiero que ese perro me las pague de alguna manera, porque si lo encierran lo salvan de que yo pueda matarlo por lo que me hizo

Xxx: ¿Porqué deberíamos confiar en ti?

Emilio: Ohh Poli que ofensa, yo lo hago de buena fe, puedo darle información de cualquier wey que rodee a Rolando y también de el

Xxx: ¿Es un truco?  - Emilio rueda los ojos -

Emilio: ¿Quiere la ayuda o neh?

Joaquín: Está bien, acepto tu ayuda

Xxx: ¿Es en serio?

Joaquín: Si es la única manera de atrapar al tal Rolando si

Emilio: Ahhh, este lindo Poli si sabe que hacer

Xxx: Bien, ¿Y que información puedes darnos?

Emilio: Rolando se dedica hacer carreras de autos clandestinas ilegales, y a parte vende drogas, también tiene una guarida y ahí se hacen peleas de perros bueno eso eh escuchado

Joaquín: ¿Y sabes donde podemos encontrar su guarida?

Emilio: No, pero puedo ayudarles averiguar un poco, lo odio pero puedo fingir que lo perdoné

Xxx: ¿Seguro que no es un plan de ambos para acabar con nosotros?  - Emilio suspira frustrado  -

Emilio: Okey  es suficiente, no me agradas, y si sigues fregando mando a la fregada todo ¿No se porque estoy perdiendo el tiempo dando información? Y empiezas con tus mamadas, mejor encierrame y ya dejo de perder mi tiempo

Joaquín: No, no, esta bien yo aceptó el plan

Emilio: Realmente me agradas precioso   - Joaquín frunce una ceja  - tu si sabes hacer negocios

Joaquín: Si es la única manera de que nos ayudes, no pisas la cárcel

Emilio: Trato hecho, precioso me agradas   - mira al compañero de Joaquín   - aprende ¿no?































































































Joaquín llego de su trabajo, se quito el saco que tenia se quita las botas y se tira a la cama, había tenido un largo día pues había terminado un caso que le toco hace unos días y tuvo que esperar la condena para esa persona, cierra los ojos por un momento

Lujuria desenfrenada 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora