Wrong Age [1964]

𝐈𝐈𝐈

Soojin despertó con una repetición de su nombre en los labios de Chanwoo.

—Llegamos, amor.

Abrió sus ojos con pesadez y encontró el rostro de su novio dejando un beso suave en su mejilla.

—Buenos días, Chan.— la chica espetó con los ojos entrecerrados a causa de su falta de sueño por la escena qué presenció, aunque no debía verlo lo vió, cuándo esta escena llegó a su mente sus ojos se abrieron de par en par y Chanwoo la miro extrañado.

—¿Amor? ¿Estás bien? —La chica se ruborizó rápidamente al ver a las chicas, Chanwoo pensó qué estaba observando a otro chico y eso la hizo sonrojarse, siguió la mirada de Soojin y sólo encontró a dos chicas riendo mientras salían del avion, la más alta usaba un traje qué consistía de pantalón café ajustado a su cintura pero algo holgado en sus piernas, una camisa color amarillo claro, algo holgada pero adaptándose perfectamente a su silueta, con mechones de su lacio cabello negro cayendo a los costados de su cara y el resto sostenido en una cola alta, la más baja por poca distancia vestía un vestido de cuadros rosado claro, con una falda algo esponjada y botones en la parte superior acompañado de un cuello polo qué le daba el toque perfecto, cada una llevaba su maleta en la mano y por un momento Soojin sintió paz al ver sus sonrisas.

—¿Soo?, ya es hora de bajar —la mencionada asintió y salió del avión acompañada por Chanwoo.

Aún estaba algo perdida por lo qué había visto, perdida en sus propios pensamientos, ¿Por qué no dijo nada? Eran dos chicas, no podrían ser una pareja, eso no se podía y estaba mal, pero algo en su interior sólo le hacía sentir qué no podía estar del todo mal amar a alguien si se veían tan felices juntas.

Y eso era, sus sonrisas y sus miradas eran lo qué le hacían pensar a Soojin qué no todo estaba mal, tal vez había algo qué aún no había entendido.

Una vez salieron del aeropuerto vieron a Hyori, Iseul, Minho y Juwon esperando por ellos con la última dando brincos y alzando su mano para qué Soojin la mirara, una vez que eso ocurrió una sonrisa iluminó su rostro.

Soojin por fin despertó de sus pensamientos para reunirse con su grupo de amigos, en especial con su mejor amiga.

Hyori enredó su brazo derecho con el izquierdo de Soojin y ambas se dirigieron al autobús escolar con Chanwoo y los demás caminando detrás de ellas hacia la misma dirección.

—Cuando lleguemos al hotel, ¿Quieres salir un rato a pasear?

—Claro, hay qué hacerlo una vez que lleguemos.

—¡Sí! Me gustaría hacerlo. —Ambas se sentaron en los últimos asientos del camión tal y cómo acostumbraban hacerlo desde qué eran sólo unas niñas.

Ambas disfrutaron el camino señalando lugares qué llamaban su atención o algunos otros qué se morían por visitar en la noche qué ambas salieran a pasear cómo planearon.

La cuidad era hermosa, Soojin pensaba y se preguntaba qué tanto podría conocer estos días, esperaba qué este viaje fuera un cambio, qué romantizara su relación con Chanwoo y la hiciera amarlo, pero sinceramente ahora sus planes eran conocer la cuidad, no tenía muchas ganas de llevar su vida de Seúl a París cuándo había cosas completamente diferentes y nuevas para conocer en París.

Llegaron al hotel y después de despedirse de su pequeño grupo de amigos comenzaron a buscar su habitación cómo el resto de los estudiantes.

—Tenemos la 482.— Hyori aclaró mientras ambas estaban en el elevador. —El último piso.