Vagos

1. Los chicos de tutoría.

Choi Minho de pequeño quería ser actor y salir en la televisión. Para su mala suerte terminó siendo profesor y tutor de un grupo de estudiantes adolescentes que parecían hacerle la vida imposible. Cada vez que abría la boca uno de ellos, Minho sentía que le mataban las neuronas lentamente.   

Era lo malo de trabajar en el programa de tutorías de Evermore, donde tenía que encargarse de ayudar a aquellos estudiantes que tenían problemas en sus clases normales. No habría sido tan tortuoso si al menos le hubieran avisado que tendría que hacer que esos adolescentes aprendieran algo tan básico como la ubicación de Alemania.

—Buenas tardes, chicos —habló una vez que el primer par entró al aula. —Señor Jung, llega temprano... ¿quién se murió?

—¡Minho, mi profesor favorito! —Jaehyun se acercó con una sonrisa y dejó caer la mochila en el asiento que le correspondía. —Me salté literatura clásica.

Jung Jaehyun. Su mente siempre está detrás de las faldas de las animadoras o los pantalones de los chicos del club de arte.

—Joven Suh —Minho alzó sus cejas al ver que su alumno se desplomaba en el asiento. —No me diga que el estudio lo está matando porque no le voy a creer.

—Los Lakers perdieron el juego —respondió John. —Tan cerca y a la vez tan lejos de la victoria... no puedo describirlo con palabras.

Suh John. Los rumores dicen que su padre era una estrella del basketball en la universidad y por eso su hijo está tan obsesionado con el deporte, al punto de no dormir por un partido.

—Buenas tardes —saludó Yuta.

—¿Qué obra de caridad hice yo para merecer que el señor Nakamoto me salude? —dijo Minho con obvio sarcasmo.

—Mi padre ha dicho que tengo que ser humilde y saludar a los pobres.

Nakamoto Yuta. Sus padres tienen más dinero del que Minho podría ganar en toda su vida como profesor de preparatoria. Si buscas la definición de presumido, te saldrá el nombre de este individuo.

—Hablando de pobres almas en desgracia —susurró al ver qué Jungwoo cruzaba directamente a su asiento.

—No me hablen, Taylor swift sacó un nuevo álbum y no he terminado de escucharlo. Profesor Choi, esto es una emergencia.

Kim Jungwoo. Probablemente tenía multicuentas en Twitter para defender a Taylor swift. Su exposición más preparada fue aquella donde explicó el significado de Look what you made me do. Su hermano mayor tal vez había influido en ello.

—Ya no me sorprende que los loquitos del centro lleguen tarde a la clase —Minho se levantó y comenzó a escribir en el pizarrón.

Hace días tuvo que cambiar de tinta porque al parecer el color azul era algo que Jaehyun no podía ver con claridad. A veces no sabía si lo decían en serio o si solo jugaban con su pobre corazón de pollo.

Aunque sospechaba que era la segunda.

Nunca conoció adolescentes amables.

Una vez cambiaron su agua de limón por suero de hospital. Está traumatizado con la capacidad que tienen para meterse en problemas con tan solo respirar.

—¡Me dormí! —gritó Taeyong, entrando al aula con el cabello revuelto. —¡Lo siento!

—Si, si, no grites —Minho señaló el asiento. —Ahí, suframos todos. Loquito uno arribando la nave.

Lee Taeyong. Aunque respetaba un poco a Taeyong por sus hermosos trabajos de arte, sentía que el excesivo tinte en su cabello le había quemado las neuronas.