12 | They still hate us

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Yuno llevaba unas 3-4 semanas conociendo a los chicos con los que formaría el nuevo grupo

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Yuno llevaba unas 3-4 semanas conociendo a los chicos con los que formaría el nuevo grupo.

Aunque las cosas parecían ir bien, no todo era tan fácil, especialmente para Sungchan y Shotaro.

Ambos, que no podían imaginarse la vida sin Yuno, encontraban muy difícil que ella los ignorara constantemente.

Un día, durante una práctica, Sungchan y Shotaro se acercaron a Seunghan con cara de preocupación.

"Seunghan-ah, ¿Cómo haces para que Yuno te hable? Nos ignora todo el tiempo", dijo Sungchan con un suspiro.

Seunghan se rascó la cabeza, tratando de no reírse. "Es simple, chicos. Solo tienen que ser más... ¿Cómo decirlo? Menos intensos."

"¡¿Menos intensos?!" exclamaron Sungchan y Shotaro al unísono. "¡Somos sus mejores amigos!"

En ese momento, Yuno pasó al lado de ellos, sosteniendo una botella de agua. Al ver a Sungchan y Shotaro, suspiró dramáticamente. "¿Otra vez con esto?"

"¡Yunoooo! ¿Por qué nos ignoras?" preguntó Shotaro, poniendo su mejor cara de cachorrito triste.

Yuno se detuvo y los miró. "Porque, chicos, están siendo unos pesados."

Sungchan puso cara de ofendido. "¿Pesados? ¿Nosotros? ¡Si solo queremos pasar tiempo contigo!"

"Sí, sí, lo que digas", dijo Yuno con una sonrisa burlona.


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La sala de práctica estaba llena del sonido de la música y el esfuerzo. El grupo practicaba intensamente la coreografía de su debut, que estaba a la vuelta de la esquina.

Debido a la exigencia de la coreografía, Yuno se encontraba tirada en medio de la sala, agotada. Cerró los ojos por un momento, tratando de regular su respiración entrecortada.

De repente, sintió un peso sobre ella. Al abrir los ojos, vio que Shotaro se había tirado sobre ella y la abrazaba como un niño pequeño.

"Yunoooo, estoy tan cansado", dijo Shotaro con voz melosa, sin soltarla.

Yuno frunció el ceño y trató de empujarlo, sin decir una palabra. Shotaro solo se aferró más fuerte.

"Yuno, ¿por qué no me hablas? ¿Hice algo malo?"

Yuno suspiró, aún sin dirigirle la palabra, y siguió empujándolo, pero Shotaro parecía un koala aferrado a su árbol.

"Yuno, ¿quieres un helado después de esto? Sé que te encanta el helado de matcha", siguió diciendo Shotaro, intentando ganarse su atención.

Al ver que Yuno seguía ignorándolo, Shotaro comenzó a hacer pucheros exagerados. "Yuno, si no me hablas, voy a empezar a cantar desafinado... ¡Tres, dos, uno!"

Justo cuando iba a empezar, Wonbin se acercó y le dio un ligero golpecito en la cabeza. "Deja de molestar a Yuno Noona. Está agotada."


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Después de una intensa sesión de práctica, el grupo finalmente se tomó un merecido descanso. Yuno estaba sentada en el suelo, junto a Anton, quien descansaba la cabeza en su regazo. Ella le acariciaba el cabello suavemente, mientras Anton cerraba los ojos, disfrutando de las caricias de su Noona.

Al otro lado de la sala, Shotaro y Sungchan estaban sentados en el sofá, con los brazos cruzados y frunciendo el ceño mientras observaban la escena.

"Esto no me gusta", murmuró Shotaro, lanzando una mirada fulminante a Anton.

"Sí, ojalá Anton haga algo que moleste a Yuno y ella deje de mimarlo", añadió Sungchan, con una mueca de disgusto.

Seunghan, que estaba cerca de ellos, no pudo evitar reírse. "¿Qué pasa, chicos? ¿Celosos?"

"Nosotros, celosos? ¡Para nada!" respondió Shotaro, pero su tono de voz que lo delataba.

"Claro, claro", dijo Sohee, uniéndose a la conversación. "Es muy obvio que extrañan la atención de Yuno Noona."

"No es eso", protestó Sungchan. "Es solo que... bueno, no es justo."

Eunseok, que estaba descansando en el suelo con los ojos cerrados, abrió un ojo y dijo con voz calmada, "Deberían estar felices de que Anton reciba atención. Es el más joven, después de todo."

"Sí, pero... ¿por qué tiene que ser tanto?" se quejó Shotaro. "Mira cómo lo mima."


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Estaban en el último ensayo del día, y todos estaban agotados. La coreografía había sido exigente y estaban sudando y respirando con dificultad. En un momento de descuido, Sungchan tropezó con Wonbin, y ambos cayeron al suelo.

"¡Cuidado!" exclamó Seunghan, mientras los otros miembros se acercaban rápidamente.

Yuno se apresuró a llegar a Wonbin y se agachó a su altura, tomando sus manos con preocupación. "¿No te lastimaste, Wonbin-ssi?" le preguntó en un tono tierno.

"Oh, no, estoy bien, Noona", respondió Wonbin con una sonrisa, tratando de tranquilizarla.

Mientras tanto, Sungchan decidió aprovechar la situación para llamar la atención de Yuno. Con una expresión dramática, se llevó una mano a la frente y gimió exageradamente. "Ay, mi pierna... creo que me la rompí", dijo, mirando de reojo a Yuno para ver si ella reaccionaba.

Yuno, sin embargo, seguía concentrada en Wonbin, revisando que no tuviera ninguna lesión. "¿Seguro que estás bien? ¿No te duele nada?", insistió, ignorando completamente los lamentos de aquel chico.

Seunghan, no pudo contener la risa. "Sungchan Hyung, estás bien, ni siquiera caíste tan fuerte."

"No, no... realmente, creo que necesito ayuda", continuó Sungchan, ahora rodando un poco en el suelo para darle más dramatismo a su actuación.

Sohee, divertido, se acercó a Sungchan y le dio una palmadita en el hombro. "Vamos, Sungchan Hyung, levántate. No eres tan frágil."

Eunseok también se unió a la burla, diciendo con una sonrisa, "Sungchan, si quieres atención de Noona, deberías intentar algo menos dramático."

Finalmente, Yuno se levantó después de asegurarse de que Wonbin estaba bien. "Muy bien, Wonbin-ssi, si te sientes bien, volvamos a la práctica."

Sungchan, aún en el suelo, lanzó un último gemido dramático. "Ay, creo que necesito que alguien me lleve a la enfermería..."


g̷r̷i̷v̷s̷s̷i̷s̷

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