"Porque en medio de un mar de almas, la tuya y la mía siempre se encontrarán"
El evento que se lleva a cabo una vez al año finalmente ha llegado. El Festival "Wakai Kokoro" donde chicos y chicas de diferentes ciudades podían convivir un fin de semana en un campamento privado del bosque Fujimoto.
Izuku: ¡Estoy muy emocionado!
Ochako: ¡Yo también, Deku-kun! -ella había sido su compañera de clases durante sus años de colegiatura.
Izuku: Es bueno verte de nuevo -sonrió algo apenado- desde que te mudaste a Tokio nada ha sido igual.
Ochako: ¡Pff, disparates! Hablamos diario por sms -meditó un instante antes de decir- oye, ahora que lo pienso, tú nunca me has ido a visitar.
Izuku iba a excusarse diciendo que su trabajo como pediatra le robaba la mayor parte de su tiempo, pero el frenado abrupto del bus donde iban por poco lo manda a los asientos contrarios.
Katsuki: ¡Fíjate de dónde te agarras, Deku!
Izuku: ¡Lo siento Kacchan! -había alcanzado a sostenerse del brazo de su ¿amigo? de la infancia.
Eijiro: Pero bro, tú mismo pusiste el brazo para que no se cai...
Katsuki: ¡Cierra el pico o te callo como ayer!
Izuku no logró entender por qué Eijiro se había sonrojado, ni la risilla de la pelicafé al ver a aquel par.
Aizawa: Este será un largo fin de semana -suspiró, pues este año sería el chofer y subencargado del festival.
Al llegar fueron recibidos por Yagi, el presidente del evento.
Yagi: ¡Me complace ver a tanta juventud aquí reunida este viernes por la mañana! -hizo una pausa antes de añadir- esta vez el festival será algo distinto.
Las miradas confusas no se hicieron esperar, al igual que los murmullos sobre qué podría ser lo nuevo que aplicarían.
Aizawa: Por este año estarán divididos en tres equipos -entregó a cada muchacho una pulsera de diferente color.
Yagi: ¡Habrá retos, expediciones y un premio final para el equipo ganador! -su entusiasmo contagió a la mayoría de jóvenes.
Ochako: Deku-kun...-señaló las pulseras de ambos, estaban en equipos diferentes.
Izuku: Tranquila Ochako-san -observó las cabañas del fondo- nuestras zonas de dormir quedan cerca.
Aizawa: Adicional- mencionó- contarán con un médico.
Un joven bicolor salió detrás de los dos adultos.
-Mi nombre es Takehiko Shoto -hizo una leve reverencia hacia los recién llegados- seré su doctor durante su estadía, si necesitan algo no duden en llamar.
- ¡ Y¿cuál es tu número para llamarte, guapo?! -ese grito femenino fue secundado por otros más.
- ¡Doctor, doctor, se me está bajando la presión!
- ¡Ay, me duele el corazón!
- ¡Necesito RCP, se me corta la respiración ante tanta belleza!
Aizawa: ¡Silencio! -empezaba a perder la paciencia- ¡estamos en un festival, no en Tinder!
Izuku: ¿Cómo sabe qué es Tinder? -pensó en voz alta- ¡lo siento! -tapó su boca nervioso.
Ya era demasiado tarde, las miradas de todos estaban sobre el pelinegro, quien los amenazó con quitarles sus celulares si no se iban a sus cabañas.
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En cada una de nuestras vidas
RandomIzuku y Shoto eran conscientes que sin importar en qué vida se encontraran, el destino siempre sería cruel con ellos. "Las agujas del reloj han comenzado a moverse...el ciclo de muerte se ha activado". Una reencarnación tras otra ¿Qué tienen en com...