Look What You Made Me Do|| The glory

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Las cosas se habían puesto tensas desde ese momento ,ni sunhwa ni yeo jeong se habían atrevido a hablar sobre ello simplemente lo dejaron pasar,pero ambos habían dejado de hablar mucho solo lo necesario,el por miedo a presionarla con sus sentimientos mientras que ella solo quería escapar de la situación.

Sunhwa había pensando en regresar a seul pronto de todas formas solo estaba ahí debido a que sería más fácil ver a dongeun y ejecutar los plane,,sin embargo,no quería la situación se había complicado,tanto como la situación de myoeng-o.

Al momento de entrar a la casa,noto que yeo jeong no estaba,dejo las cosas en la mesa,subió por las escaleras hasta llegar a la que se suponía iba a ser su habitación,al girar la manija de la puerta vio su habitación completamente decorada con un yeo jeong se espaldas terminando.

—¿Todo esto lo hiciste tu?—Hablo sunhwa algo sorprendida tanto que yeo jeong se sobresalto.

—Dios mio—Se giro rapido—me has asustado,¿Hace cuánto llegaste?.

—Apenas—murmuro—Gracias por hacer esto.

Yeo jeong termino de acomodar todo y se puso enfrente de ella sonriendo levemente,mientras que ella lo miraba con una muy diminuta sonrisa.

—He traído la cena—Sunhwa hablo en un tono muy calmado—Debo compensarte esto.

Ambos bajaron a la cocina,todo se sienta familiar y raro a la vez,tanto para el como para ella pero yeo jeong no abrirá la boca para no arruinar ese pequeño progreso que habían tenido sentía que se lo debía después de todo.

—Bien y como seguimos en esto—Intento romper el ambiente—Han tenido noticias de myeong-o.

—no solo hay supociones aunque se que la policía fue a ver a mi hermana —Dijo poniéndose el mandil y arremamgandose las mangas.

—Ya veo—Suspiro el también se arremango las mangas y se acercó a ella—Dejame ayudarte.

En la pequeña cocina de su departamento compartido, sunhwa y yeo jeong estaban de pie, preparando la cena en un incómodo silencio que llenaba la habitación. El aire estaba cargado con la tensión palpable que surgió desde aquel beso inesperado unos días atrás.

Sunhwa preparaba el arroz y la carne, tratando de mantener la concentración en la cocina, mientras evitaba mirar a Marcos, quien estaba ocupado cortando vegetales en la mesa cercana. El sonido de los cuchillos golpeando la tabla de cortar llenaba el espacio entre ellos, haciendo aún más evidente la brecha emocional que se había formado desde aquel momento íntimo compartido.

Yeo jeong intentó romper el hielo,—¿Cómo estuvo tu día?—preguntó con voz tensa, tratando de aparentar normalidad.

Sunhwa se encogió ligeramente, sintiendo la incomodidad en el aire. —Bien, supongo—respondió vagamente, sin atreverse a levantar la mirada para encontrarse con la de yeo jeong.

El ambiente se volvió aún más tenso cuando sus manos se rozaron accidentalmente al alcanzar la misma jarra. Ambos retiraron rápidamente sus manos, como si se hubieran quemado, y se apartaron el uno del otro, fingiendo ocuparse más de lo necesario con la preparación del cena.

Después de unos minutos de silencio incómodo, yeo jeong rompió el hielo nuevamente, esta vez con una sonrisa forzada. —Creo que ya está listo el café—, anunció, tratando de inyectar algo de normalidad en la situación.

Sunhwa asintió con una sonrisa tensa y agradeció la distracción. Se sentaron a desayunar en la mesa, cada uno sumido en sus propios pensamientos, tratando de ignorar la complicada danza de emociones que los rodeaba. A pesar de la incomodidad, ambos sabían que tenían que aprender a convivir juntos, incluso si eso significaba actuar como si aquel beso nunca hubiera sucedido.