H O M E [ Satoru Gojo x Lectora ]

¹⁷

" ¿No me crees capaz ? A partir de ahora, no miraré ni trataré a una mujer de la forma en como lo haré contigo ".

" Pero satoru, tenemos solo tres meses de relación... "

No , sin dudar su yo del pasado no le creía ni una palabra. Solía pensar que si no le hubiese dado la oportunidad que pedía con tanta paciencia constantemente nunca llegaría hasta donde estaba con él; formando una buena relación de matrimonio, pensando a un futuro próximo poder formar una familia juntos.

Demonios, ¿Tanto le había hecho cambiar de parecer? ¿Tan ridículamente cursi y enamorada se había vuelto? Tan solo pensar el daño que había hecho en ese frío y grueso muro que había hecho para protegerse de aquel idiota no pareció funcionar, ¿Por qué? Quizás había sido su necesidad de buscar un poco de afecto para enfrentar su traición, traición que al mismo tiempo le hacía pensar que nada ni nadie valía la pena.
Satoru Gojo ablandó su corazón en poco tiempo, estuvo presente día y noche cuando el tiempo se lo permitía y solía contarle a detalle sus días sin necesidad de preguntarle, incluso le parecía excesivo y exagerado su motivación por hacerle entender que buscaba algo serio con ella.

¿Que había pasado si nunca lo hubiese aceptado? Probablemente habría sido una  persona más entre la multitud, viviendo en un profundo rencor y desconfianza hacia las personas que estaba segura viviría en la amargura y malestar.

Sus padres nunca lo hubiesen conocido, y la verdad eso sería algo de lo que realmente se hubiese arrepentido. Fue divertido contarle a su padre sobre él, finalizando su conversación con un " tranquilo, nunca me metería con un mujeriego " solo para llegar hasta donde estaba. Quizás nunca debió decirle la verdad del todo a su papá, así el día de su presentación quizás no debió haber sido incómodo con su progenitor odiandolo hasta la actualidad, aunque bien sabía poco a poco estaba ablandando por igual su corazón, de otra forma ni siquiera le dirigiría la palabra o lo dejaría entrar a su hogar.

Su madre, incluso desde el momento en que se enteró de él lo amó. Saber que un hombre atractivo de pies a cabeza y voz se había fijado en su única hija le hizo sentirse feliz y orgullosa, presumiendo entre la comunidad de conocidos y familiares que tenía.

Por su parte , para satoru si que fue un reto. Solía sentir su desconfianza en cada mirada y acción que le daba, sabía que para hacerle entender que estaba siendo serio tuvo que incluso enseñarle fotos o presentarle discretamente a sus conocidos. Presentarla como su " querida y amada pretendiente " en cada momento fue de gran ayuda por las reacciones que obtenía de ella.

Era seguro que cualquiera lo tomaría por un loco enamorado , como un " perro faldero" detrás de una mujer. Pero era cierto, lo que sentía por T/n no era más que cariño y atracción, le pareció incluso raro ya no ver a las demás como un juego , entendiendo que su anterior compromiso se había vuelto tan serio que inconscientemente había perdido su interés por las demas. Tener únicamente a la teñida como prioridad había funcionado de una forma que le aterraba al tan solo pensarlo.
Era capaz de gastar y arriesgar todo por ella, le encantaba su figura y sus expresiones, la forma en como solía comportarse que incluso le daba miedo seguirle el ritmo o ser su presa.

Conocerla a profundidad fue algo que le impresionaba y actualmente era incluso descubrir algo nuevo de ella.
Verla enojada y sentir sus golpes suaves le había hecho sentir una necesidad extraña pero placentera que fácilmente podía recompensar con cariño y amor que le hacía lamentarse y avergonzarse de sus actos.

—— es mi culpa, ¿Verdad?.

La voz claramente rota de la rubia llamó la atención de su pareja, aquel que se encontraba mirando fijamente aquella figura Femenina que poco a poco se alejaba de ambos. —— creí que sería buena idea venir a verte-...