France había decidido acompañar a su novio en su nueva gira, el le había insisitido mucho y ella no podía negarse. Además de que estaba de vacaciones de universidad. ¡Universidad! Ya habían pasado dos años de que era novia de Luke, habían tenido sus altos y bajos pero siempre encontraban una solución.
─Esto es realmente asombro─ dijo France mientras se tiraba en la cama.
─Y pensar que no querías venir─ murmuro Luke mientras se quitaba la camisa.
─Sabes por qué.
─Los chicos y las fans te adoran, cielo.
─Calum en un principio no─ murmuro ella recordando como el la había tratado.
─Solo quería protegerme pero ahora no puede vivir sin ti.
Ella dejó de escucharlo por estar embobada mirando cómo se quitaba la ropa, aun no se acostumbraba a que todo eso fuese suyo.
─Nena, ¿Me estas escuchando? ─ preguntó el con diversión.
Ella negó avergonzada, causando que el soltara una leve carcajada.
─Sé que estoy bueno pero deberías dejar de mirarme así, harás que te tenga miedo.
─No dices lo mismo cuando nos tocamos─ dijo ella alzando una ceja, algo divertida.
─Es diferente─ dijo el sonrojándose.
─ ¿Ah sí?
─Si, porque mirar y tocar no es lo mismo.
Él se acercó a la cama para poder besarla, ella sonrió mientras le devolvía el beso. Luke puso a su novia sobre el mientras sus labios bajaban a los cuellos de ella. Unas risas hicieron que se separaran.
─Niños dejen de comerse, Luke tu madre está aquí y dudo que le guste verte... así─ dijo Calum para luego reír.
Luke gruño.
─Saldremos en un momento.
Ellos asintieron aun riendo para luego salir. France acaricio el cabello de su novio mientras el posaba su cabeza en el cuello de ella.
─Mas tardé no te escapas de mí.
─No tengo intención de hacerlo.
Ambos rieron, mientras él se ponía la camisa y se arreglaba para que su madre no notara lo que estaba a punto de pasar.
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Los chicos tenían unos tres días libres por lo que Luke decidió invitar a France a la playa en donde hace unos años ella le había dicho toda la verdad. Esta vez el que conducía era él y su novia estaba emocionada porque hace un tiempo no iba a una.
─Conduces como tortugas, Hemmings.
El rio.
─No seas tan impaciente, la playa no se irá corriendo.
Ella revoleo los ojos, mientras comía una barra de chocolate. El frunció el ceño, no era raro verla comer chocolate sino que esa marca era la menos preferida de ella pero prefirió no preguntar. Luego de otra media hora llegaron a la playa. Esta vez había una pareja con lo que parecía ser su primer bebé, la pareja reía mientras tendían al pequeño en el suelo y gateaba para jugar.
Luke y France se sentaron en una distancia algo larga, Luke acomodo todo y volvió a fruncir el ceño cuando vio que ella miraba a aquella familia.
─ ¿Pasa algo?
─Tal vez.
─Pues dime─ murmuro él.
─No te enojes, ¿sí?
El asintió mientras se sentaba a su lado.
─Hace unas semanas me sentía algo mal, ¿lo recuerdas?
El asintió.
─ ¿Qué tiene eso que ver?
─Pues.... Mi madre me acompaño al médico.
─ ¿Aja?
─Estoy embarazada, tendremos un bebé.
Él se quedó callado, iba a ser padre.... Ella soltó un sollozo haciendo que el volviera a la realidad, el se acercó a ella mientras la abrazaba y besaba su cabello.
─Todo estará bien cariño.
─Pensé que te molestarías y lo siento. Tal vez las pastillas... no funcionarios y Dios, estoy tan sentimental.
─Oh cariño, no estoy molesto más bien sorprendido. Te amo tanto France.
─Será un hermoso bebé.
─El más hermoso de todo, ahora vamos a casa.
Ella asintió mientras el besaba su frente, y Luke supo que había elegido a la chica perfecta.
