Transtornada

03

Laiha

Debía ser una puta broma lo que acaban de escuchar mis oídos, si, pude haberme imaginado cualquier cosa, no se, que me preguntara si me gusta o algo así, ¿pero eso? No puede ser enserio. No digo que ser lesbiana sea algo malo, pero de donde mierda tomo esa conclusión. Mi expresión seguía intacta no podía creerlo aun, debía procesarlo bien.

—Laiha, ¿oye estas bien?— dijo sacudiendo mi hombro
—¿Por qué?—Mi ceño se frunció un poco
—¿Ah?— contesto confundido
—¡¿Por qué me preguntas eso idiota?!— me tire encima suyo mientras le pegaba por doquier
—Oye, oye espera. Solo era una pregunta lo siento— dijo suplicando. Deje de golpearlo y lo mire furiosa
—¿De donde sacaste esa estupida conclusión idiota?—
—Bueno. Escuche tu conversación con esa chica— dijo apenado
—¿Chica? ¿Hablas de America?— No entendía nada, ¿que pudo escuchar de esa conversación que lo hizo pensar eso?
—Exactamente, escuche que te miro el trasero en las duchas. Y luego de eso un amigo me dijo que America había salido del closet hace aproximadamente 1 año y al escuchar su conversación tal vez o solo tal vez supuse que probablemente eras, ya sabes—dijo mirando el suelo. No pude evitar reírme a carcajadas al escuchar lo que había dicho, enserio este chico me sorprende.
—Dios mío Louis eres muy ingenuo—
—Bueno, ya no te rías boba— dijo pegándome en el hombro.

Louis

Después de esa charla no pude evitar morirme de la pena todo el día a causa de esa suposición tan estupida que hice,  no siquiera podía ver a Laiha a la cara. El solo pensar en lo jodidamente inútil que me vi  preguntándole eso me estaba carcomiendo la cabeza, deseaba que me tragara la tierra.

Después de la clase de historia , Louis decidió dar un paseo por el campus para despejar su mente. Se sentó en un banco y reflexionó sobre lo sucedido. Se dio cuenta de que, a pesar de la vergüenza. Le había sacado una sonrisa a Laiha. 
Después de unos días el incidente vergonzoso se convirtió en una anécdota que ambos recordaban con humor, Laiha solía molestarlo diciendo aquellas palabras que dijo aquel día bajo el árbol y por supuesto que Louis se seguía poniendo rojo de la vergüenza pero ahora se reía junto a ella.

—Oye, ¿qué tal si vamos por un helado al salir de la escuela?— dije mientras jugaba el el pelo de Laiha
—Me parece bien, pero tú pagas—Ver su sonrisa era lo mejor que podía ver en el universo.
—Está bien boba— le di un golpecito en la cabeza y ambos nos fuimos a la clase.

La clase de geografía estuvo aburrida, mi mirada y atención solo se centraban en algo, o más bien en alguien, Laiha mi hermosa Laiha. La quiero solo para mi, se que suena tóxico pero para mi Laiha es como un tesoro maldito, es intocable pero te genera una adiccion de tenerlo.
El ver sus manos tan delicadas hacer movimientos circulares en el aire con su lápiz la hacía ver sexy y más cuando lo llevaba a su boca. Estaba tan concentrado en verla que no me percaté cuando ella volteo a verme, rápidamente giré mi cabeza evitando el contacto visual, mierda soy un idiota.

Laiha

Louis había estado raro estos últimos días o más bien semanas, se comportaba diferente usualmente el no era del tipo de personas que es muy apegado a una persona, pero por alguna razón lo estaba siendo conmigo, no se me despegaba y lo que más me causaba una duda era el por que se enojaba cuando me hablaba algún tipo que no fuera el. Las ideas de mi mente me estaban carcomiendo la cabeza, no quería hacerme ilusión de alguna relación, tal vez simplemente me estaba cuidando las de lo normal.

Mientras estábamos en clases, podía sentir una mirada penetrante que no dejaba de ponerme nerviosa, cuando decidí voltear me percaté de que se trataba de Louis pero tan pronto volteé este hizo lo mismo, dándome la espalda y dejándome como una completa tonta, todo era tan bizarro. Al finalizar las clases nos dirigimos a una heladería y como Louis lo tenía prometido el pago los helados, yo pedí uno de galleta con café y el como siempre de melón.

Caminábamos hacia mi casa, pues se quedaría a dormir por todo el fin de semana ya que sus padres estarían de viaje, por lo que mi madre dejó que se quedara, lo conocía desde hace tiempo así que no le preocupaba la idea de que Louis se quedara en nuestra casa.
Al llegar no se encontraba mi madre así se ambos entramos y nos dirigimos hacia mi habitación, estaba un poco desordenada cuando la dejé pero al parecer la habían limpiado, gracias a Dios, porque probablemente si no la hubieran limpiado hubiéramos encontrado quien sabe qué cosa por aquí.

Louis se acosto en mi cama mientras comía su helado, y yo me senté en un sillón puf que estaba ahí, pusimos unas películas para divertirnos, pero a la mitad me dormí. Estaba tan cansada que ni siquiera me di cuenta que me dormí, después de aproximadamente 2 horas desperté en el pecho de Louis, en mi cama. Mi cara se torno de un rojo intenso, el ver a Louis dormido como un bebé me causaba mucha ternura así que le tome una foto.

Louis

Estaba mirando la película junto a Laiha, cuando al voltearla ver me di cuenta que estaba dormida, así que no lo pensé más y decidí tomarla en brazos para subirla a la cama y que descansara. Cuando estaba acostado junto a ella en la cama mientras miraba mi celular, sentí sus brazos envolviéndose en mi pecho y luego verla acurrucarse en el, no pude evitar ponerme nervioso, pero enserio no podía evitarlo, tome su cabeza y le di un pequeño beso y me dispuse a dormir con ella.
Al final debía de disfrutar de este hermoso momento, Laiha cuando te darás cuenta de lo perdidamente enamorado que estoy de ti, no puedo evitar esos sentimientos tan absurdos hacia ti, eres el pecado que quiero cometer.

El pensar que probablemente llegarás a enamorarte o que estés enamorada de alguien más me causan celos, te quiero para mi, no para cualquier idiota de este mundo. Serás mía, no me importa todo lo que me cueste que por fin te des cuenta de estos sentimientos que me están carcomiendo el alma poco a poco, te amo, te amo y no puedo evitarlo.