Capítulo II

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Octubre, 2023

"-Doyoungie. -Llamó mamá conejo entrando a la sala con un tazón de sopa caliente entre sus manos. -Ven aquí bebé, come un poco de sopa. Es de apio y zanahoria como te gusta.

Las orejas de Doyoung se animaron al escuchar lo último. Durante los primeros tres meses de embarazo no había tolerado absolutamente nada de sus comidas favoritas. Los vegetales verdes estaban fuera de su lista y las zanahorias se habían convertido en su mayor enemigo. En su lugar, por primera vez había empezado a consumir carnes blandas como aves y mamíferos pequeños que Jaehyun le traía después de cazar.

Por supuesto que volver a comer sus manjares hervíboros le estaba haciendo agua la boca.

-Gracias mamá. -Murmuró Doyoung con su bella sonrisa gomosa y con el brazo apoyado en la espalda mientras caminaba a la mesa.

Su madre, por supuesto siempre tan amable, lo tomó entre sus brazos y lo ayudó a llegar hasta su asiento.

-No quiero que me lo tomes a mal, Doyoungie. -Tarareó su mamá cuando colocó una mano sobre el enorme vientre de 8 meses de su hijo. Ahí en medio del bulto, sintió a sus nietos moverse hiperactivos y molestan la tranquilidad de su madre omega. -Pero estos cachorros son muy grandes para ser conejos. Cuando los tuve a ti y a tu hermano mi pancita apenas llegaba a ser la mitad de la tuya. -Dibujó en el aire una curva invisible unos centímetros sobre su estómago. -Lo más seguro es que sean dos pumas y no dos conejos como dijo tu marido.

Una corriente recorrió la espina de Doyoung de tan solo pensarlo. Si la idea de parir era aterradora de por sí, no se imaginaba a su cuerpo acomodándose para dejar salir a dos cachorros grandes. Apenas había aguantado acoger parte de su esposo por ahí como para que ahora quieran salir dos bebés rechonchos.

-Creo que estás exagerando, mamá. -Dijo después de comer la última rodaja de zanahoria en su plato. -Cuando estabas embarazada de Myung y de mí no fue al mismo tiempo. Estoy cargando a dos niños aquí. -Frotó su vientre abultado para calmar a sus hijos que se habían animado al escuchar su voz. -No creo que sean dos cachorros de puma. Puedo apostar a que tendremos unos lindos conejitos pequeños revoloteando en casa pronto.

Su madre solo levantó una de sus cejas dudosa y suspiró mientras volvía a la cocina y traía otro tazón de sopa para su hijo menor."



Doyoung había cometido dos grandes errores.



El primero fue no haberle creído a su madre cuando le advirtió que sus cachorros no tendría su forma híbrida, sino la de su padre.

El segundo fue no haber recordado que sus hijos no eran conejos y jodidamente no cabían dentro de su madriguera.

-Vamos, Jeno, Mark, adentro. -Aplaude Doyoung en su forma humana, empujando hacia adentro a los cachorros en su forma animal.-Nadie los mandó a ser tan grandes. -Bufa cuando ve que medio cuerpo de Jeno queda atrapado en el hoyo, imposibilitando su entrada.

Sus hijos maullan en respuesta. Confundidos por lo que intenta hacer su madre sin éxito. Doyoung saca a Jeno de nuevo e intenta expandir el diámetro del agujero con sus dedos porque aunque las madrigueras pueden tener entradas estrechas hay chance de que su amplio interior albergue Jeno y Mark. Sin embargo, es casi imposible escavar con unas uñas tan finas e inútiles.

No tiene más remedio que volver a su forma animal también.

-Escuchen. -Llama la atención de los cachorros y levanta uno de sus dedos en señal de orden. -No se van a mover de aquí y van a esperar a que yo termine sin tirarse de las colas ni perseguir a las ardillas. ¿Me entendieron?

Atypical [JaeDo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora