Butterfly -COMPLETO-

Capítulo 19: Sé la Muerte De Mí

A/N: A: La película Harry Potter y el Príncipe de la Media Sangre, para mí, fue muy satisfactorio! Gracias a todos los que revisaron, prefirieron o alertaron a Butterfly en el último capítulo.

Advertencia: Este capítulo es más gráfico de lo habitual. En el sentido smexy. Canciones: Sé Mi Escape por Reliente K y Tóxico por Una Canción de cuna estática

Harry observó aturdido cómo los colores no coincidentes de las paredes tenuemente iluminadas pasaban por él, los ladrillos grises opacos iluminados y luego ennegrecidos por la ausencia de luz, pasando en un borrón mientras era apoyado a lo largo del pasillo. Harry sintió que el aire fresco a su alrededor se yuxtaponía con su boca seca y ligeramente ágape, y sintió el calor, la sangre pegajosa deambula desde su cicatriz en forma de rayo como una curiosa corriente hacia su boca. Su sangre sabía a sal.

El adolescente de pelo de cuervo se preguntó si debería decirle a Ron que su cicatriz estaba sangrando, pero su chico de pelo ceris parecía demasiado ocupado. Ron estaba ansiosamente medio arrastrando, medio llevando a su mejor amigo hacia la oficina de Dumbledore. Harry decidió no informar a Ron: los misteriosos destellos erráticos de la risa maníaca de Voldemort eran lo suficientemente desorientadores como para pensar que si abría la boca, podría no ser capaz de hablar, o puede vomitar.

El cuerpo de Harry de repente voló a través de la habitación; Ron había empujado a Harry contra la pared del pasillo. Aturdido por las acciones abruptas, Harry miró la cabeza roja.

"Lo siento, amigo", dijo Ron, con los ojos parpadeando desde la pared opuesta a Harry. Harry vio a la señora Norris deslizándose más allá de ellos, y entendió. No sería un buen augurio si Filch, o peor aún, Umbridge, encontrara a un grupo de adolescentes acechando los pasillos por la noche.

Ron se movió detrás de Harry, donde Lavender y Hermione tenían las manos temblorosas de Parvati de manera tranquilizadora, y el grupo avanzó. Después de lo que parecía una eternidad, finalmente llegaron a la oficina del Director. Hermione susurró la contraseña, la gárgola se hizo a un lado, y los cinco estudiantes subieron por la escalera de caracol que conducía al profesor Dumbledore.

Dumbledore parecía no estar solo; se podían escuchar algunas voces silenciosas desde más allá de la puerta de la oficina. Ron y Hermione llamaron a la puerta al unísono.

"Profesor Dumbledore", lloró Lavender, agitado por el estado de su mejor amiga, "Es Lavender Brown, Ron Weasley, Hermione Granger, Harry Potter y Parvati Patil! Por favor, señor, es una emergencia!"

Las voces se detuvieron y la puerta se abrió. En el umbral estaba el profesor Snape, sus ojos tan oscuros como el cielo nocturno. Levantó una ceja al grupo.

"Lo que," comenzó sedosamente, "es tan importante que no podía esperar hasta-"

El maestro como un murciélago se detuvo cuando acogió a Harry Potter claramente superado y a Parvati Patil temblando severamente.

"Entra,", dijo en breve, y el grupo lo hizo. Harry se dejó llevar a una silla, pero Parvati se negó, optando por permanecer de pie junto a Lavender. Dumbledore estaba sentado detrás de su escritorio, y el profesor McGonagall estaba parado sobre él. McGonagall echó un vistazo a la cara de Harry, señaló su varita y lanzó el hechizo episkey para limpiar la sangre. La risa que sonó en la mente de Harry se había desvanecido.

"Lo que ha pasado?" preguntó a Dumbledore con urgencia, sus ojos cerúleos sin dejar rastro de un brillo.

Ron habló. "Parvati y Harry tuvieron una visión de mi padre, él estaba en...¿fue el ministerio, Harry?" El adolescente de ojos verdes asintió con la cabeza, mirando al suelo, sin ver.