«««Twitter»»»Daniel Fernández Delgado

004: i hate you [part 1]

Iris

—¿Crees que me queda bien?-me preguntó María mientras daba vueltas sobre sí misma enfundada en un vestido de 500 euros.

-Sí, pero ¿lo llevarás al concierto?-pregunté, curiosa.

-Obvio que sí-rió ella tontamente como la superficial que era.

-Pero, ¿y si no lo ven?-pregunté de nuevo-, es decir, seguro que no se van a fijar en tu vestido.

-Oh, claro que lo harán-sonrió ella maliciosamente-. He conocido a alguien por twitter que me va a ayudar.

-Ah, bueno, yo solo lo decía.

Ella siguió contemplándose al espejo de la tienda. Realmente el vestido le quedaba increíble, pero yo esperaba que ninguno de Auryn se fijara en ella y, mucho menos, que Dani si quiera la mirara.

Ojalá él sólo tuviera ojos para mí...pero, en cambio, ni siquiera sabía que yo existía.

-¿Y cómo se llama al que has conocido por twitter?-intenté sonsacarle información, no para aprovecharme yo también, sino para saber si era verdad.

-Ni idea, es un chico que um...-pensó durante un segundo-, ah, sí, vive en Madrid y va a todos los conciertos de Auryn que puede y creo que los conoce.

No podía ser mi Juan, ¿verdad?

-Ah, sí, creo que es un seguidor tuyo-sonrió ella con suficiencia-. Y, además, creo que es amigo tuyo, no sé, me preguntó si era tu mejor amiga y; por supuesto, le dije que obviamente sí.

Juan me había traicionado. Sentí como si estuviera cayendo en un gran vacío. Yo creí que era mi amigo.

Obviamente mi reacción fue desastrosa. Salí corriendo de allí con lo que podría describirse una mueca horrible.

Corrí por las calles de Ciudad Real hasta llegar al hotel al que había ido a alojarme para comprar las cosas para el concierto.

Nada más llegar a la habitación conecté el ordenador mientras lloraba. Escribí a Juan, mi supuesto "amigo" cibernético por Twitter.

Iris: Te odio.
Iris: Por qué vas a ayudar a la "popular" de mi instituto, a la que tanto odio y de la que tanto has oído hablar, a conocer a Auryn?
Iris: Creía que eras mi amigo.
Iris: Te odio.

No esperé una respuesta. Apagué el ordenador y me dediqué a llorar y a pensar en lo horrible que era mi vida. Pero no penséis en lo típico de una raya parlante. Lo mío era real. ¿Mi vida? Ojalá fuera un libro, así yo acabaría siendo feliz, por fin. Pero no, la realidad me daba de lleno en la cara.

Sonó la canción de Volver.

-¿Diga?-contesté mientras me limpiaba las lágrimas.

-¿Iris?¿Qué te ocurre?-preguntó la voz de mi amiga enferma al otro lado de la línea.

-¿Sabes el chico que conocí por Twitter del que te hablé? Bien, contactó con María y ahora... -respiré hondo-me he enterado de que la va a ayudar a que Auryn la conozca.

-¿Y cómo sabes si es verdad?-me retó ella a contestar con un pequeño grito que sonó como un gato arañando un plato. Después, ella se aclaró la garganta y bufó-. Ahg, odio este resfriado. Pero bueno, contesta a mi pregunta morena de bote.

-Lo primero, sabes perfectamente que soy castaña natural-reí-. Y lo sé porque me lo describió con todo detalle.

-Te aseguro que si mi madre me dejara salir de aquí iría ahora mismo-hace una pausa para toser, estornudar, etc-. Vale, ni aunque mi madre me dejara podría llegar hasta allí.

Reí.

-Pero yo estoy allí psicológicamente-intentó chillar. Pero se atragantó y tosió de nuevo.

-Um...de acuerdo-le dije-. Por favor, recupérate pronto Cris.

-Eso intentaré-respondió ella-. A-a-achííííís.

Después ella colgó y de nuevo me quede a solas con mis pensamientos y el sabor de la traición en la boca. Ojalá nunca hubiera conocido a Juan. Así no habría tenido esos remordimientos y ganas de llorar. Luego me di cuenta de que ya estaba llorando.