Without you.

Capítulo 4. Un día desastroso

No me podía creer que estuviese embarazada. No, no ahora. ¿Cómo mierda se lo diría a mis padres? ¿Quién coño era el padre? ¿A quién se le ocurre emborracharse de esa manera?

-Hey.-me dijo Anastasia. -¿Recuerdas que me tenías que decir lo que te pasaba?

-Sí. Pero prometeme que no se lo dirás a nadie. ¿Vale?

-Sí, sí. Cuéntamelo.

-Estoy embarazada.-dije nerviosa por cómo reaccionaría.

-¿Qué? Me alegro por ti tía. ¿Quién es el padre?

-No lo sé.

-¿Qué no lo sabes? Eres una descuidada.

-¿Y de quién fue la idea de llevarme a la fiesta y emborracharme?

-Pues perdón por hacer que te diviertas un poco.-dijo y se fue.

Esto me estaba afectando. Primero embarazo, segundo, mi mejor miga y tercero mis padres que por cierto los tenía que llamar.

-¿Mamá?

-¿Sí, cariño?

-¿Podéis venir a mi casa?

-Claro cariño, en 10 estamos en tu casa. Chao.

Colgó.

10 minutos después...

-Hola mamá, hola papá. Sentaros.

-Vale. ¿Qué querías decirnos?-dijo mi padre.

-Bueno. No os lo vais a tomar bien pero... Estoy embarazada.

-¿¡Qué?! ¡De cuánto!-gritó mi madre

-4 horas exactamente.

-¿Sábes? Con nosotros no cuentes. Eres una sucia perra. Te odiamos.-dijo mi padre y se fueron.

No me lo podría creer. Vale, que se enfadarán lo entendía, ¿pero que me llamasen sucia perra? Eso ya no. Así que mejor así. No necesitaría ayuda de mis padres.

-Hola.-dijo Anastasia. -Oye, he oído la discusión con tus padres y lo siento. Sólo quiero decirte que cuentes conmigo para lo que quieras.

-Gracias Anastasia. Eres una buena amiga.-dije secándome una lágrima.-Quiero irme a la cama a descansar. Luego nos vemos.

-Vale. Yo estaré aquí pensando.

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