Only for four months - Annaka Fourneret

Presentimientos

Desperté asustada y agitada, estabamos durmiendo una siesta, todo había sido un sueño, nosotras dos seguiamos en la casa de mis padres y Lilith estaba en el medio de nosotras.

-¿Estas bien? -Annaka me miró preocupada y me tocó el brazo-

-Si. -La miré para ver que su cara no era como la de mi sueño.-

-¿Tuviste una pesadilla? Puedes contarmela.

-Matthew estaba atrás de ti. -Annaka frunció el seño como muestra de confusión-

-Bueno, recuerda que él esta en prisión.

-Lo sé. -Ella me sonrió, pero se le notaba que seguía confundida-

-Bueno, me prepararé, en una hora nos iremos a cenar. -Yo asentí, no les miento seguía pensando en ese sueño-

Pase mis manos por mi cara en señal de frustración.

(...)

Llegamos al restaurante, yo estaba un poco callada y observaba a todas las personas del lugar.

-Me encantaría que me dijeras que te pasa.

-Nada.

-Esa fue tu respuesta hace 15 minutos cuando estabamos en el auto,  en el estacionamiento y también en la casa de tus padres.

-Lo siento. -Volví a pasar mis manos por mi cara, realmente estaba cansada de este tipo de pensamientos-

-¡Dime que te pasa! -La gente del restaurante miró a Annaka, algunos murmurando, yo agarré a Annaka del brazo e hice que se sentara-

-Tengo un mal presentimiento. -Dije en un susurro mirando con ojos de pánico a Annaka-

Ella me miró confundida, luego volvimos a casa.

-No pudimos disfrutar de nuestra última noche aquí. -Dijo ella que estaba manejando el auto con un brazo en la ventana del mismo, sin dejar de mirar la ruta y con el seño fruncido, sabía perfectamente que estaba enojada.-

-Realmente lo siento, pero estaba muy preocupada. -Apesar de que yo soy la mayor, esta vez me sentía como una niña siendo retada por alguien adulto, la diferencia es que yo veía a Annaka tan atractiva enojada, sin embargo la niña imaginaria se hubiera meado en sus pantalones por qué la estan retando.-

Ella no dijo ni una sola palabra en el trayecto a casa, y yo estaba completamente seria, sabía que arruiné esta noche, pero no podía dejar a un lado ese sentimiento de miedo.

Llegamos a la casa de mis padres, ellos dejaron un papel donde decía que saldrían con Lilith y todo el jardín de infantes.

-Bien, iré a dormir. -Al escuchar eso yo me apresuré a agarrar su brazo, no quería que se vaya a dormir enojada conmigo.-

-Ann.. -Ella me miró, Dios mío que mirada tan linda y seductora tiene cuando esta de mal humor-

-Cleo... -Suspiró y se frotó los ojos con sus dedos en señal de cansancio- ¿Que quieres?

-Perdón -La miré con una expresión que demostraba arrepentimiento-

-Dios, ya cállate. -Ella se empezó a reír y me abrazó fuertemente, yo realmente estaba confundida- desdé hoy me tienes loca con lo hermosa que eres y lo atractiva que te ves en ese vestido. -empecé a sentir mi estómago lleno de mariposas y mis mejillas arder.-

Ella empezó a darme besos, y yo se los seguía cada vez los besos eran mas intensos o desesperados, sin dejar de darnos pequeños besos caminamos hasta nuestra habitación y nos tiramos a la cama

Ella estaba arriba mío, yo miraba su lindo y perfecto rostro, empezó a bajar un poco hasta mi cuello dándome besos en esa parte, hasta que escuchamos una puerta abrirse, tuvimos suerte de que era la puerta principal y no la de nuestra habitación.

Nos separamos y fuimos a ver de quién se trataba, eran mis padres, mi hija, mi hermanastro y mis sobrinos.

-Hola, vinieron temprano -Dijo mi madre, al entrar-

-Que rapida fue su cena -Entró mí papá con Lilith en sus brazos-

-Ay mi bebé -Fui corriendo a alzar a Lilith-

-Teníamos sueño -Dijo Annaka como pudo con una sonrisa y viniendo hacía nosotras-

-Con esté frío quien no tiene sueño. -Dijo mi padre mientras se hiba a su habitación-

A los minutos todos nos fuimos a nuestras habitaciones, mis sobrinos se quedaron con mis padres a hacer pijamada con Jacob.

Mi madre entró a nuestra habitación y me tocó el hombro, yo estaba completamente dormida y me asusté al sentir que alguien me tocaba.

Dí un suspiró al ver que era mi mamá

-¿Que paso? -Pregunté-

-Necesito que vengas un ratito. -Ella salió de mi cuarto y yo la seguí un poco adormilada-

Se sentó en las sillas del comedor y esperó a que yo me sentara para hablar.

-Mira, no quiero preocuparte, pero tengo un mal presentimiento y creo que no se tienen que ir mañana.

-Ahora que lo decís, yo también estaba sintiendo eso, pero pensé que eran cosas de mi cabeza.

-No se vayan mañana, por favor, pasen el vuelo para otro día.

-Voy a hacer lo posible para convencer a Annaka.

-Esta bien, pero prométeme que si ella quiere volver, vos no volves con ella. -Yo la miré sin convencerme de aceptar.- ¡Prometemelo por tu hija, Cleo! -Dijo ella en un susurro, no lo dudé ni dos veces y asentí-

-Lo prometo. -Ella me abrazó y yo le seguí el abrazo, después de eso nos fuimos a dormir-