One shots- Johnshi

Medicina

Advertencias:

Kenshi tiene ojos ☝🏻
Johnny bottom
+18: menciones de eventos sexuales.
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VII
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Era la mañana de un domingo como cualquier otro, usualmente Johnny despertaba al lado de Kenshi, era una buena vista si le preguntasen. Parpadeo algunas veces buscando al azabache, pero al no encontrarlo supuso que el japonés había ido al trabajo. Sorpresa fue la suya cuando escucho arcadas viniendo del baño.

— ¿Ken? — Talló sus ojos de camino al baño, encontrándose con un pálido azabache sosteniendo su cuerpo sobre la taza del baño. — ¿Estás bien?

— Estoy... bien... — Las palabras parecían costarle mucho, las nauseas volvieron y con ellas su capacidad de hablar quedó anulada por completo.—

Johnny no pudo evitar preocuparse, hincándose al lado de su novio mientras le daba un suave masaje a sus hombros y acariciaba su cabello manteniéndolo hacia atrás.

— No creo que los hombres se embaracen, en todo caso. El embarazado debería ser yo y no tú, Ken-doll. — Bromeó extendiéndole papel a su novio.—

— Creo que ha de haber sido aquel postre extraño que prepararon los niños. Tú te has salvado, tuve que salvarte el culo y luego comerlo como recompensa. — Kenshi solo río con suavidad, jalando la cadena antes de irse a lavar los dientes y el rostro.—

— He de admitir que eso fue increíble, quizás debería hacer que los niños te hagan intoxicarte más seguido. — Carcajeo ganándose la mirada enojada de Kenshi, una mirada que sabía era "prepara el culo".—

•

Efectivamente minutos más tarde se encontraba mordiendo la almohada mientras Kenshi muy animado atacada su dignidad. Las piernas le temblaban y el cuerpo parecía intentar rendirse pese a las altas temperaturas a recorriendo su piel.
Sus gemidos se escuchaban por toda la habitación, agradecía que los niños hubieran salido con Liu Kang y Kitana desde el día anterior, porque estaría muy apenado de que escucharan tan obsceno suceso.

— Kenshi, Kenshi... — Johnny abrazo la almohada ahogando un gemido mientras usaba su mano libre para masturbarse.—

— ¿Qué? ¿La súper estrella de Hollywood no puede manejarlo? — Susurró sobre su oreja entre risas, maldecía por dentro la capacidad de Kenshi para ponerlo tan nervioso y pasivo.—

— J-jodete...

— Te estoy jodiendo, cariño.

Cuatro palabras y se perdió totalmente en el placer, los hilos de esperma se regaron por la cama, sentía el sudor bajarle por la espina dorsal y los gemidos habían disminuido, reduciéndose a leves jadeos con el nombre de su amante. Amante el cual acariciaba sus glúteos como si de melones se tratase.

— Tan enfermo no estabas... — Puchereo dándose la vuelta en la cama, acomodándose con ligereza para no sufrir las secuelas de su trasero profanado.—

— ¡Estoy enfermo! Ahora puedo sentir como la energía se me va. Creo que tomaré mi medicamento. — Una sonrisa ladina creció en su rostro mientras lo miraba.—

— Tengo la sospecha de que deberé tomar ibuprofeno más tarde... — Jadeo suavemente cuando los labios de su amado tomaron su atributo entre ellos.—

Kenshi era un hombre de muchas sorpresas, quién diría que su medicamento sería darle un oral durante 20 minutos, pausando su orgasmo y haciéndolo rogarle por dejarlo correrse.

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Gracias por leer.

A.B