☆ 𝐄𝐋 𝐄𝐍𝐂𝐔𝐄𝐍𝐓𝐑𝐎 ☆

13 3 6
                                    

Caesar caminaba tranquilamente por el palacio de noche, caminando lentamente hacia el jardín mientras tenía una pipa larga en sus manos y fumaba tranquilamente como algo ya normal en su vida.

exhala el humo y sonríe al escuchar una voz gritando mientras pelea con alguien cerca de él, por lo que miró hacia aquel lugar viendo a Aiko pelearse con uno de los cocineros, por lo que caminó hacia ellos antes de que algo pudiera pasar. Él se acercó a Aiko desde atrás.

Aiko levantó su mano para darle una cachetada al cocinero, por lo que Caesar agarró su brazo antes de que pudiera hacerlo y la acercó a él agarrando su pequeña cintura.

— ¿Qué está pasando aquí?

Dijo Caesar mientras miraba al cocinero con una mira despiadada en sus ojos.

𝐌𝐈𝐍𝐔𝐓𝐎𝐒 𝐀𝐍𝐓𝐄𝐒... ★

Aiko estaba tranquilamente ayudando en la cocina mientras hablaba con Emi 

— Entonces, ¿qué piensas del príncipe heredero?—dijo Emi con una voz suave mientras seguía revisando el arroz para la cena. 

Aiko miró hacia donde estaba emi y sonrió al solo pensar en Caesar. 

— Es muy sexi, pero aparte de eso, es muy arrogante y creo que es mujeriego por lo que he oído. —dijo Aiko con una voz suave y sensual mientras miraba a Emi con una mirada dulce y luego volvió a seguir cortando las verduras. 

El cocinero Riku se acercó a ellas dos, enojados por escuchar a Aiko hablar sobre los rumores del heredero con tanta libertad a su amiga cuando las demás podrían estar escuchándolas.

— Cuida tus palabras cuando hables del príncipe, o podrían salir mal para ti las cosas, recuérdalo. —dijo Riku con voz chillona y su cara amargada de todos los días mientras señalaba a Aiko con el cuchillo de cortas carnes, el cual tenía en una de sus manos el cuchillo y la otra la tenía en la cintura.

Aiko se levantó de su silla para enfrentarse al cocinero, aunque era una mujer pequeña y apenas le llegaba a los hombros al gran hombre.

— ¡Por qué tendría que cuidar mis palabras si las que tendrían que hacerlo son ellas por chismosas, ya que no estoy hablando con ninguna de ellas que les encanta escuchar y luego seguir diciéndolo y! 

Emi se acercó a Aiko y le puso la mano en la boca para callarla, pero fue imposible, ya que Aiko la mordió y siguió hablando mientras alzaba la voz. 

— ¡Van cambiando la historia yo me llevo muy bien con el Emperador y la Emperatriz y no conozco muy bien al príncipe heredero solo he escuchado cosas que me ha dicho el emperador sobre el aparte usted no debe de meterse en conversaciones en las que no lo han metido usted también es otro chismoso que siempre se va a contarle todo lo que hago a mi padre!

—dijo Aiko para luego levantar la mano por el impulso de su ira cuando sintió que alguien agarraba su brazo y también su cintura, Aiko miró hacia atrás cuando vio a Caesar el cual la sujetaba con fuerza mientras la acercaba a su enorme cuerpo musculoso lo cual la sorprendió bastante mientras su rostro se volvía completamente rojo.

𝓔𝒍 𝓔𝒎𝒑𝒆𝒓𝒂𝒅𝒐𝒓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora