Sentimientos escondidos

Estás preciosa.

Estás preciosa.
Sí, estás preciosa cuando te enfadas, cuando lloras sin motivo alguno, cuando sonríes mientras te apartas ese mechón de pelo que te molesta en los labios, mientras miras al vacío hundida en aquella canción que te recuerda a él. Cuando digas que tienes un cuerpo de mierda, o que 'como me gustaría a mí tener esos ojos o el culo que tiene esa', cuando sientas que no puedes vencer sola cualquier día de la semana. Cuando estés triste, cabizbaja, recuerda que eres preciosa. Recuérdalo cuando veas que ese pasa de ti, cuando no haya nadie que el lunes por la mañana te desee una feliz semana, cuando no recibas ni un maldito mensaje durante días. Por favor, recuérdalo: eres preciosa.
No dejes que la sociedad te etiquete con adjetivos que más les gustaría a ellos tener. Que te pongan una talla de ropa de la sección de vestidos anchos o demasiado estrechos y que decidan por ti lo que quieres que entre o salga de tu coño. No dejes que nadie te diga jamás que no estás preciosa, lucha. Lucha, hazlo por ti, porque te lo digo yo, porque estás preciosa. Cuando todo venga de repente como si fuera un puto tsunami que arrasa contigo y te hunde y te ahoga y te quita lo que más quieres, no te deja que respires ni un puto momento, recuérdalo, estás preciosa. Diles a todos aquellos que se han reído alguna vez de ti, a los que se han burlado, a los que han presumido de tener esto o aquello e hicieron que tú te fueras siempre cabizbaja pensando en todas esas palabras. Diles ahora que estás preciosa y no les expliques el por qué. Cuando le veas besar a otra, pasear con otra o mirar a otra como te miraba a ti, sonríele, porque tiene una ex preciosa. Cuando nadie apueste por ti, coge todas tus fichas y hazlo tú. Cuando ya no te quede nadie en quien creer, cree en ti. Cuando ya no tengas nada que querer, quiérete a ti. Cuando ya no tengas por quien sonreír, sonríe por ti. Y cuando ya nadie te lo diga, recuerda que yo lo hice una vez, que te lo dije, que estás preciosa, joder! Y sí, esto es para ti, la que lo ha leído, la que ha sonreído o a la que le ha entrado ganas de llorar. La que está igual de sola que yo y le gustaría que hubiera alguien ahí cada día y le dijera que estás preciosa. Sonríe, porque te lo vuelvo a decir una vez más hasta que te des cuenta de lo increíble que eres. Porque, estás preciosa.