—Quiero que te acuestes conmigo —esas palabras resonaban en la cabeza del peruano. Tenía ganas de golpearlo por tal propuesta.
—¿Qué? ¿De qué me estás hablando? —respondió, sorprendido.
Chile sonrió y comenzó a caminar hacia el bicolor, acorralándolo contra la pared, lo que hizo que el peruano se asustara.
—Vendrás hoy al hotel ***** a las 8 p.m. Yo te esperaré allí. Si vienes, sabré que aceptaste; si no es así, ya sabes lo que pasará con tus departamentos—dijo con una sonrisa.
—Yo no—
—No tienes que decírmelo ahora. Tienes hasta las 8 p.m. para pensarlo, y lleva un bolígrafo —dijo, alejándose de aquel lugar, dejando a Perú perplejo por tales palabras.
Narra Perú:
-Q-que se cree ese idiota!....
Inmediatamente llamé a mi presidente, molesto.
—¿Hola? ¿República del Perú?
—¿Hola? Mire, señor, ya hice lo que usted me pidió, pero él no aceptó.
—¿Cómo? ¡¿No insististe!?
—Lo hice, pero me propuso algo... que nunca voy a hacer.
—¡Perú! Sabes muy bien que tienes que hacer todo lo posible. ¿Cuál es la propuesta?
_Quiere... q-que me acueste con él...
-.......
—Mira, podemos hacer otra cosa, como reunirnos con la ONU y que ordene que nos dé plazo.
—Tienes que hacerlo...
—No podía creer lo que me estaba diciendo. ¿Ese idiota quería que yo me vendiera? —¿Me estás hablando en serio?
—Por favor, comprende que es por el bien del país. Tú sabes muy bien la situación. No tienes otra opción.
—Pero... yo no puedo.
—¡Lo tienes que hacer! ¡Por tus departamentos, por el país! Escúchame, aceptarás y lo complacerás... ¡Hazlo! Bueno, adiós, tengo una reunión. Que esto quede entre nosotros, nadie puede enterarse de tal cosa —dijo y cortó la llamada.
—¿Cómo se atreve...? Me vendieron —dijo mientras las lágrimas caían de sus ojos dorados.
-☆-
Fui al bar más cercano; en serio necesitaba desahogarme. Pedí varias cosas con tal de perder la conciencia, hasta que se acercó un tipo. Me halagó y me invitó una piña colada. La verdad, solo acepté y no escuché nada de lo que habló. Luego me invitó unas cinco más. Eran gratis, así que acepté; ya no me quedaba dinero y las bebidas gratis son lo mejor.
Aunque creo que intentaba drogarme, no soy tan idiota como para caer en esos juegos, así que llamé a un taxi antes de que lo notara. El taxi me llevaba al mismo infierno donde me esperaba Chile. Dije que iba al baño y me fui de ese lugar un poco ebrio. En el camino solo pensaba en mis hijos. Tenía tanto miedo de perderlos.
—Ellos son mi todo.
-☆- 8.15 pm
Bajé del auto, le pagué al joven y vi su camisa; tenía un lapicero.
—Señor —hip—, ¿podría venderme su lapicero —hip—, por favor!?
ESTÁS LEYENDO
Tienes una deuda que pagar~ //Chiru//
Teen FictionEl gobierno Peruano tenia una deuda con el chileno, cada dia el Perú hiba callendo en pobreza debido a esa deuda...Chile al ver esto decidio hacer un trato con Perú y asi cerrar su Deuda. Perú acepta el trato de su enemigo?